El P. Jesús Silva explica por qué, propiamente hablando, no existe una vocación a la soltería
Jesús María Silva Castignani nació el 18 de junio de 1983. Es el número 13 de 14 hermanos. Recibió la vocación sacerdotal y el 3 de mayo de 2008 fue ordenado sacerdote. Además de los estudios de teología, se ha especializado en latín y griego, y es licenciado en teología patrística. Ha acompañado durante años a muchos jóvenes, lo que le ha llevado a implicarse personalmente en esta pastoral, impartiendo charlas, coloquios y conferencias sobre afectividad y sexualidad en parroquias, colegios y universidades. Es autor del libro Virginidad 2.0. (Freshbook, 2017) Sexo: cuando y por qué (Palabra, 2018); Te amarás a ti mismo como Dios te ama (Palabra, 2019); Célibes y felices (Nueva Eva, 2020); Dios quiere hablar contigo (Nueva Eva, 2020); Tensión en pareja (Nueva Eva, 2021); El fracaso del ateísmo (Palabra, 2022). Actualmente es párroco de las parroquias San Isidoro, San Pedro Claver y Virgen del Castillo. Es también capellán del colegio Cristo Rey, en el barrio de Pinar del Rey. Tiene también una amplia pastoral en las redes sociales a través de Instagram, Tiktok, YouTube, Twitter y Facebook.
¿Existe una vocación a la soltería?
Propiamente hablando, no existe una vocación a la soltería. Clásicamente se divide la vocación de estado en 3 fases, la vocación al sacerdocio, a la vida consagrada y al matrimonio, porque la vida es para entregarla y no para guardársela. Sin embargo, la Iglesia siempre ha contemplado que hay personas que por diversas circunstancias se quedan solteras. A estas personas se les habla de una especie de vocación en un sentido derivado. Se les recuerda que la vida es para entregarla, no para guardársela, y que la soltería no puede ser signo de un guardarse la vida para el propio disfrute y para el propio goce, sino que deben encontrar el modo en que Dios les pide que entreguen su vida. Con las circunstancias actuales, en las cuales hay tantas personas que se han quedado solteras o están divorciadas o abandonadas, o por otros muchos problemas, hace falta abordar el tema de la vocación a la soltería de un modo nuevo. Este modo nuevo no niega el valor y la importancia de la vocación tradicional en los 3 estados. Sin embargo, reconoce que existen situaciones en las cuales las personas se quedan solteras y les recuerda que no son abandonados de Dios, sino que Dios les ama y que conociendo sus circunstancias y sabiendo que iban a quedarse así, les llama a entregar la vida y a buscar una vocación dentro de su soltería.
Pero bien es cierto, que son cada vez más las personas que no sienten atracción por la vida matrimonial…
La vocación a la soltería no es una cuestión de atracción o no atracción hoy en día, con la deconstrucción de la familia y la ideología de género el relativismo, el hedonismo, el subjetivismo y el individualismo, se está fomentando un estilo de vida en el que uno se busca a sí mismo. Este no es el ideal cristiano, el ideal cristiano es entregar la vida. Jesús dice que el que quiera guardar su vida, la perderá y el que entregue su vida por mí, la encontrará. Y esa sigue siendo la clave de toda vocación cristiana. Por tanto, no hay una vocación a la soltería, en el sentido de que alguien sienta que no le apetece casarse. Sino que uno debe buscar su vocación o bien a la vida consagrada o al sacerdocio o al matrimonio, pero puede que por circunstancias se quede soltero. Solo en este caso podríamos hablar de una vocación a la soltería. No por renegar de la vocación matrimonial o religiosa, sino por otros motivos.
¿Por qué siempre se da por hecho que lo normal es casarse?
