Entrevista a Miquel Bordas, pdte de la “Milicia de la Inmaculada”, fundada por S. Maximiliano M. Kolbe
Miquel Bordas Prószyński, nació en Varsovia en 1982 durante el estado marcial, hijo de un matrimonio hispano-polaco. Se crio entre Cataluña y Polonia, trasladándose posteriormente a Madrid para cursar sus estudios universitarios. Doctor en Derecho y abogado. Casado. Desde 2021 es Presidente Internacional de la Asociación Pública de Fieles “Milicia de la Inmaculada” fundada por San Maximiliano María Kolbe.
¿Cómo conoció la Milicia de la Inmaculada?
A quien primero conocí, desde que prácticamente tengo uso de razón, fue al fundador de la Milicia de la Inmaculada, a San Maximiliano María Kolbe: el franciscano conventual polaco que lanzó hace cien años en Cracovia la revista del “Caballero de la Inmaculada”; que creó Niepokalanów, la Ciudad de la Inmaculada; que fue misionero en Japón; y que finalmente ofreció su vida en la celda de hambre en Auschwitz por un padre de familia. Siendo mi madre de origen polaco y habiendo vivido en casa desde la infancia la espiritualidad mariana propuesta por San Maximiliano, no fue hasta más tarde, hace unos once años, cuando me encontré con una hojita de la Milicia de la Inmaculada (“M.I.”) en el Monasterio de la Inmaculada y de San Pascual de Madrid (de las Madres Clarisas), en el que aparecía una página web y un email. Escribí interesándome y enseguida me contestó el P. Gonzalo Fernández-Gallardo, franciscano conventual, que en aquel momento era el asistente espiritual de la M.I. en España, invitándome a la asamblea que iban a celebrar próximamente en Madrid. Allí me consagré a la Inmaculada, comenzando esta andadura apasionante al servicio de nuestra Madre formando parte de la M.I.