Un cristianismo más falso que el beso de Judas

Existe un tipo de cristiano que ama la tibieza, que no aprecia el papel pedagógico de la ley de Dios y las leyes que la Iglesia da a los fieles, que gusta de hacer lo mismo que Satanás. Es decir, cita la Escritura para que encaje con sus ideas propias, llegando incluso a ser tentación para los demás -Satanás lo intentó con el mismísimo Cristo-. Y si lo hacen con la Escritura, también con el Magisterio. La táctica es la misma.

Por ejemplo, cuando alguien dice que eso de ser santo se lleva mal con vivir en adulterio o en cualquier otro pecado mortal, y que para saber lo que está mal o está bien conviene, y mucho, acudir a la Escritura, la Tradición y el Magisterio de la Iglesia, nos salen con el siguiente pasaje del evangelio.

Caminando El a través de las mieses en día de sábado, sus discípulos, mientras iban, comenzaron a arrancar espigas. Los fariseos le dijeron: Mira, ¿cómo hacen en sábado lo que no está permitido?
Y les dijo: ¿Nunca habéis leído lo que hizo David cuando tuvo necesidad y sintió hambre él y los suyos? ¿Cómo entró en la casa de Dios, bajo el pontífice Abiatar, y comió los panes de la proposición, que no es lícito comer sino a los sacerdotes, y los dio asimismo a los suyos?
Y añadió: El sábado ha sido hecho para el hombre, y no el hombre para el sábado. Y dueño del sábado es el Hijo del hombre.
(Marcos 2,23-28)

Ese pasaje queda complementado perfectamente por estos otros relatos evangélicos:

Otra vez entró Jesús en la sinagoga; y había allí un hombre que tenía seca una mano. Y le acechaban para ver si en el sábadole sanaría, a fin de poder acusarle. Entonces dijo al hombre que tenía la mano seca: Levántate y ponte en medio. Y les dijo: ¿Es lícito en los días de reposo hacer bien, o hacer mal; salvar la vida, o quitarla? Pero ellos callaban.
Entonces, mirándolos alrededor con enojo, entristecido por la dureza de sus corazones, dijo al hombre: Extiende tu mano. Y él la extendió, y la mano le fue restaurada sana. Y salidos los fariseos, tomaron consejo con los herodianos contra él para destruirle.
(Marcos 3,1-6)

Y

Habiendo entrado en casa de uno de los principales fariseos para comer en día de sábado, le estaban observando. Había delante de él un hidrópico. Y tomando Jesús la palabra, habló a los doctores de la Ley y a los fariseos, diciendo: ¿Es lícito curar en sábado o no?
Ellos guardaron silencio. Y, asiéndole, le curó y le despidió, y les dijo: ¿Quién de vosotros, si su hijo o su asno cayere en un pozo, no le saca al instante en día de sábado?
Y no podían replicar a esto.
(Lucas 14,1-6)

Es evidente que Cristo no tenía NADA en contra de la necesidad de guardar el sábado y sí mucho contra una interpretación torticera de dicho mandamiento.

Deducir de eso que un cristiano puede hacer lo que le venga en gana en relación a la ley divina e incluso la eclesial, media un trecho. Respecto a la primera, el mismo Señor afirmó esto:

La Ley y los Profetas llegan hasta Juan; desde entonces se anuncia el Reino de Dios, y cada cual ha de esforzarse para entrar en él. Pero es más fácil que pasen el cielo y la tierra que el faltar un solo ápice de la Ley.
(Lucas 16,16-17)

Y esto:

Porque en verdad os digo que antes pasarán el cielo y la tierra que falte una yota o una tilde de la Ley hasta que todo se cumpla. Si, pues, alguno descuidase uno de esos preceptos menores y enseñare así a los hombres, será el menor en el reino de los cielos; pero el que practicare y enseñare, éste será grande en el reino de los cielos.
(Mat 5,18-19)

El evangelio hay que, por gracia, conocerlo y practicarlo entero. Nada que ver con andar por la vida diciendo que los mandamientos de Cristo y de su Iglesia son algo que uno puede ignorar por completo, aludiendo a las palabras de Cristo sobre el sábado.

Porque, queridos, muchos nos conocemos esa actitud antinomianista que consiste en decir: “si este mandamiento no me gusta, digo que está hecho para mí y no yo para él, y no lo cumplo“. Ese cristianismo es más falso que el beso de Judas.