Porque la vocación natural del hombre es a casarse y multiplicarse, tal y como recoge el libro del Génesis en sus comienzos. Dios creó al hombre y a la mujer diferentes y complementarios para que se unan y así se completen mutuamente, de modo que puedan procrear y entregarse. La vocación natural del hombre es, por tanto, el matrimonio. Es aquello que está inscrito en nuestra misma corporalidad y en la esencia de nuestra alma. A veces surge una vocación sobrenatural como la vocación a la consagración o al sacerdocio, que sublima la tendencia sexual normal del cuerpo y la convierte en entrega a través del celibato. Por eso podemos decir tranquilamente que lo normal es casarse. Pero también es sobrenatural recibir una vocación de consagración y hay personas que se quedan solteras por circunstancias diversas y que dentro de esa situación, que no entra en los patrones clásicos, se puede encontrar un camino para la realización que consiste en entregar la vida, sea como sea la forma que esto tome.
Muchas personas ven claramente que están mejor solas, que no necesitan compartir la vida con nadie. ¿Es esto en sí algo malo? ¿Qué pros y contras puede tener esa actitud?
Nadie está mejor solo. El libro del Génesis dice claramente que no es bueno que el hombre esté solo. Otra cosa será que haya personas que han recibido heridas emocionales que les llevan a buscar la soledad como una huida de ese dolor o como un refugio para que no les hagan daño. Pero en esas personas, en ese caso, lo que hay que hacer es sanar las heridas emocionales para que las relaciones sociales no supongan un problema, particularmente las relaciones con el otro sexo. Por eso sí es algo malo la no necesidad de compartir la vida con nadie, es signo de que hay algo que no está bien o que no está sanado en el corazón. Lo normal y lo sobrenatural es tener una tendencia a compartir la vida y a entregarla. El celibato no es soltería. El celibato es una consagración en la que uno está totalmente entregado a Dios, ya sea a través de una parroquia, de una iglesia o de una comunidad religiosa, etcétera. No es soledad. Solamente los eremitas están llamados a la soledad. Por lo tanto, el estar solo no es una vocación en la mayoría de los casos. Que una persona esté más cómoda estando sola, no quiere decir que esa sea su vocación. Por tanto, estamos llamados a evitar la comodidad y a buscar lo que Dios quiere y no lo que nos apetece a nosotros.
¿Es más difícil realizarse plenamente como persona fuera del matrimonio?
Salvo que tu vocación sea sobrenatural, es decir, que estés llamado a ser sacerdote o consagrado, no te puedes realizar fuera del matrimonio a no ser que, como estaba diciendo, haya alguna situación que te haya llevado a quedarte soltero por algunas circunstancias. Y entonces el Señor permite que tú en tu soltería encuentres un modo de entregar la vida para así poder ser feliz y realizarte plenamente. Los cristianos no utilizamos realmente la expresión realizarse. Usamos la expresión vocación, plan de Dios o voluntad de Dios. Es más propio. Dios tiene un camino para nosotros que Él nos indica, al que nos llama y al que nosotros podemos responder si queremos. Pero muchas veces ese camino nos lo marcan las circunstancias. Eso le pasa a las personas cuyas circunstancias les llevan a quedarse solteras y solas. En ese caso Dios se encarna y se acerca a cada persona en su circunstancia concreta para llamarle a entregar la vida. Y una persona puede ser profundamente feliz estando soltera. Pero insisto, no porque esté cómoda o porque no le apetezca casarse, sino que por circunstancias no ha encontrado su vocación en otro estado. En tal sentido, la pregunta no tiene mucho sentido, ya que los cristianos no buscamos realizarnos, sino cumplir la voluntad de Dios. No es una cuestión de facilidad o dificultad, sino de buscar lo que Dios quiere. Ninguna vocación es fácil, absolutamente ninguna.
