Jesús Grao: "Con mil muertes por aborto y eutanasia en Castellón, la calle debe ser un clamor el día 28"

Jesús Grao León, tiene 34 años y está casado desde hace dos años, pertenece al Camino Neocatecumenal y a JRC, Jóvenes por el Reino de Cristo, rama juvenil del Apostolado de la Oración donde conoció a su mujer. Ayudó a montar en Castellón 40 Días por la Vida y le ofrecieron hace cuatro años formar parte de la junta de Provida Castellón. Forma parte de la mesa por la vida de la diócesis y ha organizado otras concentraciones a nivel local. Todo esto lo ha hecho de forma voluntaria, pero a partir del próximo enero trabajará como dependiente en un rastrillo solidario de Provida a media jornada. Igualmente dedicará mucho más tiempo a Provida, buscando crear en cada municipio de la provincia un pequeño grupo Provida que tenga su propia autonomía en su localidad, pero que esté en continua comunión con el movimiento Provida a nivel provincial para acometer acciones más grandes a nivel de toda la provincia.

¿Por qué han organizado desde Pro-Vida Castellón una concentración cerca del ayuntamiento de la ciudad el día 28 de diciembre?…

En nuestra tradición cristiana occidental, el día 28 de diciembre es un día donde recordamos la matanza de niños por parte de Herodes en el año 1 de nuestra era. Hoy aún mueren muchos inocentes y es un día en el que queremos que esta situación no se pierda de vista e interpele a cada uno de nosotros. También pretendemos aglutinar bajo la bandera Pro-Vida internacional a todo aquel que defienda la vida desde la concepción a la muerte natural, sin que sea obstáculo para nadie el que sea una organización u otra quien convoca. No puede ser que en nuestra provincia en el último año hayan muerto casi 1000 personas entre abortos y eutanasias y que la calle no sea un clamor. Yo explico que es como si cada día del año matasen a una familia entera y nadie se inmutase. Y que sea en el ayuntamiento es porque ahí están nuestros representantes más directos a nivel local y es en pleno centro de la ciudad donde sabemos que tendrá más repercusión.

¿A qué atribuye el aumento de abortos y eutanasias en la provincia estos años?

Pienso que una causa es la baja autoestima que tenemos. En mi opinión, y es muy personal, alguien que se aprecia y sabe de su valor como ser humano no opta jamás por un aborto o una eutanasia. Alguien que se sabe valioso por ser quien es sin importar nada más es capaz de dar ese valor también a los demás; por contra, si uno piensa que para ser valioso hay que hacer algo y dar la talla, termina exigiendo a los otros lo mismo. Por tanto, ¿qué valor puede tener una criatura que está formándose si no ha hecho ningún mérito en su corta vida? Y si encima es un obstáculo para lograr en tiempo y forma algo que se cree necesario para triunfar en esta vida, ¿qué podemos esperar? Pienso que si se invirtiese tiempo y dinero en la salud emocional y psicológica de las personas, no solo disminuirían los suicidios, sino también los abortos y las eutanasias. Cuando uno se ama bien a sí mismo, tiene ganas de amar a otros; no se puede evitar, es un círculo virtuoso de amor.

Por supuesto, todo sopla en contra de la defensa de la vida; no es ningún secreto la promoción desde organismos internacionales y nacionales del aborto y la eutanasia. Esta política condiciona todos los estratos de la sociedad; yo diría que la infecta como un virus que se activa ante cualquiera que se presenta en una situación de vulnerabilidad y empieza a presionar para que la persona en cuestión “elija libremente” abortar o pedir la eutanasia. Tenemos chicas que han pedido ayuda a entes públicos y privados para tener a sus hijos y solo les han recomendado abortar como mejor solución. Esto es un abuso en toda regla y uno de los motivos por los que aumenta el aborto; no dan opción porque te dicen que solo hay una opción correcta.

¿En qué consistirá a grandes rasgos el manifiesto que se leerá?