Por otra parte, aludir a una falsa misericordia para justificar el pecado propio o ajeno es un insulto a la gracia de Dios que nos capacita para vencer al pecado y vivir en santidad. Al fin y al cabo, “Dios es el que obra en vosotros el querer y el obrar según su beneplácito” (Fil 2,13). ¿Vamos a hacer de Dios un ser incapaz de ayudarnos a cumplir su voluntad en nuestras vidas? Lejos de nosotros semejante blasfemia.

Luis Fernando Pérez Bustamante

26 comentarios

  
Antonio1
Desde luego que es una barbaridad usar ese texto para pasarse por el forro los mandamientos de Cristo y de la Iglesia. Tan barbaridad como pasarse ese texto por el forro. O pasarse al Santo Padre por el forro cada vez que dice o propone algo que no nos gusta.

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LF:
Yo es que al Papa le leo a la luz de la Tradición. O sea, eso de la hermenéutica de la continuidad, ya sabes. El que quiera leerle como si fuera un cismático hereje, tiene un problema.
12/07/14 1:24 PM
  
Antonio1
Desde luego que no se puede leer al papa como a un cismático. Y mucho menos situarse uno mismo al borde del cisma.

Y es verdad que los cristianos no podemos ser tibios. Por eso debemos denunciar las interpretaciones desenfocadas del catolicismo, sobre todo si están profundamente ideologizadas.

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LF:
Eso, eso, imagínate una interpretación del cristianismo apestando a antinomianismo mundano o a pelagianismo herético. Esa que consiste en echar al cubo de la basura la Tradición, la enseñanza de los Padres, santos, doctores de la Iglesia, etc.
Oponer al Papa, que se ha declarado hijo de la Iglesia, a todo el magisterio previo, es propio de ultramontanos pseudo-papistas.

Fin a nuestra amigable charla.
12/07/14 1:48 PM
  
Raúl
Me viene como anillo al dedo este post suyo de hoy, señor director, porque precisamente estos días andaba yo dándole vueltas a la cabeza a una de las últimas "reflexiones" mensuales del superior provincial de una determinada orden religiosa, de cuyo nombre en estos momentos prefiero no acordarme (del superior, quiero decir, pero si quiere usted más datos se los facilito encantado), en donde viene a decir algo así como que los problemas de Jesús con las autoridades religiosas de su tiempo se debieron al pequeño detalle de que no proponía prohibiciones, sino felicitaciones. Según la peculiar visión del Evangelio y del mensaje de Cristo que defiende este hombre (superior de una orden religiosa, insisto en el pequeño detalle), Jesucristo cambió el "no" de los mandamientos (en negativo) por el "dichosos" de las bienaventuranzas (en positivo). Y eso lo pagó caro.

Así que ya lo sabe, señor director, por si no había captado usted el asunto, Jesucristo cambió la perspectiva claramente negativa de los mandamientos, que desde ese momento son ya mucho más humanos y simpáticos.

Evidentemente, nada más leer esa frase se me vino a la mente el pasaje evangélico de Mateo en el que Cristo dice aquéllo de "no penséis que he venido a abolir la Ley o los Profetas; no he venido a abolirla sino a darle cumplimiento..." y tentado he estado de recordárselo a este buen hombre, pero creo que en el fondo es perder el tiempo. Cuando uno llega a interiorizar esas ideas y a difundirlas públicamente el tema tiene ya difícil remedio.

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LF:
¿Y qué hace ese heresiarca perverso, que difunde herejías, con estas palabras de Cristo?

Entonces Jesús habló a las muchedumbres y a sus discípulos, diciendo: En la cátedra de Moisés se han sentado los escribas y los fariseos. Haced, pues, y guardad lo que os digan, pero no los imitéis en las obras, porque ellos dicen y no hacen.
(Mat 23,1-3)


Puedes decir su nombre tranquilamente.
12/07/14 1:49 PM
  
Isabel. Granada.
En realidad muchos cristianos son mucho más falsos que el beso de Judas. Ya sabemos que el beso de Judas era la señal para entregar a Nuestro Señor, pero no tengo nada claro que Judas no amara al Señor. Creo que a su manera, equivocada, sí lo amaba. La prueba es cómo se arrepiente cuando ve por lo que estaba pasando el Señor y se siente tan culpable que va a devolver a los sacerdotes del Templo el dinero manchado de sangre que le habían dado por entregar al Señor. Cuando ve que no sirve para nada, decide quitarse la vida.