Hoy en día ante la precariedad laboral, lo cara que está la vida…casarse es algo heroico…
Hoy en día, lo heroico es entregar la vida y no guardársela. Hoy en día lo irónico es ser capaz de dar un paso de fe en el mundo. Hoy en día lo heroico es hacer lo que todos deberíamos hacer. Casarse no es más heroico que consagrarse. O se sacerdote o quedarse soltero. Cada vocación tiene sus dificultades y sus heroicidades. Dios siempre provee. El célibe es tentado pensando en la soledad y en no tener alguien en la cama que le acompañe. El casado es tentado pensando que renuncia al resto de mujeres o que va a tener que lidiar con problemas económicos toda la vida. El soltero se preocupa pensando en que va a morir solo y en que su vida no tiene sentido. Toda vocación es algo heroico y toda vocación tiene riesgos y peligros. Por eso es tan importante el discernimiento y la oración y la dirección espiritual para saber qué quiere Dios de mí y no plantearlo todo en términos individualistas y de perspectiva personal.
Esas razones unidas a la falta de fe hace que hoy escaseen las familias numerosas…
No estoy de acuerdo en que esas razones sean las que hoy hagan que escaseen las familias numerosas, en absoluto. La mayor parte de los matrimonios que conozco no quieren tener muchos hijos, no por una cuestión laboral o económica, sino más bien de educación. Quieren poder atender bien a los hijos y comprenden bien lo que significa la paternidad responsable y también sus limitaciones como padres. De hecho, los padres, que tienen muchos hijos, al final acaban experimentando como siempre llega la ayuda de un modo u otro y pueden sacar adelante perfectamente las vidas que Dios les da. Pienso que la carencia de familias numerosas tiene más que ver con la comprensión de la paternidad responsable que se ha difundido desde Pablo VI.
No hay ningún problema en que escaseen las familias numerosas. Ciertamente es heroico y maravilloso cuando una familia decide tener muchos hijos y es algo que es muy bendecido por Dios, como muestra la experiencia de la historia de la Iglesia y de los santos. Pero si un matrimonio en conciencia decide que es más responsable tener menos hijos, no hay ningún problema. Esto no debe tener nada que ver con la fe. También puede estar influido, obviamente por cuestiones económicas, pero éstas tampoco deben ser determinantes.
Tradicionalmente se enseñó que hay determinadas actividades o profesiones (científico, explorador…) que pueden requerir una dedicación plena…
En realidad, no. La Iglesia nunca ha enseñado eso. Como ya hemos indicado, la Iglesia enseña que existen 3 vocaciones. Sin embargo, puede haber personas que sientan una vocación específica especial que esté fuera de lo normal o habitual. Pueden ser personas que se sientan llamadas a entregar la vida en otras áreas que no sean las comunes. En tal sentido, puede haber personas que efectivamente sientan que Dios les llama a entregarse en la ciencia o en otros quehaceres, en el cuidado de las personas, en la educación, etcétera. Pero esto debe ser una llamada de Dios, no un capricho personal, ni una búsqueda de auto realización. De hecho, hay muchas personas que se han quedado solteras para dedicarse a algunas actividades profesionales simplemente por concentración, por gusto, por dinero, por problemas sociales, por falta de tiempo u otras cuestiones. Esto no es lo ideal. Si uno siente que debe dedicarse en cuerpo y alma a algo tiene que ser porque sienta que Dios se lo pide. Debe ser una decisión discernida.
¿Cómo puede una persona ser fecunda viviendo soltera?
Una persona soltera puede ser fecunda, entregando la vida a sus amigos, a su familia, a sus sobrinos, en su parroquia, en una comunidad, en un voluntariado, en un comedor social, en algún tipo de actividad, en su propia profesión, etcétera. La fecundidad no es algo solamente biológico. Una persona soltera puede hacer un gran bien en la parroquia siendo catequista voluntaria de Cáritas, ayudando del Consejo de Economía, sacristana o dedicándose a la oración o montando grupos o coordinando las actividades. Una persona soltera puede perfectamente dedicar todo su tiempo a ayudar a los pobres con las hermanas de la Madre Teresa de Calcuta o con alguna otra congregación o visitando enfermos en hospitales o a niños abandonados. Una persona soltera puede ser perfectamente fecunda cuando su trabajo consiste en darse a los demás. La fecundidad es un concepto muy amplio que no está restringido a la biología. De hecho, precisamente lo que tiene que buscar cualquier persona, sea soltera o no, es ser fecunda. Como dice Jesús en el Evangelio, si el grano de tierra no cae en tierra y muere, queda infecundo, pero si muere, da mucho fruto.