Explicaremos la situación local de nuestra provincia y lanzaremos algunas reflexiones que todo el mundo debería hacerse. Después proclamaremos ocho puntos que consideramos importantes en la defensa de la vida humana. Ocho verdades y principios irrenunciables, como el reconocimiento de la vida humana desde la concepción a la muerte natural o que esta verdad ha de ser amparada y protegida por la legislación y los poderes públicos. El manifiesto terminará con un par de puntos prácticos que recomendaremos a todos los Pro-Vida que allí se reúnan. El primero, que el compromiso con la vida no se limita a estar contra el aborto y la eutanasia; eso es clave, pero más importante es no dejar tirada a ninguna mujer que sigue adelante con su embarazo o al enfermo que decide seguir viviendo pese a su situación. Dejar a esas personas tiradas y solas es lo mismo que una condena a muerte; precisamente la soledad y la desesperación son las que inclinan el plano para que una mujer decida abortar o un enfermo quitarse la vida. No es compatible vivir cómodamente desde el sofá de tu casa y pretender que alguien no elija el aborto o la eutanasia solo porque piensas que está mal.

Todo el mundo sabe que está mal; la única diferencia es quién hace algo por ayudar a evitarlo y quién no. Yo mismo he recibido el pedido de mujeres embarazadas que pensaban en abortar porque creían que tenían problemas gravísimos y algunas realmente tenían situaciones complicadas y dolorosas. Les ofrecimos solución a cada uno de sus problemas y finalmente tuvieron a sus hijos y no quisieron hacer uso de la ayuda que les ofrecíamos. Simplemente, sabiendo que si algo salía mal tendrían un respaldo, les fue suficiente para disipar todas sus dudas. Hoy tienen a sus hijos y me encanta ver cómo comparten en sus estados de WhatsApp lo felices que son, porque aunque ya no nos necesiten, les hacemos un seguimiento porque nos motiva ver cómo vale la pena cada esfuerzo por que una vida salga adelante.

¿Qué nos puede adelantar acerca de los testimonios que habrá ese día?

Un hombre, Antonio, contará su sufrimiento como padre. Hace años salía con una chica que abortó a dos hijos suyos; intentó seguir con esa relación, pero al final se rompió. Él se sabe padre, pero por mucho tiempo nadie acogió su dolor. Se les niega el derecho a sufrir esa pérdida a los hombres que sí querían cuidar de sus hijos, se les cancela y eso es algo que también queremos reivindicar, las víctimas silenciadas del aborto.

También Mónica, una mamá víctima del aborto, contará cómo fue su experiencia, qué la llevó al aborto y cómo, cuando se arrepintió, aquellos que la habían animado a abortar no validaron su dolor, sino que pusieron aún más culpa sobre ella. Ahora es una mujer valiente que cuenta su testimonio para que otras chicas no cometan ese error, a pesar de que no es nada fácil para ella ponerse ahí en la picota, pero es una mujer que ama mucho y quiere evitar a otras chicas ese sufrimiento.

¿Por qué lucha para que el movimiento a favor de la vida en Castellón esté unido y sea transversal?

Porque es el único camino. Sí, entre los que defendemos la vida hay muchos matices, pero no es inteligente ni beneficioso incidir en las diferencias. Cada organización o persona particular está en su derecho de defender la vida según como su conciencia le exija, pero lo que hay en juego son vidas humanas. Hay que tener espacios donde lo importante sea el mínimo común denominador, que es exigir que se defienda la vida desde la concepción a la muerte natural y aglutinar esfuerzos y recursos en acciones concretas de ayuda a cada víctima de la cultura de la muerte. Nuestros servidores públicos tienen que ver que no somos pocos y que vamos a ser coherentes con nuestro voto; si no defienden el más importante de los derechos y si no dan pasos para ello, no los vamos a votar.

También porque hay miles de víctimas del aborto y la eutanasia silenciadas y necesitan un movimiento fuerte que las represente y las ayude. Empezar a estar en las calles con fuerza nos dará visibilidad para que esas personas cojan la confianza de pedirnos ayuda.

La defensa de la vida no es patrimonio de ningún partido político o creencia; tiene que ser una labor de todos y queremos un movimiento que sea capaz de influir en todos los partidos políticos y organizaciones con capacidad de acción y para eso necesitamos que aquellos provida que militan y participan en ellos, porque los hay en todas partes, se unan en acciones coordinadas. Sabemos que a los partidos promotores del aborto y la eutanasia no les podemos pedir su abolición, pero sí ayudas concretas y políticas que pueden encajar en sus idearios y programas políticos que sean beneficiosos para construir una cultura de vida. Si no colaboran, tendrán que explicar por qué a la opinión pública.

