Cristo Ancor, derecho al cielo
La escena debió ser impresionante. Cristo Ancor Cabello, cabo del ejército español, acababa de ser herido de muerte en un acto de guerra en Afganistán. El “blindado” que conducía -un cacharro propio de la guerra de Cuba- no soportó la explosión de una mina y sus ocupantes sufrieron las fatales consecuencias. Cristo Ancor se dio cuenta de que se moría. Y justo en ese momento, pidió ser bautizado. El capellán castrense, que previamente había catequizado al soldado, derramó sobre su cabeza el agua de vida que limpiaba todos sus pecados pasados. Cristo pasó entonces a ser de Cristo y se fue con Cristo. Directamente, sin necesidad de pasar por ningún purgatorio. Del infierno de la guerra en la tierra a la paz del cielo con Dios.
La gracia de Dios es así. No importa cuál sea la situación del que se acerca a Él para recibir su abrazo de amor. Dios no rechaza jamás a quien le busca, aunque sea un segundo antes morir. Aunque nadie debería de esperar a estar delante de la muerte para entregarse a Dios, nadie debería de pensar que es tarde para hacer tal cosa. El “buen” ladrón que supo reconocer la santidad de Cristo en la cruz, salvó su alma. Y son muchos los casos de personas que se encuentran con el Señor antes de pasar a mejor vida. Yo he sido testigo de ello en algunas ocasiones. Nunca se me olvidará aquella vez que fui a visitar a un primo hermano de mi madre al hospital de La Princesa en Madrid. Ese hombre fue alcohólico toda su vida, pero yo le tenía cierto aprecio porque las pocas veces que coincidí con él en mi infancia me había tratado con cariño y alegría. Cuando me enteré de que se moría, quise ir a hablarle del Señor. Me acerqué al lecho y cuando le hablé de Cristo me dijo: “No te preocupes hijo. Él está conmigo aquí“. Salí de la habitación del hospital con lágrimas en los ojos. Luego supe que un amigo suyo le había invitado a recibir los últimos sacramentos. Es una de esas ocasiones en las que Dios te da la gracia de ver como su evangelio de salvación se encarna delante de tus ojos.
El dolor de la familia del cabo no desaparece porque él haya partido hacia el cielo. Su madre y abuela le seguirán llorando. Sus hijos se han quedado huérfanos de padre sin apenas conocerle. Su novia venezolana pierde a quien, ya convertido a Cristo, estaba llamado a ser su marido. Pero en el cielo hubo fiesta cuando el agua bautismal limpió el alma del pecador que se moría. Y desde el cielo podrá interceder por sus seres queridos y por sus compañeros de armas. Curiosa paradoja: lágrimas por el joven que muere, alegría por el pecador que nace a la vida eterna.
Si tú, lector, estás alejado de la fe, si vives ajeno a Cristo y su Iglesia, te invito a que sigas los pasos y el ejemplo de este soldado que dio su vida por librar a una nación extranjera del horror de los talibanes. Hoy puede ser el día de tu salvación. Si no estás bautizado, pide el bautismo. Si estás bautizado y te has alejado de tu Salvador, acércate a un sacerdote y haz las paces con Dios. No hay nada en esta vida que sea más importante para ti. No hay mayor inversión: tu arrepentimiento a cambio de tu salvación.
Pax vobiscum,
Luis Fernando Pérez
40 comentarios
Y decir que en el ejército se consiguen muchas conversiones. Muchos soldados que no estaban bautizados o que se encontraban alejados de la fe, encuentran motivo para acercarse a ella.
Porque existe un ideal de compañerismo, de dar la vida por tu compañero, de ayudarle, de sentir la necesidad de proteger a la población civil con los medios que tienes a tu alcance. De olvidarse de uno mismo, para entregarse a los demás. Incluso de sacrificar el estar alejado de la familia para colaborar en un misión de entrega al mundo.
Además, al terminar de leer, parece que tiene que ir una rápidamente a confesar, a buscar reconciliación en imitación de este muchacho.
Gracias, LF.
Hoy ya estan naciendo niños libres en España despues de siglos de supersticion y oscuridad.
El gran DESCUBRIMIENTO TEOLOGICO del Vaticano II fue que la Iglesia se puede identificar perfectamente con la humanidad.
La verdad no esta en dogmas,ideologias o religiones...la VERDAD ESTA EN LA LIBERTAD DE CONCIENCIA el dictado de la conciencia es la verdad.La conciencia es el “sagrario” de la dignidad humana.
Los sacramentos y dogmas catolicos dividen,enfrentan y separan a la gente.Ese es el callejon sin salida de la Iglesia Catolica.