En la película "Jesucristo Superstar" al final se ven unas escenas en dónde Judas grita desesperado: ¡Por qué yo, por qué me elegiste a mí para tu estupido crimen. Mi alma está en tinieblas, me has matado...! Son las palabras de un hombre desesperado que grita a Dios preguntando, cuando es consciente de lo que ha hecho.

Tengo que reconocer y Dios me perdone si estoy equivocada, que me conmueve ésa escena, en la que se expresa toda la desesperación que tuvo que sentir Judas, al darse cuenta de lo que había propiciado.

Algunos actúan mal y siguen su vida al menos en apariencia, tan tranquilos.

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LF:
No, Judas no amaba a Cristo. El diablo no ama a Cristo. Y Judas lo era.

Respondió Jesús: ¿No he elegido yo a los Doce? Y uno de vosotros es diablo. Hablaba de Judas Iscariote, porque éste, uno de los Doce, había de entregarle.
(Jn 6,70-71)


Y además, era un ladrón:

Y dijo uno de sus discípulos, Judas Iscariote hijo de Simón, el que le había de entregar: ¿Por qué no fue este perfume vendido por trescientos denarios, y dado a los pobres?
Pero dijo esto, no porque se cuidara de los pobres, sino porque era ladrón, y teniendo la bolsa, sustraía de lo que se echaba en ella.
(Jn 12,4-6)


Y su suicidio no fue fruto de amor sino de desesperación. No hubo en él arrepentimiento verdadero, que lleva a la conversión y a pedir perdón.
12/07/14 2:03 PM
  
María
Yo creo que Jesucristo como usted dice no tuvo nada en contra del sábado si no contra la interpretación torticera que hacían los fariseos. Porque el dedicar un día al Dios que te ha creado, es justo y lógico y yo creo que todos los podemos hacer, salvo excepciones ya muy graves, por ejemplo que estés en un país donde no hay misas, o en medio de un viaje, no sé, cosas ya muy extremas. Si amas a Dios ¡hombre un día a la semana celebrar la Santa Misa!
12/07/14 3:09 PM
  
Haddock.
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12/07/14 3:10 PM
  
DJ L
La Iglesia nunca ha hecho una canonización "al revés", es decir, nunca ha dicho que fulano está en el Infierno.

Pregunto: ¿podría, tal y como ha hecho Jesús "canonizando" personalmente a San Dimas, hacerlo con Judas "la revés" al considerarlo diablo? Es decir, ¿se podría decir que Judas es el único humano seguro en el Infierno?

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LF:
No.
12/07/14 3:16 PM
  
JJ
Buenas,

eso del "no" de los mandamientos, cambiados por el "si" de las bienaventuranzas está difundidísimo en libros y homilías, me lo han dicho un montón de veces.

Pero, incluso cuando no era consciente del profundo error que contienen, me parecían palabras vacías, afortunadamente eso me salvó de tragar por estas cosas.

Se trata de lo que tenemos hoy en día: muchos derechos y ninguna obligación, y queremos poner a Jesús como padre y justificador de todas nuestras debilidades y caprichos.

La confianza se ha tornado en desesperación, como en Judas.
12/07/14 3:40 PM
  
Gerardo de México
Nosotros criaturas al menos debemos dedicarle un día a nuestro Creador.
Lo que Jesús dijo fue que sí podemos hacer el bien en el día del Señor.
Pero el adulterio no es un bien, es un mal, es pecado mortal.
12/07/14 6:57 PM
  
Juan Francisco
A mi eso de cambiar el "no" de los mandamientos por el "si" de las bienaventuranzas, me parece absurdo desde el momento en que leo cosas como la siguiente: "Ustedes han oído que se dijo: "No cometerás adulterio". Pero yo les digo: El que mira a una mujer deseándola, ya cometió adulterio con ella en su corazón." Sin mucho conocimiento, creo que Cristo hizo el espíritu de los mandamientos aún más exigentes, hasta el punto de poder cumplirlos solamente a través de la gracia. Lo que atacaba era la interpretación legalista y rigorista meramente humana de los fariseos.

