Carta de una lectora a monseñor Ladaria sobre el escándalo del IBB
Señor director, le envío copia del email que envié esta mañana a monseñor Luis Ladaria Ferrer, sj, Arzobispo Secretario de la Congregación para la Doctrina de la Fe, quien ha tenido la gentileza de responderme dándome las gracias por darle la información y me ha asegurado que la misma le llegará a quien corresponde.
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Luis Ladaria Ferrer, sj,
Me atrevo a escribirle porque me encuentro en estado de shock al enterarme de que el Institut Borja de Bioética ha manifestado, mediante la publicación de un informe (http://www.ibbioetica.org/es/img/home/BD_57_esp_F), su acuerdo con la futura ley del aborto del gobierno de Rodríguez Zapatero, que en breve será aprobada por las Cortes españolas.
Dicho instituto de bioética está gobernado por miembros de la Compañía de Jesús, a la que usted pertenece, de la Orden de los Hospitalarios de San Juan de Dios y por un escolapio. Toda la información sobre este escándalo la puede encontrar en InfoCatólica:
http://infocatolica.com/?t=noticia&cod=4485
http://infocatolica.com/?t=noticia&cod=4501
Además, hemos sabido que desde esa institución se publicó al menos otro informe favorable a la eutanasia. Que en estos momentos en que en España se libra una batalla a favor de la dignidad de la vida humana desde su concepción y contra la cultura de la muerte, unos religiosos se manifiesten de esa manera, causa un escándalo de dimensiones insoportables a un gran número de fieles, entre los que me encuentro.
Por ello le ruego que se tome la molestia de informar de lo que ocurre en Cataluña a los superiores de las órdenes religiosas a las que pertenecen los religiosos que son cómplices de esa infamia, y al cardenal Franc Rodé, Prefecto de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica; e incluso, si lo cree conveniente, al Cardenal Levada, Prefecto de la Congregación de la que usted es Secretario.
Suya afectísima en Cristo,
Ana
5 comentarios
Y gracias por el ejemplo.
¿A dónde has escrito para que podamos hacer lo mismo?
'Estamos en un mundo globalizado y se tiene que ver qué pasará con el hecho religioso. Las Iglesias se tienen que revisar mucho. La cristiandad se acabó, pero muchas de las autoridades católicas todavía tienen tics de control social. Ya no lo podrán ejercer y no lo tienen que ejercer, y eso es bueno.'
http://barrios.cat/wp-content/uploads/2008/01/entrevista-ramon-m-nogues.pdf
Cómo explica Juan Ramón Lacadena (catedrático de genética de la universidad Complutense y seglar muy cercano a la Compañía), en Veinte años de Bioética en España (U.P.Comillas, 2008): “La Bioética nació en Estados Unidos y allí mismo la presencia de los jesuitas en la Bioética se materializó en 1971 cuando el profesor de Obstetricia y Ginecología, Dr. André Hellegers (1926-1979) fundó, con el apoyo de la Fundación Kennedy, el Instituto de Bioética y Estudios de Población en la Universidad jesuítica Georgetown, Washinton D.C que tiene gran proyección mundial y es el más antiguo y completo centro académico de Bioética del mundo”.