¿Es conveniente siempre que la persona soltera viva una especie de consagración, una pertenencia a una orden tercera o comunidad?
Para mí sí es conveniente. Obviamente, esto es una opinión personal. El Código de Derecho Canónico contempla la posibilidad de que una persona pueda consagrarse privadamente al Señor. De hecho, puede consagrarse por un año sin permiso del obispo a su propio párroco y esa consagración se puede renovar. Si quiere consagrarse por más de un año tiene que ser ante el obispo. Se trata de una consagración personal, no de una consagración en vida religiosa. También la pertenencia a una orden tercera entra dentro de esta especial vocación que pueden sentir las personas que por diversas circunstancias se han quedado solteras. Por otra parte, pienso que el Señor va a ir suscitando poco a poco, comunidades de personas solteras. Esto es inevitable. Ya que en la actualidad, por muchas cuestiones que escapan a la alcance de este artículo se van a quedar solteras. Pero no están llamadas, están solas. Por lo cual pienso que el Señor suscitará si es que no lo está haciendo ya. La idea de comunidades de personas solteras que vivan una cierta forma de consagración privada o personal. Recordemos que la vida es para entregarla, no para guardársela y la consagración sea privada o pública es un modo precioso de comprometerse a entregar la vida al Señor.
Por Javier Navascués
63 comentarios
Cada vocación tiene su cometido.
Muchos tienen la conciencia mal formada y en realidad es poner por encima de Dios otras cosas o simplemente miedo. En definitiva, falta de fe.
Es decir se debe de ordenar la vida a la vocación, en eso consiste la voluntad de Dios, si sé que el matrimonio implica que posiblemente Dios me envíe muchos hijos. Tengo que disponerme a planificar desde el principio mi futuro orientado a ello, por ejemplo intentar comprar un hogar grande, aunque sea lejos en vez de un pisito pequeño céntrico.
En fin sólo esto es un ejemplo, pero la entrega a Dios implica todo el ser, sino ¿de qué estamos hablando? ¿de entrega? ¿qué entrega? ¿solamente hacer feliz al otro cónyuge?
Es como si un sacerdote omite verdades de fe y o moral a sus fieles porque en conciencia no se siente preparado y cree que esos fieles estarán mejor así, sin disgustos de conciencia. Lo tomamos como válido pero es heroico el sacerdote que dice las verdades sin tapujos. No, el último lo está haciendo bien el el primero lo hace mal pecando de omisión.
Yo estuve trabajando en la agricultura desde los catorce años hasta que me fui al servicio militar . Inmediatamente después me vine a Madrid a trabajar de cartero urbano en Correos.
Estuve viviendo en una habitación alquilada doce años ,y después me vine a Torrejón de Ardoz el 7 de Mayo de 1.987. ( 36 años ).. Siempre he vivido solo . Y llevo 15 años conviviendo con perritos Yorkshire ; encantado con ellos ; son muy buena compañía.
Colaboro con la comunidad de vecinos y con la comunidad parroquial. Voy a Misa todos los días y ofrezco mi vida en soledad y oración por la santificación de las almas y por la mía propia. No se hacer otra cosa ; quizá sea muy poco ; pero hago lo que puedo.
Un cordial saludo para todos.
Si se refiere a "en busca de pareja para casarse", no puede ser una vocación, ya que es, por propia esencia, un estado transitorio.
Si se refiere a "no tener que preocuparse de sostener una familia para tener mayor disponibilidad para la propia profesión", si se refiere a profesiones altruistas (magisterio, medicina y similares), entiendo que puede ser una vocación, ya que entraría "latu sensu" en el "eunuco parr el Reino de Dios".