Respecto de Judas Iscariote, leí alguna vez de un santo que podría haberse salvado, solamente porque en el momento de su suicidio podría haber estado enajenado y fuera de si. Pero eso es puramente especulativo y solo Dios lo sabe. Las palabras de Cristo no lo ayudan mucho: "El Hijo del hombre se va, como está escrito de él, pero ¡ay de aquel por quien el Hijo del hombre será entregado: más le valdría no haber nacido!». Mc 14,21.
12/07/14 6:59 PM
  
Luis López
La gran ley del cristiano, el fundamento de todos los preceptos es el amor, pues quién ama cumple la ley. Pero el primer amor del cristiano, como no puede ser de otro modo pues así nos lo mandó el Señor, es el amor a Dios. Y sus preceptos -todos y cada uno de ellos- siempre son llevaderos para quién le ama con todo su corazón.
12/07/14 7:38 PM
  
Yolanda

Lo del "no" de los mandamientos, cambiados por el "felices" de las bienaventuranzas era el mensaje fundamental de los curas progres de mi adolescencia. Como además la palabra pecado estaba proscrita (se decía "fallos, errores,faltas de amor" como mucho), pues estaba claro el mensaje.
12/07/14 7:50 PM
  
Proby
Corrección:

"Satanás lo intentó con el mismísimo Cristo"

en vez de

"Satanás no intentó con el mismísimo Cristo".

El cambio de una sola letra varía todo el sentido de la frase.

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LF:
¿Qué sería de mí sin ti?

Dios te lo pague.

Lo digo en serio.
12/07/14 9:32 PM
  
Juan Argento
Creo notar en el artículo un error en la expresión de la actitud antinomianista. Donde dice:

“si este mandamiento no me gusta, digo que está hecho para mí y yo para él, y no lo cumplo“

me parece que deberia decir:

“si este mandamiento no me gusta, digo que está hecho para mí y NO yo para él, y no lo cumplo“

Por otro lado, si bien es totalmente cierto que el mandamiento está hecho para el hombre y no el hombre para el mandamiento, eso no quita que es bueno para el hombre cumplirlo y es malo no cumplirlo. Análogamente, la prescripcion de aplicarse insulina está hecha para el diabético y no el diabético para la prescripción. Y ya sabemos lo que le pasa al diabético si no se aplica insulina.

Como me gusta decir, el que expresa su designio (los mandamientos) es el mismo que hizo el diseño (la naturaleza humana). El designio es inherente al diseño. (En ingles ambas palabras son "design".) Por supuesto me refiero al designio a nivel de ley natural, expresado en los mandamientos. El designio de elevación a la participación de la naturaleza divina no es inherente a la naturaleza humana (por eso es gracia) pero sí es coherente con ella.

Sobre la relación entre mandamientos y bienaventuranzas, cito de la homilía de Juan Pablo II en la Misa en el monte de las bienaventuranzas:

Hace precisamente un mes, tuve la gracia de ir allí, donde Dios habló a Moisés y le entregó la Ley, "escrita por el dedo de Dios" (Ex 31, 18) en tablas de piedra. Estos dos montes, el Sinaí y el de las Bienaventuranzas, nos ofrecen el mapa de nuestra vida cristiana y una síntesis de nuestras responsabilidades ante Dios y ante nuestro prójimo. La Ley y las bienaventuranzas señalan juntas la senda del seguimiento de Cristo y el camino real hacia la madurez y la libertad espiritual.
Los diez mandamientos del Sinaí pueden parecer negativos: "No habrá para ti otros dioses delante de mí. (...) No matarás. No cometerás adulterio. No robarás. No darás testimonio falso..." (Ex 20, 3. 13-16). Pero, de hecho, son sumamente positivos. Yendo más allá del mal que mencionan, señalan el camino hacia la ley del amor, que es el primero y el mayor de los mandamientos: "Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente. (...) Amarás a tu prójimo como a ti mismo" (Mt 22, 37. 39). Jesús mismo dice que no vino a abolir la Ley, sino a cumplirla (cf. Mt 5, 17). Su mensaje es nuevo, pero no cancela lo que había antes, sino que desarrolla al máximo sus potencialidades. Jesús enseña que el camino del amor hace que la Ley alcance su plenitud (cf. Ga 5, 14).

www.vatican.va/holy_father/john_paul_ii/travels/documents/hf_jp-ii_hom_20000324_korazim-israel_sp.html



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LF:
Cuando escribo rápido, me pasan esas cosas.
12/07/14 10:43 PM
  
