Contrarrevolución católica en el sistema democrático moderno. Análisis de Fernando Romero
Fernando Romero Moreno es abogado por la Universidad Nacional de Rosario (UNR) y Profesor Superior Universitario por la Universidad Católica Argentina (UCA). Está dedicado desde hace 30 años a la Educación, tanto en cargos docentes como directivos. Actualmente trabaja en el Colegio Los Caminos (APDES-Pilar). Es autor del libro “La Nueva Derecha-Reflexiones sobre la Revolución Conservadora en la Argentina” (Grupo Unión, Buenos Aires, 2021). Está casado y tiene 4 hijos.
¿Por qué un católico hoy debe luchar por el Reinado Social de Nuestro Señor Jesucristo?
No es un combate que deba librarse hoy sino siempre. Lo fue para nuestros antepasados, lo es para nosotros y lo será para nuestros descendientes, hasta la Parusía. Nuestro Señor Jesucristo es Rey, como enseñaba el Papa Pío XI, por derecho de naturaleza (es Dios) y por derecho de conquista (nos redimió y nos liberó del poder de Satanás). Esa Realeza no es de este mundo en un sentido político-prudencial (su misión en la tierra no fue liberar a los judíos de los romanos ni es en la actualidad, por ej. ocuparse directamente de terminar con la desnutrición infantil a nivel mundial) pero sí lo es en cuanto a que todo el orden social y político debe reconocer a Jesucristo como Rey y subordinarse a la ley natural (que se conoce por la razón) y a la ley-divino positiva (a la que llegamos gracias a la Revelación).
Por lo tanto, no es Rey en un sentido meramente retórico, ni reducido sólo a lo espiritual o a la vida privada, sino en sentido real, referido a lo espiritual y a lo material, y que se extiende a lo individual como a lo social. Negar la Realeza Social de Nuestro Señor Jesucristo fue considerado un grave error por todos los Padres de la Iglesia e incluso herejía por San Juan Crisóstomo. Como bien decía Jean Ousset, esta Realeza no “es de este mundo” sino sobre este mundo.
¿Por qué el catolicismo debe impregnar el orden temporal, es decir instaurar o restaurar lo que se conoce como Cristiandad?
Porque es una exigencia que se desprende de la propia Fe católica. Así lo explica el actual Catecismo de la Iglesia Católica al tratar sobre el Primer Mandamiento. En el número 2105, afirma: “El deber de rendir a Dios un culto auténtico corresponde al hombre individual y socialmente considerado. Esa es ´la doctrina tradicional católica sobre el deber moral de los hombres y de las sociedades respecto a la religión verdadera y a la única Iglesia de Cristo´ (DH 1). Al evangelizar sin cesar a los hombres, la Iglesia trabaja para que puedan ´informar con el espíritu cristiano el pensamiento y las costumbres, las leyes y las estructuras de la comunidad en la que cada uno vive´(AA 13). Deber social de los cristianos es respetar y suscitar en cada hombre el amor de la verdad y del bien. Les exige dar a conocer el culto de la única verdadera religión (…) en la Iglesia católica y apostólica (cf DH 1). Los cristianos son llamados a ser la luz del mundo (cf AA 13). La Iglesia manifiesta así la realeza de Cristo sobre toda la creación y, en particular, sobre las sociedades humanas(cf León XIII, Carta enc. Immortale Dei; Pío XI, Carta enc. Quas primas)”.