Si se refiere a "estado en el que estoy libre y sin compromiso para poder fornicar", ahí es una "vocación" satánica, sin duda.
Lo que no nos podemos olvidar es que la vocación del cristiano SIEMPRE INCLUYE LA CASTIDAD.
Castidad según estado: una condición e la del casado, y otra la del no-casado (independientemente de si es por celibato voluntario, involuntario, soltería, viudedad....)
2. De acuerdo con Santiago Ll: "Lo de la paternidad responsable, es un coladero para no tener familias numerosas dentro del orbe de familias católicas practicantes, así de claro. El catecismo lo dice bien claro, traer los hijos que Dios disponga y educarlos cristianamente."
Paternidad responsable existe en Humanae vitae 10 como paternitas conscia o consciente. Malo cuando se pone adjetivos, es como decir "papa, obispo y cura responsable" es quien no hace proselitismo y se adapta al mundo.
En la práctica, todo el proceso de atracción, cortejo, conocimiento, discernimiento, aceptación, etc, etc. suele ser bastante complejo y desgasta muchas energías.
¿Por qué nos acercamos al sexo opuesto cuando somos jóvenes? Básicamente por instinto sexual, luego tienes que ir afinando otro sin fin de cuestiones si te planteas un matrimonio cristiano. Pero la persona "auténticamente cristiana" es casi imposible encontrarla (posiblemente porque tampoco lo somos nosotros), y acabas haciendo una elección de "mínimos" o en una balanza pones los "pros y los contras", y crees que esa persona merece la pena, y la otra persona mas o menos lo mismo contigo.
Nada es por completo accesorio o gratuíto, casi todos vamos al matrimonio por diversos motivos, o intereses, aunque lo hagamos honestamente con amor puro y limpio. Nadie se casa con nadie porque sí. Motivos económicos, culturales, físicos, espirituales, etc.
Y luego, perseverar día a día para que la empresa no naufrague por diversos motivos. En general, la mujer es la elige al hombre, aunque al principio tiene que poner el toda "la carne en el asador" para ser elegido.
Me gustaría que la Iglesia (y sobre todo los curas) pisaran un poquito mas con los pies en la tierra cuando se hablan de estas cosas y no se guíen únicamente por manuales de teología o códigos morales aprendidos en un seminario o universidad.
Opiniones, por favor.
En la realidad no todo es tan fácil. Conozco a decenas de personas solterisimas y que casi por seguro se quedarán así. Y son personas normales con sus estudios, trabajo, amigos... Simplemente no tienen ni pareja ni pretendiente. Nada
Ahora mismo ni en las comunidades de iglesia es fácil encontrar novio/a porque simplemente no hay gente en edad de merecer. Y fuera de los ámbitos de iglesia .. casi es mejor ni buscar.
Vocación es un llamado de Dios hacer su voluntad.
Aunque una persona este casada tiene que seguir buscando realizar la voluntad de Dios, su vocación durante toda la vida. Como entregar su vida en aquello que Dios quiere. Para Dios somos únicos, y todos tenemos una misión que cumplir. Si no lo lo realizamos esa misión se queda sin hacer.
El problema de esta búsqueda de la vocación que a de ser durante toda nuestra vida, es que muchas veces no se cuenta con los medios adecuados, falta de sacerdotes que se dediquen a la dirección espiritual y atención de los fieles. Pues de por si hay excased de sacerdotes y están muy atareados con tantas parroquias que atender.
La problemática que yo planteo es ¿cómo llevar a cabo esta entrega?. Pues esta claro que desde el modelo actual de vivencia de la fe de nuestras parroquias muchas veces se queda pequeño.
El que quizás se acerco más a esto fue San Josemaría Escrivá de Balaguer.
Tampoco es lo mismo vivir en un ciudad que una zona rural en riesgo de despoblamiento y en el que la vida se hace muy díficil en todos lo sentidos. A nivel económico, sensación de soledad, etcétera. Hay que tener mucha fortaleza de espíritu para estar soltero y vivir en un pueblo.