Juan Argento
En tren de citar el Evangelio, es bueno recordar el episodio de Jesús con el joven rico, con el cual el Catecismo inicia el tratamiento del tema de los mandamientos, en el texto que cito a continuacion:

2052 “Maestro, ¿qué he de hacer yo de bueno para conseguir la vida eterna?” Al joven que le hace esta pregunta, Jesús responde primero invocando la necesidad de reconocer a Dios como “el único Bueno”, como el Bien por excelencia y como la fuente de todo bien. Luego Jesús le declara: “Si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos”. Y cita a su interlocutor los preceptos que se refieren al amor del prójimo: “No matarás, no cometerás adulterio, no robarás, no levantarás testimonio falso, honra a tu padre y a tu madre”. Finalmente, Jesús resume estos mandamientos de una manera positiva: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo” (Mt 19, 16-19).

2053 A esta primera respuesta se añade una segunda: “Si quieres ser perfecto, vete, vende lo que tienes y dáselo a los pobres, y tendrás un tesoro en los cielos; luego ven, y sígueme” (Mt 19, 21). Esta respuesta no anula la primera. El seguimiento de Jesucristo implica cumplir los mandamientos. La Ley no es abolida (cf Mt 5, 17), sino que el hombre es invitado a encontrarla en la persona de su Maestro, que es quien le da la plenitud perfecta.

Este pasaje del Evangelio es tratado extensamente en la encíclica "Veritatis Splendor", cuyas secciones 12 a 15 tratan específicamente sobre el rol de los mandamientos.
12/07/14 11:09 PM
  
Raúl
Totalmente de acuerdo con Juan Francisco. El pasaje del Evangelio donde Cristo habla del adulterio es demoledor y no merece más comentarios. Él no vino a abolir la Ley sino a darle cumplimiento, incluso haciéndola mucho más exigente en muchos mandamientos.
13/07/14 12:19 AM
  
M. Virginia
Con este berretín de oponer los "no" de los mandamientos a los "sí" de las Bienaventuranzas, se da una vez más la PESTE de haber introducido un pensamiento dialéctico, más propio de los protestantes (o esto o aquello), que católico (esto Y aquello).
Es lamentable, en efecto, oír este tipo de razonamientos torcidos hasta en homilías, como cuando se opone el Dios del A.T. al del N.T., confundiendo a muchos fieles que se preguntan si se trata de dos dioses diferentes.
Y ni hablar de las catequesis modernistas que ni se molestan ya en enseñar los Mandamientos, como si se tratara de fórmulas vacías. Total, todo se arregla entre misericordias y guitarritas...
Muchísimas gracias por este post, Luis.
13/07/14 5:15 AM
  
Fred
El libro de Isaias nos previene "Cesad de obrar el mal, aprended a obrar el bien", y el Salmo 49 nos dice "¿porque recitas mis preceptos y tienes siempre en la boca mi alianza, tu que detestas mi enseñanzas y te echas a la espalda mis mandamientos".
Este salmo lo veo dedicado a los cristianos que conociendo la ley de Dios, invocan su misericòrdia, para saltarse sus mandamientos. Se burlan de Dios, y se hacen incapaces de recibir su misericòrdia, para la cual es imprescindible aborrecer el pecado, y desear obrar el bien.

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LF:
Te dirán que citar el Antiguo Testamento es cosa de fundamentalistas.
13/07/14 10:22 AM
  
pablo velasco
"aludir a una falsa misericordia para justificar el pecado propio o ajeno es un insulto a la gracia de Dios que nos capacita para vencer al pecado y vivir en santidad."

Muy bien dicho, además ese falso argumento se usa mucho, y dentro de la iglesia...
13/07/14 10:55 AM
  
Alonso
1º Jesucristo dijo muy claro que no había venido a abolir la Ley mosaica. Eso lo primero.

2º Satanás ha leído las Sagradas Escrituras, las conoce de memoria. Pero sólo hace lo que sabe: el mal. Los cristianos, católicos especialmente, en su mayoría, no han leído las Escrituras (ya no digo entendido o comprendido). Prefieren otras fuentes, como la televisión, la cadena Ser, El País o la Caram.