-Católico no bautizado.
-Evangelista
-Ateo
-Agnóstico
Los hechos prueban que esa pregunta no tiene importancia. Ha sido un héroe, un mártir católico.
La esperanza es Jesucristo, promesa que no defrauda. Muchas gracias, Luis Fernando, por este post.
Tal vez, en este caso, y en este foro, podría hablarse de bautismo de sangre. Con lo que tenemos, deseo, sangre y agua. Nadie ha dicho cual era su filiación religiosa anterior. Es decir que hubiera contestado si le hubieran preguntado hace un año ¿cual es tu religión?
-Católico no bautizado.
-Evangelista
-Ateo
-Agnóstico
Los hechos prueban que esa pregunta no tiene importancia. Ha sido un héroe, un mártir católico.
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Un "héroe" no es un "mártir católico". Cada cosa en su sitio. Un soldado en una guerra como ésta no muere por defender la fe.
Todo eso fue sustentado en buena medido por los principios expuestos por Carlo.
Se nos hablo del oscurantismo,de la superstición e incluso de la malvada inquisicion a pesar de que esta en 300 años condeno a muerte a un número tan peueño de gente que en la modernidad cualquier "progresista" los hubiera despachado en un solo dia.Pero la realidad es la que es.
Los principales adalides del progreso, Rousseau,Marx,Ernesto Guevara...constructores todos del hombre nuevo y virginal hablaban de manera sublime de la humanidad en su conjunto abstracto y lejano pero con todos aquellos que tenian nombre y rostro,que eran familiares y amigos suyo, estos tipos acababan comportandose de manera miserable y cruel.La misma sicologia.Tambien opinaban lo mismo sobre la verdad que Carlo:Todo lo que nos dicta la conciencia es verdadero y por lo tanto bueno.Aqui lo tenemos,la "diosa razon" haciendo de las suyas y convirtiendo estos últimos dos siglos en los más sangrientos de la historia de la humanidad.
No te preocupes Luis Fernando, pues el comentario que ha hecho Carlo ya lo puso, idéntico o similar, en un artículo mío.
Pero pena da bastante porque parece no haber entendido nada del caso, tan especial, del soldado asesinado en aquella tumba de civilizaciones que es Afganistán.
Basta de extender el concepto de martirio, que ya bastante extendido está, a límites asombrosos.
1258
Desde siempre, la Iglesia posee la firme convicción de que quienes padecen la muerte por razón de la fe, sin haber recibido el Bautismo, son bautizados por su muerte con Cristo y por Cristo. Este Bautismo de sangre como el deseo del Bautismo, produce los frutos del Bautismo sin ser sacramento.
Ergo si produce los frutos del bautismo, queda remitida la pena temporal.
En este caso,carlo, has pinchado en hueso porque no entiendes,lo que en este post se trata: es el gozo porque una persona,que ha dado la vida,pudo,g.a.D., cumplir su deseo de bautismo con pocos instantes de vida,por delante.Eso para nosotros,católicos,es un gozo y un motivo de alegría,tanto que, además de la noticia, LF ha escrito un post pleno de "entrañas de misericordia" con el cabo Cristian.
Lo demás es filfa,Carlo,¿lo entiendes ahora mejor?.
Por cierto, la Iglesia lleva, algo así, como 1970 años identificándose con la humanidad,si lo hace es porque contiene la fuerza de Dios para poderlo hacer, y no pasar de largo de las necesidades del hombre concreto.
Teología moral (libro 6º):
«Mas el bautismo del deseo es una conversion perfecta a Dios por contrición, o por amor a Él sobre todas las cosas, con deseo explícito o implícito del verdadero bautismo de agua, del cual toma su lugar en cuanto a la remisión de la culpa, pero no en cuanto a la impresión del carácter [bautismal] o a la supresión de toda deuda debida al castigo. Se llama de “viento” [flaminis] porque toma lugar bajo el impulso del Espíritu Santo, a quien se el da este nombre [flamen]. Ahora bien, es de fide que los hombres se salvan también por el bautismo del deseo, por virtud del canon Apostolicam De Presbytero Non Baptizato y del Concilio de Trento, sesión 6ª, capítulo 4º, donde está dicho que nadie puede salvarse “sin el bautismo o su deseo”».