Para terminar sobre lo que menciona el P.Jesús Silva de solteros llamados a vivir en comunidad. Yo creo que sí se viene nuevas formas de vivir la fe.
Ejemplo los monjes anónimos que son aquellas personas que han decido vivir en mitad de la ciudad, sus hogares una especie de vida contemplativa. Pero sin pertenecer a ninguna congregación religiosa.
Está el padre Fernando (padre Tinder)
Te mando el artículo donde está su número de celular
https://es.aleteia.org/2023/03/07/este-sacerdote-busca-pareja-a-jovenes-catolicos-a-traves-de-whatsapp/
El padre no dijo eso pero es lo que se entiende en las entrelíneas ya que lo que justificaría la soltería sería no un llamado divino sino una situación derivada y muy concreta que demandaría plena entrega o casi y se opondría a las tres clásicas vocaciones. Y Dios no puede llamar a alguien a ser soltero, darle una misión y la persona ni siquiera es consagrada in peactore? Dios es más grande que eso. Conocí a un rector de un colegio católico que era soltero, nunca casado ni consagrado o padre. Se dedicó con amor hasta su muerte a la educación y eso era su "sacerdocio".
En fin, este tipo de teología siempre llega hasta cierto punto. En los tiempos actuales, pues, sale de premisas filosóficas y culturales cada vez más lejanas (no faltará quien parta del nominalismo, pero al revés), haga un camino plurisecular para llegar con su lente estrecho a mirar el siglo 21.
Después de todo, tomamos las decisiones según la voluntad personal. Si argumentamos que lo que hacemos es según dijo Dios, podemos estar usando su nombre en vano.
Dicho esto, en la Iglesia se ve que solo "superhombres"pueden ser llamados a vidas célibes. ¿Dónde están los San Agustín y San Ignacio, es decir adultos de más de 30 que tras una vida de oscuridad acabaron ordenados?
Articular algún instrumento asociativo para que solteros trabajen en obras apostolicas es una idea acertada. Siempre es mejor a cerrar la obra, como por desgracia ocurre.
Pero desde luego en un mundo ideal, las personas nos ordenaríamos según ese esquema tripartito, ni más ni menos.
Los que son solteros pero no quieren serlo no encajan en ninguna de estas tres, así que no tienen vocación o tiene vocación impropia o algo así.
Los que son solteros pero célibes y así los reconoce la Iglesia pero no son consagrados, yo creo que ni Dios sabría que hacer con ellos según esta perfecta y cerrada clasificación. ¿Esos dónde irían? ¿No tienen vocación? ¿Tienen vocación impropia?
Hasta una cierta edad hubiera aceptado el matrimonio si se hubiesen dado las circunstancias necesarias pero esto no sucedió y no me siento apenada ni amargada por ello, más bien al contrario, me alegro de que Dios me haya llevado por estos otros caminos. Tampoco tuve nunca vocación de religiosa y la verdad, cuando en una ocasión, una prima mía -monja- me espetó aquello de "o casada o monja" me sentó bastante mal.
Resumiendo, me siento identificada con las palabras de San Pablo en 1 Corintios 32-35: "... La mujer no casada, lo mismo que la doncella, se preocupa de las cosas del Señor, de ser santa en el cuerpo y en el espíritu. Mas la casada se preocupa de las cosas del mundo, de cómo agradar a su marido.
Os digo esto para vuestro provecho, no para tenderos un lazo, sino para moveros a lo más digno y al trato asiduo con el Señor, sin división."
No lo he buscado, pero a día de hoy creo que es lo mejor que me ha podido pasar a mi (cuya vocación más deseada sería la de la profética Ana), sin menospreciar ningún otro estado de vida.
Un saludo.
El camino concreto que Dios va poniendo a cada uno es lo que se ha de ir discerniendo.
Lo errado está en la fórmula: No hay matrimonio - no hay consagración - entonces hay una vida sin entrega y guardada para sí.