Está claro que en los partidos que dicen defender la vida las exigencias serán más grandes que en los que la atacan, pero en esta lucha no se puede dejar un flanco por perdido; por nuestra parte no será, y cada cual que sea responsable de sus actos. La sociedad va a saber qué propuestas daremos y la respuesta de los partidos políticos al respecto.

¿Van a tener algún apoyo a nivel político o de la diócesis?

Aún estamos haciendo ronda de contactos, pero ya hemos recibido el apoyo del partido VOX a nivel local en las ciudades de Castellón de la Plana y Vinaroz. También las organizaciones locales de Pro-Vida y 40 Días por la Vida apoyan la iniciativa y ya lo hemos puesto en conocimiento de la mesa por la Vida de la diócesis de Segorbe-Castellón, que siempre ha sido favorable a iniciativas parecidas. Vamos a contactar con más agrupaciones políticas, civiles y privadas para recabar su apoyo y participación. Tenemos que buscar la unidad de todos los defensores de la dignidad y la vida humana. El futuro de nuestra sociedad está en juego; es el momento de elegir entre el camino que nos interpela y complica la vida, pero nos hará felices, o el camino fácil y cómodo que nos llevará a la destrucción como personas y como sociedad.

¿Por qué es importante que ese día haya una gran afluencia de gente?

Primero, porque es el idioma que entienden los poderes políticos. En España parece que no nos acostumbramos aún a esto; siempre tenemos una excusa para justificar quedarnos en el sillón o dar nuestro apoyo moral desde casa, pero hay que ver los éxitos de otros países en defensa de la vida. En EE.UU, 50 años de movilizaciones y no abandonar las calles han dado como resultado la revocación del caso que despenalizó el aborto en todo el país.

Tenemos que aceptar que hemos perdido mucho tiempo y que esto es una lucha a largo plazo donde los resultados a nivel nacional tardaremos años en verlos. También porque parece que estas cuestiones de gran calado pueden no tener nada que ver con un ayuntamiento, pero no es cierto; se pueden hacer muchas cosas a favor de la vida como campañas de concienciación, subvenciones a entidades locales que se ocupan de personas vulnerables ante el aborto y la eutanasia, declaraciones políticas y apoyo institucional y jurídico desde los servicios sociales locales.

En cada estrato de nuestro organigrama político y social se puede hacer algo que marque la diferencia entre la vida y la muerte de alguien. Y sobre todo porque las víctimas necesitan nuestra voz y nuestra presencia. A todos nos duelen las imágenes de las víctimas de las guerras, del hambre y del terrorismo, pero no hay que irse lejos; en la puerta de al lado seguramente encontrarás a alguien sufriendo y que por sí solo no va a poder salir adelante.

¿Qué otras acciones han hecho en el movimiento Pro-Vida Castellón durante el año?

Durante todo el año existen acciones a nivel provida en Castellón, desde la atención a más de 300 mujeres en la asociación de Provida Castellón, que reciben enseres y alimentos de primera necesidad para ellas y sus hijos, formación en lengua castellana para las que son inmigrantes, formación en cuestiones prácticas del hogar para hacer lo más posible con los recursos que se tienen o atención psicológica y apoyo emocional. En los últimos tiempos, los miembros de ProVida Castellón han estado en las ayudas de limpieza de las zonas afectadas por la gota fría en Valencia.

También desde otras organizaciones, como 40 Días por la Vida, hacen una gran labor de oración y ayuno que sirve para mover la acción de Dios sobre las mujeres tentadas al aborto y los que los practican para propiciar su arrepentimiento y ayuda posterior si la piden. Desde la mesa por la vida de la diócesis se promueven misas y oraciones por la vida y se coordina la acción de todos los grupos que la componen para dar difusión a cada iniciativa e intentar también la unidad de acción. También hemos impartido conferencias y charlas en colegios, etc.

Por Javier Navascués