PD: A modo de anécdota, en un grupo de jóvenes, "reflexionábamos" sobre la "Renovación" de la Iglesia y cómo nos veía la sociedad leyendo noticias de prensa de, por ejemplo, Público. "¿Qué debería hacer la Iglesia?" - nos preguntó el catequista-. La respuesta mayoritaria, que no la única, fue que "servir a los pobres". La explicación era que la Iglesia tenía que dejar de "controlar a la sociedad" y preocuparse más de los pobres. Yo aclaré 1º la fuente (muchos desconocían la línea editorial). 2º Qué público, valga la redundancia y la coherencia con el dinero, tenían. Público anticlierical. 3º Quién era el patrono. Judas siglo XXI trotskista. Preocuparse por los pobres, sí, por hacerlos pobres sacándoles el dinero. Trabajadores o lectores, da igual.
13/07/14 9:57 PM
  
Maga
Conozco a montones de Cristianos de ese tipo. Son los mismos que hacen una dogmática a su medida, que no creen en la Presencia Real ni en el Sacramento de la Penitencia y que consideran
Que no es pecado la fornicación u otros aspectos del Sexto Mandamiento, Mandamiento, que, por cierto, les resulta enormemente molesto.
14/07/14 2:35 AM
  
elba
DJL sacó el tema de la "canonización" de San Dimas",y me vino a la memoria algo que me quedó dando vueltas sobre como era que si todos vamos a ir primeramente al Purgatorio,como fué con Dimas,si Jesús le dijo -"en verdad te digo que hoy estarás conmigo en el paraiso",entonces el no fué primeramente al purgatorio?...un sacerdote me dijo que si uno tiene la Santa Unción al momento de su muerte no pasa por el Purgatorio.Es así?.Me puede explicar?,gracias desde ya.

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LF:
Tendría que repasar ese asunto. Ahora no lo recuerdo.
14/07/14 2:39 AM
  
Isabel. Granada.
Hay quién piensa que ante la depravación de las costumbres y los pecados mortales, hay un Dios que todo lo perdona, porque es un Dios Misericordioso, y lo peor es que son ya muchos los que se dicen cristianos y que viven totalmente dando la espalda a Dios y a los Mandamientos de la Ley de Dios. Dios es Misericordioso pero también es Justo, y en los Santos Evangelios se nos da a conocer su Doctrina.

En el Sermón de la Montaña, además de las Bienaventuranzas, dice:

"No he venido a derogar la Ley y los Profetas, sino a darles cumplimiento.

Por eso, si tu ojo derecho te está haciendo caer, sácatelo y tíralo lejos; porque más te conviene perder una parte de tu cuerpo y no que todo tu cuerpo sea arrojado al infierno.

30. Y si tu mano derecha te lleva al pecado, córtala y aléjala de ti; porque es mejor que pierdas una parte de tu cuerpo y no que todo tu cuerpo sea arrojado al infierno."

Como se puede ver, el Señor hablaba muy claro.



14/07/14 10:16 AM
  
Adrián Ferreira (UnCatolico)
El Sábado fue hecho para el hombre y no el hombre para el Sábado, pero Cristo no fue hecho para los hombres sino que los hombres fueron hechos, por y para Cristo.

«El es Imagen de Dios invisible, Primogénito de toda la creación, porque en él fueron creadas todas las cosas, en los cielos y en la tierra, las visibles y las invisibles, los Tronos, las Dominaciones, los Principados, las Potestades: todo fue creado por él y para él »
Colosenses 1,15-16

En la Eucaristía recibimos a Cristo.
14/07/14 10:17 AM
  
Adrián Ferreira (UnCatolico)
Sobre Dimas hermana Elba, estuvo con Cristo en el infierno, aunque estar ya con Cristo es estar en el paraíso por lo menos como estado del alma, santo Tomás dice lo siguiente:

Suma teológica - Parte IIIa - Cuestión 52 - Artículo 4: ¿Se detuvo Cristo algún espacio de tiempo en el infierno?

Objeciones por las que parece que Cristo no se detuvo ningún espacio de tiempo en el infierno.

1. Cristo descendió al infierno para librar a los hombres de él. Pero esto lo realizó al instante con su propio descenso, pues, como se dice en Eclo 11,23: Es cosa fácil en la presencia de Dios honrar repentinamente al pobre. Luego parece que no se detuvo espacio alguno de tiempo en el infierno.