Parece que dais pos supuesto que el bautismo de deseo produce los mismos efectos (aunque sin seguridad) que el bautismo de agua. Una cosa es que abra las puertas de la salvación. igual que la contrición las abre al pecador (tb sin seguridad ). Pero otra cosa es decir que condona la pena temporal de los pecados (como sí lo hace el bautismo de agua). Lo hará en la medida que la contrición sea un acto de perfecta y suma caridad (en algún caso puede que sí pero será muy raro). El bautismo de deseo (como el de sangre) no es un sacramento, ni produce el carácter sacramental sino que puede suplir, en la medida que haya caridad perfecta, la remisión de los pecados en cuanto a la culpa y por consiguiente comunicar la gracia santificante que produce la justificación, lo mismo que la confesión o la contrición con deseo de la misma.
El jesuita Feeney mantenía que para entrar en el cielo es necesario el bautismo de agua. Y para él fue expedido el decreto del Santo Oficio de 1949 (sólo en 1952 fue publicado y además no contaba con la firma del Papa Pío XII). (o sea no infalible).
Este decreto merece leerse íntegro porque expone perfectamente la doctrina de Roma en la actualidad. Termina de esta manera: "Pero no debe pensarse que cualquier clase de deseo de entrar en la Iglesia baste para que uno pueda salvarse. Es necesario que el deseo por el cual uno se adhiere a la Iglesia esté animado por la caridad perfecta. Ni puede un deseo implícito producir su efecto a no ser que la persona posea la fe sobrenatural". (puede extrapolarse al bautismo). Feeney sería más tarde excomulgado con una excomunión rarísima porque no se habla de su supuesta falsa doctrina sino solamente de haber desobecido al mandato de ir a Roma(él quería que se le dijera por qué tenia que ir a Roma pero nadie osó decírselo). ¿Excomunión nula ?
Todo lo cual deja bien claro que los bautismos de deseo y sangre no son verdaderos bautismos porque sólo hay "Un bautismo" (Ef. 4,5) que es el de agua del que dijo la Eterna Verdad " Quien creyere y se bautizare se salvará y el que no creyere(se entiende, y no se bautizare) se condenará" (Mc 16,16) y en Jn 3,5 "AMEN AMEN dico tibi nisi quis renatus fuerit EX AQUA ..non potest introire in Regnum Dei". Las definiciones ex catedra abundan en lo mismo y son numerosísimas. Y tb lo es el magisterio pontificio hasta el dicho decreto. (tomado todo ello "prout sonat" no habría bautismo de deseo)
La teoría del bautismo de deseo cuenta con algún escrito tardío de San Agustín y San Ambrosio. A él se sumó Hugo de San Víctor y San Bernardo (expresando dudas), y sobretodo Santo Tomás y más tarde San Roberto Berlarmino y tb San Alfonso que lo considera "de fide". Pero se refieren solamente al "deseo explícito de los catecúmenos ya instruidos en la Fe". S. Alfonso para considerarlo "de fide" se basa en el Concilio de Trento, en la declaración de la sesión 6 Cap.4 en donde se habla de que la "justificación no puede tener lugar sin el lavado de la regeneración (o sea el bautismo) "aut eius voto" "tal como está escrito" (aquí Jn 3,5). Algunos dicen que ese "aut" en realidad equivale a "et". Tb en español hay la misma ambigüedad en la conjunción "o". Por ejemplo "se prohibe cantar o bailar". Así que fuera de este texto (que casi todos los teólogos posteriores a San Alfonso no le dan la fuerza de "de fide" por su ambigüedad) no hay ninguna declaración magisterial y mucho menos "ex cathedra" que abone la teoría del "bautismo de deseo" hasta el VII y el CIC. El teólogo Ludwig OTT en su manual de Teología lo resume así: "El bautismo de deseo obra "ex opere operantis". Confiere la gracia de la justificación con la cual va unida la remisión del pecado original, de todos los pecados personales graves y de la pena eterna debida por el pecado. Los pecados veniales y las penas temporales debidas por los pecados (Nota mía: Purgatorio) se perdonan según sea el grado de la disposición subjetiva. No queda impreso el carácter bautismal". O sea de igualar el bautismo de deseo y el de sangre con el sacramento del bautismo nada de nada. En mi opinión debería eliminarse para estos dos actos la palabra bautismo puesto que sólo hay "un Señor, una Fe, un bautismo" (no tres)(Ef. 4,5).
Además , y es mi opinión que puede estar errada, quien se adhiriere a la doctrina de que no existen el "bautismo" de deseo y el de sangre, y que por lo tanto nadie se salvaría con estos dos "bautismos" no debería ser considerado hereje. El mismo Vaticano se ha pronunciado últimamente (según creo) sobre los grupos Feney-itas diciendo que su postura es "allowable".
