Pero qué graciosos son Gallego & Rey

Soy lector asiduo de El Mundo. Creo firmemente en la libertad de expresión y en la libertad de prensa. Sin duda dicha libertad ha de extenderse a los humoristas gráficos de los periódicos. Incluso cuando se pasan de graciosos. Incluso cuando son profundamente injustos. Incluso cuando, como ha pasado hoy con Gallego y Rey en El Mundo, se pasan de graciosos y son profundamente injustos. Pero claro, a la vez que creo en la libertad de expresión, también creo en la libertad de elección. En base a la misma me propongo no volver a comprar El Mundo si llego a la conclusión de que es posible que al abrir el periódico, me encontraré con una burla falsa y estúpida hacia Su Santidad Benedicto XVI.

En la viñeta de hoy de Gallego & Rey se ve en la primera viñeta la portada de un periódico que dice "18 civiles mueren en Beit Hanun por fuego Israelí. La mayoría mujeres y niños". En la siguiente viñeta aparece el Papa con cara de enfado diciendo "¡Ponme con Jerusalén!". En la última se nos muestra otra vez la portada del periódico con el siguiente titular: "el Vaticano presiona a Israel para que impida un desfile del Orgullo Gay en Jerusalén". Graciosillos que son José Gallego y Julio Rey ¿verdad?

Estos guasones pretenden que a Benedicto XVI le importa más un desfile de gays que la muerte de mujeres y niños por el ataque de unos asesinos (no me vale la NO DISCULPA de que ha sido un error, señor Olmert) uniformados. En realidad lo que ocurre es que a estos guasones, el hecho de que la Iglesia Católica pida que no se profane Jerusalén les escandaliza más que la muerte de esas mujeres y sus hijos. Y sí, hablo de profanación de Jerusalén porque no hay ni una sola marcha de orgullo gay en la que no se produzcan bromas blasfemas contra cualquier religión que no les aplauda sus costumbres sexuales. Supongo que no hace falta que ponga fotos para demostrarlo.

Pues nada, señores. Sigan ustedes así que ya nos encargaremos los ultra-católicos carcas y fundamentalista-tridentinos de no comprar su periódico o, en caso de hacerlo, darle el uso que el señor Boadella da a la prensa catalana.

Luis Fernando Pérez Bustamante