Juan Carlos Monedero es licenciado en Filosofía por la Universidad del norte Santo Tomás de Aquino. Escritor. Argentino. Autor de varios libros y un buen número de artículos.
¿Qué papel o lugar tienen las Sagradas Escrituras dentro de la doctrina católica?
Tienen un lugar decisivo. Dios ha inspirado a ciertos hombres, a lo largo del tiempo, para que ellos comunicaran sus mensajes. Estos mensajes se enseñaron de generación en generación de forma oral y, luego, terminaron siendo puestos por escrito. La enorme mayoría de estos hombres nunca se conocieron entre sí, pero sin embargo todos están unidos por el mismo Espíritu Santo.
En el Nuevo Testamento, los escritores sagrados (los hagiógrafos) sí se conocieron entre sí: de hecho, San Mateo y San Juan evangelista eran dos discípulos de Jesús. Marcos fue discípulo de San Pedro. San Lucas fue discípulo de San Pablo. Sabemos que San Pablo conoció a los apóstoles, como sabemos que muchas de sus cartas forman parte del canon bíblico. Y podríamos seguir. Los 71 o 73 libros de la Biblia (según cómo se consideren, son 71 o 73) constituyen la Tradición Escrita. Por otro lado, como dice Castellani en El Evangelio de Jesucristo, los Cuatro Evangelios fueron primero comunicados oralmente en arameo y –cuando la predicación al habla griega se hizo necesaria– las palabras en arameo son traducidas al griego.
Luego, como todo texto escrito, los católicos reconocemos un Magisterio capaz de interpretarlo. Además del Magisterio, los católicos reconocemos también una Tradición Oral. En la doctrina católica, tiene lugar una armónica síntesis entre Magisterio, Tradición Escrita (Biblia) y Tradición Oral.Leer más... »