Poe otra parte, creo que explica un poco mal lo de la paternidad responsable, como si fuera un cálculo a priori a conveniencia de los esposos. Quizá se haya explicado mal, pero tal y como lo dice, suena muy mundano y me parece que puede resultar casi ofensivo para aquéllos que aceptaron con valentía todos los hijos que Dios les mandó porque pareciera que ellos no ejercen una "paternidad responsable".
La Iglesia siempre ha enseñado que, salvo razones muy graves, no es lícito a ningún matrimonio limitar la cantidad de hijos. Eso de la "paternidad responsable" es una patraña liberal colada de contrabando en varios ambientes pseudo católicos. Por descontado la ilicitud de la contracepción y del método Billings.
Los estados de vida tradicionalmente católicos son dos: matrimonio y religioso. Eso es lo normal. La voluntad de Dios explícita es "Creced y multiplicaos" o el celibato religioso. Nunca ha mencionado la Iglesia una vocación de soltería. Que haya solteros involuntarios es sólo una situación de hecho.
Soy un " joven " de 71 años. Nací el 11 de Marzo de 1.952.
Un cordial saludo .
En manos de Dios!!!
Por otra parte, un divorciado(a) no es "soltero(a), es un casado(a) separado(a) de su esposa(o) por diversas razones.
Yo soy soltera y mi vocación bautismal sigue siendo la que es. No me considero peor cristiana que un cura, un religioso o una persona casada. Cuánto desprecio a los solteros. Para esto, mejor que no haya pastoral respecto a los solteros; o sea, en plata: Déjennos en paz.
Por cierto, no he terminado de leer la entrevista. Paso olímpicamente.
Por tanto, se deduce de lo que dice este sacerdote, que las consagraciones privadas que no han sido hechas ante Párroco u Obispo, carecen de valor.
Los solteros os precederán en el Reino de los Cielos... ;)
De todos modos, y teniendo en cuenta que vocación quiere decir "llamada" parece lógico que la solteria no sea una vocación, sino el estado previo del que partimos todos; tambien, de los que son llamados a un estado de vida esponsal: el matrimonio (te casas con otra persona); el sacerdocio (te casas con la Iglesia-Esposa de Cristo); o la vida consagrada (te casas con Jesús). Sin que ellio signifique necesariamente, creo yo, que todos deban estar llamados a uno de esos tres estados de vida. A la vista está que no.
Finalmente, sí he terminado de leer la entrevista :) Y sigo teniendo la misma opinión sobre lo que dice el padre Silva. Con franqueza: No voy a meterme en ningún "embolao" dentro de la Iglesia. Cachis, qué egoísta y comodona soy...
O, quizá, lo que ocurre es que el Señor, simplemente, no me llama a ello. Al Señor también le agradan las cosas sencillas...
Qué ganas de cuadricularle la vida a la gente! No sé quién se cree que es!
Le recomiendo leer el excelente comentario de Lil. Yo no continúo porque no tengo paciencia.
NO VIVEN Y NO DEJAN VIVIR! Cuál es el pecado del que siendo soltero cumple los mandamientos? Sería bueno que leyera a San Pablo, que recomienda a los solteros que se queden como están, pero que si no aguantan se casen, porque mejor es casarse que abrazarse…
Obviamente está recomendando como superior la
soltería que el matrimonio. Y no le está hablando a curas!
