P. Xavier Prevosti: “El Belén viviente de la parroquia María Reina es una idea bonita para evangelizar”

P. Xavier Prevosti párroco de la parroquia María Reina de Barcelona y sacerdote de la Hermandad de Hijos de Nuestra Señora del Sagrado Corazón. Anteriormente estuvo en parroquias de Hospitalet y Talavera de la Reina (Toledo). Autor de una tesis de doctorado en Filosofía sobre la libertad en Santo Tomás de Aquino.

¿Cómo ha surgido la idea de organizar un pesebre viviente en la parroquia de María Reina?

Fue a raíz de un comentario que me hizo el jardinero de la parroquia, una persona de fe, de que había mucho espacio en el jardín y que sería muy bonito hacer un Belén viviente. Pocas semanas después varios seglares del movimiento Schola Cordis Iesu me comentaron también esa misma idea. Al ver que había varias personas interesadas y que no tenían ninguna conexión entre ellas, pensamos que era una señal de Dios y que era una idea bonita para evangelizar…

Es el primero que hacemos nosotros en la parroquia, pero en Barcelona hay varios. Por ejemplo en algunos colegios como Loreto o Santa Isabel o San José Obrero que hacen belenes vivientes tradicionales.

¿Cuál ha sido el enfoque con el que lo han planteado?

Hemos querido plantearlo con una perspectiva un poco distinta. Se trabajarán 4 escenas un poco más conceptuales. No digo nada más para que todo el mundo venga a verlo y se lleven una gran sorpresa.

¿Cómo ha sido el proceso de seleccionar al personal y los ensayos?

Se ha seleccionado principalmente entre las familias de Schola Cordis Iesu, pues tenemos hombres y mujeres de todas las edades. Ha sido a dedo y pidiendo personas que se ofrecieran como voluntarios. Pero ha sido muy fácil y muy espontáneo. No se ha hecho un casting muy serio, pues queremos hacerlo desde el voluntariado y la sencillez, aunque procuraremos hacerlo muy bien hecho.

Al ser algo viviente requiere el esfuerzo y el tiempo de todas las personas que tengan un personaje en el Belén…

De hecho estamos a la expectativa de cómo sobrellevarán los actores estar tanto tiempo a la intemperie con los vestidos propios del siglo I. Les hemos advertido del frío, de la humedad, del cansancio…pues son escenas que se van repitiendo reiteradamente. Hemos previsto que haya ciertos recambios de actores, pero al ser algo viviente estamos a la expectativa de lo que suceda y que los animales estén a la altura para gozar de un espectáculo que nos traslade en el tiempo a aquel día dichoso en el que el Dios hecho hombre vino al mundo.

¿Durante que día y en qué horarios se podrá visitar?

La previsión es que sea el sábado 21 y domingo 22 por la tarde, en un horario casi nocturno para que se puedan ver las luces y escuchar los sonidos adecuadamente. De 18 a 21 con entrada gratuita y con la posibilidad de hacer donativos. Podrán contemplar las 4 escenas del Belén viviente que esperamos con los años ir aumentando.

¿Cómo contribuye este sacrificio en hacer que se viva el espíritu de la Navidad?

El sacrificio de montarlo es un gusto porque es una dedicación muy bonita y la continuación en el tiempo de lo que vio San Francisco de Asís, el poder ver y tocar el misterio del Verbo hecho carne. También es la continuación de lo que San Ignacio de Loyola enseña en los Ejercicios Espirituales de hacer la composición de lugar. Espero que está contemplación nos ayude a tener sentimientos de gratitud hacia nuestro Dios, pues es un Dios muy cercano, el Emmanuel, el Dios con nosotros.

¿Qué frutos espirituales esperan del mismo?

Esperamos que el Belén viviente sea una llamada a la adoración al Niño Dios, una llamada a acercarse al amor de Dios y a recibir el perdón y la misericordia de Dios. También deseo que todos los ciudadanos de Barcelona y de otros lugares que se acerquen a contemplar este misterio puedan acercarse a la Iglesia, que siempre está cercana y transmitiendo el mensaje del Evangelio.

¿Hay alguna otra iniciativa navideña más en la parroquia?

Sí, además de Belén viviente, se ofrecerá la posibilidad de entregar las cartas a los Reyes Magos, de tener una feria de Navidad y tiendas solidarias y lógicamente las Misas solemnes y celebraciones propias de Navidad.

Por Javier Navascués