A algunos puede escandilazar tanta contundencia, pero será porque no tiene en cuenta el dogma de la Predestinación que afirma que ésta es totalmente gratuita y sin proporción con los méritos propios. La predestinación nadie puede merecerla por más méritos sobrenaturales que haya contraído sino que es una gracia absolutamente gratuita que a lo más puede conseguirse con la oración incesante que infaliblemente consigue la perseverancia final para uno mismo (lo que equivale a decir que se está predestinado. Aquí hay que recordar la parábola de los trabajadores. Algunos llegaron a la hora undécima y obtuvieron el mismo salario (salvación) de los que trabajaron toda la jornada. el mismo Señor dijo "nadie puede venir a Mí si no lo trae mi Padre". Es el Padre el que llevó al cabo Cabello a la gloria de Xto (aunque él haya hecho poquísimo para merecerla como tb será nuestro caso y el de todos los predestinados)
Yo lo que quisiera saber es si tb se le ha dado la comunión por viático. Entonces tendrá una acción de gracias que se prolongará por eternidad de eternidades.
Como Ud. cita el párrafo de San Alfonso en que declara que la creencia en el bautismo de deseo es "de fide" tengo que observar que ese párrafo no ha sido suficiente para que muchos teólogos posteriores a él no consideren esa doctrina como "de fide" sino a lo más como "próxima a la fe" (se podrían citar).
Hay muchos casos de doctores de la Iglesia que pensaron ser de Fe cosas que en realidad no lo son como el "infierno para los niños no bautizados" (S. Agustín) y así se la niega Santo Tomás en su doctrina del Limbo; o la doctrina del "geocentrismo" que afirmó ser de Fe , San Roberto Belarmino, y algunas más.
Por otra parte su (de S. Alfonso) referencia a la sesión 14,4 de Trento (que en su cita del párrafo se omite ) es totalmente equivocada.
Una exégesis de Trento sesión 6, Cap. 4, tanto en esta sesión como en comparación de otras doctrinas de Trento, permitiría decir que esta doctrina no es de fe, como algunos se ven forzados a admitir.
La palabra "implícito" referida al bautismo de deseo en San Alfonso hay que interpretarla como "no pronunciada con los labios". Y no en el sentido que se le da actualmente.
El párrafo citado se opone a la declaración dogmática del Papa San León.
El resto de la doctrina de San Alfonso sobre la no salvación de paganos, musulmanes, judíos etc. en muchos lugares de sus obras, a pesar de la ignorancia invencible, no permiten abrigar confianza sobre la no oposición con San Alfonso de la doctrina actual del bautismo de deseo explícito e implícito. Y parece estar en oposición a lo que él mismo dice sobre el bautismo de deseo.
Como éste es un tema que me preocupa desde hace tiempo, me he permitido resumir casi telegráficamente algunas de mis lecturas sobre el asunto. Yo sigo creyendo que la negación de la doctrina del bautismo de deseo (la cual yo no profeso) no creo que deba considerarse como algo herético (como algunos dicen) porque podría defenderse que no es "de fide" ni siquiera "proxima a la Fe".
En mi opinión la actual creencia que estira al máximo la doctrina sobre la necesidad del bautismo para salvarse y el dogma de "Extra Ecclesiam nulla salus" es una de las principales causas de la ruina misionera y de la apostasía actual del pueblo y de los consagrados.
Por eso me he permitido apostillar su cita de San Alfonso. Le ruego acepte mis disculpas si cree que son observaciones impertinentes con el tema del hilo o fuera de lo comúnmente aceptado.
Es reconfortante.
Parece que dais pos supuesto que el bautismo de deseo produce los mismos efectos (aunque sin seguridad) que el bautismo de agua.
Yo no doy por supuesto nada. Me he limitado a citar el Catecismo y a contar lo que dice el manual de dogmática de Ott. El primero es magisterio que usted debe aceptar. Punto y final.
Se dice "punto final", no "punto y final".
Me alegro de que el cabo Cabello pudiera ser bautizado. Estoy seguro de que ahora se encuentra en los brazos amorosos de Dios.
En el ejército no son pocos los que encuentran la fe. Sorprendentemente, en los últimos decenios de la Roma pagana, una de las profesiones con más cristianos era la milicia (ahí está el ejemplo de la legión tebana). La cercanía constante con la muerte puede abrir a muchos los ojos.
"La muerte no es el final" es uno de los himnos populares más hermosos de nuestro idioma. Creo que muchos soldados, cuando lo cantan, aunque no sean buenos cristianos, se echan a llorar. Su autor es un sacerdote vasco, llamado Cesáreo Gabarain (la wikipedia dice que también es autor de canciones tan conocidas como "pescador de hombres"), y el ejército la adaptó como himno a los Caídos en 1981.
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