26.08.13

«El demonio del aborto no se puede vencer solamente discutiendo y marchando»


ENTREVISTA PARA INFOCATÓLICA A MONS. CRISTÓBAL BIALASIK, SVD, OBISPO DE ORURO Y PRESIDENTE DE LA FUNDACIÓN VIDA Y FAMILIA EN BOLIVIA

Preguntas formuladas por Juanjo Romero, Yvette Camou y Germán Mazuelo-Leytón:

Excelencia, como Presidente de la Fundación Vida y Familia en Bolivia, Usted conoce muy bien toda la problemática del aborto, la ideología de género, las uniones del mismo sexo, y temas anejos.

- Recientemente en Bolivia se está dando un debate respecto de la despenalización del aborto. Los católicos somos mayoría en nuestra patria, ¿por qué cree Ud. que se desconoce esto a la hora de promulgar leyes que atentan contra la dignidad de la persona? ¿Cómo percibe el pueblo católico el llamado de la Iglesia a desarrollar una Cultura de la Vida ante una cultura de la muerte?

El debate respecto al aborto en Bolivia se viene dando desde el año 2003, cuando el gobierno nacional de entonces quiso aprobar la Ley de «Derechos sexuales y reproductivos». La propuesta del proyecto de esta ley fue muy tramposa y no fue tomada  en cuenta por la sociedad. Entonces, justamente, gracias a la oportuna y sensata intervención del Nuncio Apostólico Mons. Ivo Scapolo la promulgación de esta ley fue frenada, lo que impulsó un gran debate sobre el aborto que personalmente acompañé en su primera fase como Secretario para la Pastoral de la Conferencia Episcopal de Bolivia. El mismo debate sigue hasta la fecha.  Han pasado muchas etapas que dependían del momento y problemáticas que los mismos gobiernos presentaban. Gracias a estos debates, poco a poco, la sociedad ha tomado conciencia del problema. Hoy día ya contamos con un pueblo que es mucho más consciente del problema.

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21.08.13

Realeza de María Santísima

Una gran señal apareció en el cielo: una Mujer, vestida del sol, con la luna bajo sus pies, y una corona de doce estrellas sobre su cabeza (Ap 1, 12).

La Mujer es nuestra Señora. El Sol que viste a la Mujer es la Santísima Trinidad. Ella aparece bañada con su luz deslumbrante, porque es las Hija del Padre, quien quiso que fuera concebida inmaculada; Ella es la Esposa del Espíritu Santo, y es la Madre de Jesús, el Hijo de Dios.

La Mujer lleva una corona, signo de su realeza, porque Ella es la Reina-Madre, su hijo es el vástago del Rey David y el Rey de Reyes.

La imagen y el oficio de la reina madre en el Antiguo Testamento, la «gran Señora», comoabogada ante el rey por el pueblo del reino,proféticamente preanuncia el oficio de la gran Reina Madre y Señora del Nuevo Testamento. Puesto que es María de Nazaret quien se convierte en la Reina y Madre en el Reino de Dios, como la Madre de Cristo, Rey de todas las naciones. La Mujer al pie de la Cruz (cf. Jn19, 26), se convierte en la Gran Señora (Domina) con el Señor y Rey, y por tanto será la Abogada y Reina del Pueblo de Dios desde el cielo.

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15.08.13

Fátima y la Asunción

Dos noticias alegran el corazón católico en el desarrollo de este Año de la Fe, primeramente que el Romano Pontífice actual estaría considerando la posibilidad de canonizar al venerable Papa Pío XII «con la fórmula de scientia certa (certeza de conocimiento) y por lo tanto incluso pasando por encima la beatificación», en segundo lugar, que el próximo 13 de octubre, Francisco consagrará la humanidad al Inmaculado Corazón de María.

En las apariciones de Fátima, nuestra Señora dijo: «Dios quiere establecer en el mundo, la devoción a  Mi Inmaculado Corazón».

El arzobispo Fulton Sheen, que defendió con su palabra y con su ejemplo la Eucaristía y la devoción a la Madre de Dios, dijo lo siguiente:

Estamos viviendo los días del Apocalipsis –los últimos días de nuestra era… Dos grandes fuerzas, el Cuerpo místico de Cristo, y el cuerpo místico del Anticristo, están formando filas para la catastrófica contienda.

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13.08.13

El falso mártir

Existe una afición muy extendida y que quizás tenga relación con todas las personas, y es el echar la culpa de sus males a los demás.

Recuerdo el chiste:

“Se encuentran dos amigos, uno soltero y otro recién casado. El soltero afirma:

-       De soltero siempre anda uno sucio y roto.

-       También de casado, responde el amigo. Mírame a mí, que estoy tan sucio y roto como tú, y eso que estoy casado.

-       Es verdad, pero al menos tú tienes desde ahora a quién echar la culpa: a tu mujer”.

Eso es todo: tener un macho cabrío sobre el que depositar las propias faltas. No querer admitir que es uno mismo, con su pereza y su torpeza, el principal artífice de sus propias miserias y calamidades.

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8.08.13

Concubinato y sacramentos

La unión por simple matrimonio civil tiene entre los católicos un apelativo que no es agradable: concubinarios, arrimados o amantes de la ilegalidad. Hay quienes evitan emplear el término concubinato y prefieren llamarlo situación matrimonial irregular. El Concilio Vaticano II lo llama amor libre.

El problema de la cohabitación es muy complejo, porque pueden intervenir muchos elementos, de diversa índole.

En efecto, algunos se consideran como obligados por difíciles situaciones —económicas, culturales y religiosas— en cuanto que, contrayendo matrimonio regular, quedarían expuestos a daños, a la pérdida de ventajas económicas, a discriminaciones, etc. En otros, por el contrario, se encuentra una actitud de desprecio, contestación o rechazo de la sociedad, de la institución familiar, de la organización socio-política o de la mera búsqueda del placer. Otros, finalmente, son empujados por la extrema ignorancia y pobreza, a veces por condicionamientos debidos a situaciones de verdadera injusticia, o también por una cierta inmadurez psicológica que les hace sentir la incertidumbre o el temor de atarse con un vínculo estable y definitivo. En algunos países las costumbres tradicionales prevén el matrimonio verdadero y propio solamente después de un período de cohabitación y después del nacimiento del primer hijo (Familiaris consortio, nº 81).

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