2. Dice Agustín en un Sermón De Passione, que sin tardanza alguna, al imperio del Señor y Salvador, se rompieron todos los cerrojos de hierro. De donde, por boca de los ángeles que acompañan a Cristo, se dice: Príncipes, alzad vuestras puertas (Sal 23,7.9). Pero Cristo descendió allí para romper los cerrojos del infierno. Luego Cristo no se detuvo ningún espacio de tiempo en el infierno.

3. En Lc 23,43 se narra que Cristo, pendiente de la cruz, dijo al ladrón: Hoy estarás conmigo en el paraíso; por lo que resulta evidente que Cristo estuvo en el paraíso el mismo día. Pero no con el cuerpo, que fue colocado en el sepulcro. Luego estuvo con el alma, que había descendido al infierno. Y, de este modo, parece que no se detuvo espacio alguno de tiempo en el infierno.

Contra esto: está lo que dice Pedro, en Act 2,24: Al cual resucitó Dios, después de deshacer los dolores del infierno, por cuanto no era posible que éste lo retuviese.
Respondo: Así como Cristo, para asumir en sí mismo nuestras penas, quiso que su cuerpo fuera puesto en el sepulcro, así también quiso que su alma descendiese al infierno. Pero su cuerpo permaneció en el sepulcro un día entero y dos noches para que se comprobase la verdad de su muerte. Por lo que es de creer que también su alma estuviese otro tanto en el infierno, a fin de que salieran a la vez su alma del infierno y su cuerpo del sepulcro.

A las objeciones:

1. Cristo, al bajar al infierno, libró a los santos que estaban allí, no sacándolos al instante del lugar del infierno, sino iluminándolos con la luz de su gloria en el mismo infierno. Y, no obstante, fue conveniente que su alma permaneciese en el infierno todo el tiempo que su cuerpo estuviese en el sepulcro.

2. Se llama cerrojos del infierno a los obstáculos que impedían a los santos Padres salir del infierno, por el reato de la culpa del primer Padre. Cristo los quebrantó con el poder de su pasión y muerte, al instante de bajar a los infiernos (cf. Is 45,2). Y, sin embargo, quiso permanecer algún tiempo en el infierno por la razón antedicha (en la sol.).

3. Esas palabras del Señor deben entenderse, no del paraíso terrenal corpóreo, sino del paraíso espiritual, en el que se dice que viven los que gozan de la vida divina. Por lo cual, el ladrón descendió localmente con Cristo al infierno, para estar con El, puesto que le dijo: estarás conmigo en el paraíso; pero, por razón del premio, estuvo en el paraíso porque allí gozaba de la divinidad, como los demás santos.
14/07/14 10:24 AM
  
Isabel. Granada.
Acabo de leer los comentarios que aún no había leído, y algunos compañeros dicen que hay cristianos que además de negar dogmas de Fe, no le dan importancia al incumplimiento del sexto Mandamiento. Creo que cuando alguien es y se siente verdadero cristiano, al sexto Mandamiento cómo a todos los demás, les da el cumplimiento que se les debe. Y sabe perfectamente que si incumple cualquiera de ellos, está cometiendo un pecado. Pero lo malo de ésta sociedad, es que ha perdido la conciencia de lo que es pecado, porque simplemente se han ido apartando de la fe, si es que alguna vez la tuvieron, y han quedado en lo denominado, cristianos de bodas, bautizos y comuniones, y su cristianismo por tanto es meramente superficial. Esto pasa mucho en las cofradías de Semana Santa, por poner un ejemplo.

En Facebook no hace mucho, un cofrade muy implicado y muy devoto de las procesiones de Semana Santa, pedía el "me gusta" para un anuncio de preservativos.

Otro ejemplo: Un señor que cursó sus estudios desde su infancia en el seminario, y que salió de él poco antes de ser ordenado sacerdote. Busca un trabajo en la vida seglar, se casa, sigue con su mujer una vida cristiana, enviuda, y ahora está cómo pareja con otra viuda, sin matrimonio civil ni religioso alguno.

De ejemplos cómo los anteriores está llena desgraciadamente la sociedad actual.

Ayer, me parece que en ésta casa, leí un comentario en el que una señora decía que no hubiera querido ver los tiempos terribles (de vileza, maldad, corrupción, vicios de todo tipo, y sobre todo y lo que es peor, el alejamiento de Dios y de la Fe, que estamos viviendo), lo pongo entre paréntesis porque lo que hay contenido en él, es lo que yo identifico cómo de terrible. Comparto su comentario.
14/07/14 10:39 AM

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