En España el primer centro jesuítico de Bioética fue el Instituto Borja de Bioética, fundado en 1975 por Francesc Abel, S.J. en el seno del Centro Borja de Sant Cugat del Vallés (Barcelona). En 1984 se crea la Asociación Interdisciplinar José de Acosta (ASINJA) fundada por Alberto Dou SJ, con la finalidad de “fomentar el intercambio cultural entre personas dedicadas a las ciencias humanas y a las disciplinas teológicas y filosóficas” y que, ocasionalmente, aborda problemas bioéticos. Fue en 1986 cuando la Conferencia Episcopal Española pidió a la Universidad Pontificia Comillas que celebrara un seminario sobre temas de Bioética, que organizó el P. Javier Gafo. De este seminario se derivó a la Cátedra de Bioética de Comillas que en 1987 fundó el P. Gafo, quien la dirigió desde su creación hasta su fallecimiento en 2001, le sucedieron en el cargo: Jorge Ferrer SJ; Julio Martínez SJ, Juan Masiá SJ y en la actualidad, el seglar Javier de la Torre. En 2005 se crea la Cátedra Andaluza de Bioética en Granada y en 2007 se crea en Córdoba el “Foro de Bioética Francisco Suárez”, del centro cultural San Hipólito, coordinado por Manuel Porras del Corras. Además de Javier Gafo... hay que mencionar muchos otros como: Francesc Abel y Carlos Alonso Bedate, que han ocupado puestos de relevancia en comisiones de Bioética a nivel autonómico, nacional o de la Unión Europea, así como su aportación en las comisiones previas a la redacción de determinados textos legales de ámbito nacional o regional. Y Eduardo López Azpitarte SJ, Juan Masiá, Juan Vélez, E. Colomer, M. Cuyás, Augusto Hortal, Gonzalo Higueras, Ignacio Núñez de Castro o Julián Rubio, entre otros.
En palabras del rector de Comillas, José Ramón Busto: “Lo que ha caracterizado el trabajo de la Cátedra de Bioética ha sido el rigor en la reflexión ética que ha querido mantener siempre un equilibrio, no fácil de conseguir, entre la fidelidad a las exigencias de la fe cristiana en temas de bioética, tal como las viene expresando el Magisterio de la Iglesia y la atención tanto a las demandas de la investigación en las ciencias médicas y sanitarias como a las posibilidades que el desarrollo de nuestras técnicas ofrecen a los profesionales de la salud que han de enfrentase cada día a nuevos dilemas”.
Conozco al P. Abel desde hace como veinte años. No sé nada de bioética ni de medicina, pero sí se que él-A PESAR DE LAS APARIENCIAS- ama profundamente a la Iglsia como sacerdote y jesuíta y como científico sufre. A él acuden muchas altas jerarquias para consultarle sobre temas de bioetica. Le he tratado y es un hombre humilde en su sabiduría- porque es un sabio- y el único superviviente del trio que fundó Medicus Mundi.
Su vida es Dios y la salud....física y espiritual de los hermanos. Es un sacerdote piadoso, mariano, amantísimo de Cristo y profundo teólogo.Un hijo fiel de S. Ignacio a cuya Compañía honra , lo creo sinceramente. Estamos en un momento delicado del diálogo entre la ciencia y la fe; la fe y la teología; la fe y la razón científica. Son momentos-¡como ha ocurrido tantas veces a lo largo de la historia!- en que hay que serenar los animos y no empezar a tirar pedradas sin conocimiento de causa. Obedecer a la Iglesia, ¡POR SUPUESTO!, y no dudo de que el Padre Abel lo hará, como ha dado muchas muestras de ello, pero el conocimiento que trae la investigación ciéntífica es imparable. Y el magisterio de nuestra santa Madre Iglesia,- y a sí debe ser- es más lento y prudente y solo al cabo, a veces de siglos, acepta como verdaderos asuntos relacionados con la ciencia y con otras disciplnas.
Soy española y todos sufrimos mucho con lo que está pasando en nuestro país a causa de las leyes tan bárbaras que nos están casi imponiendo desde el gobierno.
Hay que orar mucho, ofrecer, obedecer a laI glesia, ¡claro está!, y también dejar que los estudiosos puedan exponer sencilla y claramente sin temores sus hallazgos. Si luego hay que decir amén a lo que los Obispos dictaminen, pues bien, pero eso no es óbice para que la ciencia y la sabiduria de los científicos se paralice.
Pongo la mano en el fuego por el Padre. No votemos a los que legislan el mal, pero dejemos hacer a los científicos su trabajo como a los teólogos etc.
No sé de bioética,pero conozco a la persona...Y siento una gran pena por la pena y el dolor que a él le debe estar causando este asunto.
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