Y basta de discutir pavadas!!!! Hay cosas más útiles en qué ocuparse…
En los no creyentes, los no católicos, la soltería y la ausencia de hijos es actualmente hasta un problema. Pero se entiende tal y como está el mundo de alejado de Dios. Cuesta más verlo en creyentes. Conocí a un grupo de misioneros laicos y me llamó la atención que los había solteros, no solo casados. Siempre me he preguntado qué tipo de llamada recibieron. No acabo de verlo. Pero pueda ser simple miopía mía. Entregan su vida en las misiones, pero sin estar consagrados. Es que no han cerrado las puertas a un posible matrimonio? Cuando vi las dificultades de poder casarme, automáticamente por mi cabeza pasó la idea de la vida religiosa, no la idea de quedar simplemente soltera. Después vi las dificultades de ello también. Mi salud no es la mejor del mundo. Entonces pensé en cómo poder vivir para Dios desde mi soltería. Fue justo cuando conocí a esos misioneros laicos. No llegué a materializar nada porque en ese momento conocí al que después sería mi marido. Otras personas, por lo que veo aquí, viven solteros fuera de esa vida misionera. Ese señor lo llama vocaciones derivadas, no directas, dadas por circunstancias x. No veo la ofensa, sinceramente. Estamos en un tiempo de susceptibilidades. También padecí eso, y mucho. Por higiene mental les recomiendo abrir la mente y ensanchar las espaldas para soportar todo lo que se nos viene encima. Porque si solo por esta entrevista en la que no aparece nada del otro mundo ya nos molestamos, con la persecución que se avecina ni les cuento... Con la ayuda de Dios podremos perservar. Personalmente pensé que sin una entrega formal (como el matrimonio o la vida consagrada) en principio sería más complicado vivir un camino real de purificación. Las ovejas tendemos a dispersarnos si no estamos bien guiadas, más cuando hay tantos lobos en las cercanías. Lo que sea que vaya surgiendo, que esté bien guiado.
Dios nos guíe. Buen día a todos.
No venda gato por liebre.
¿Cómo se define "soltero/a"?
Con una negación: NO casado/a.
La soltería de suyo no tiene una connotación positiva, es la negación/ausencia de estado de vida.
¿Que pueden alcanzar la santidad, etc., etc., etc.?
Nadie niega eso.
¿Que los solteros lo son por egoísmo?
Nadie dice que siempre sea así, al contrario.
¿Que haya que imponer violentamente a todos "matrimonio o convento", por así decir?
Nadie lo afirma, sería un abuso terrible.
Sólo se dice una verdad de perogrullo: la soltería NO ES UNA VOCACIÓN, ni natural ni sobrenatural.
La Iglesia jamás ha dicho nada negativo sobre la soltería, que yo sepa. Así que la postura del padre Silva no es, en absoluto, tradicional.
A mí me trae sin cuidado si la soltería es una vocación o no. En mi caso, es lo que ha habido hasta ahora y punto. Pero vamos, jamás he visto la soltería como una forma de vida egoísta y comodona. Porque no lo es. Me refiero, claro está, a la soltería vivida procurando cumplir los Diez Mandamientos de la Ley de Dios.
Además, también Dios va indicando a los solteros lo que desea de ellos, aunque se trate de cosas humildes y pequeñas. Sin necesidad de meterse en un movimiento de la Iglesia o algo por el estilo.
Casado, soltero, viudo, divorciado, consagrado; son estados de vida, llamados todos a la vocación esencial y universal: EL AMOR.
"AMA Y TE SALVARAS"
>> El billings es un modo de onanismo disfrazado que explícitamente busca la anticoncepción
Está claro que no entiende lo que la iglesia define como anticoncepción, que es la desvirtuación del acto conyugal, su manipulación para hacerlo voluntariamente infecundo. En el método Billings no hay tal, porque no hay acto conyugal, lo que hay es abstenerse del mismo. Esa es la radical diferencia: abstenerse del acto conyugal porque en la presencia de Dios el matrimonio considera que no es el momento de tener un hijo, o bien realizar el acto de forma desvirtuada. Lo segundo es anticoncepción, lo primero es paternidad responsable.
"Al atardecer de nuestra vida, seremos juzgados en EL AMOR".
Lo correcto es:
"Al atardecer de nuestra vida, seremos examinados en EL AMOR".
No sé si lo pueden corregir.
La Iglesia Católica jamás ha admitido la licitud moral de la contracepción. Y nunca lo podrá hacer porque es irracional, va cobtra la misma naturaleza del matrimonio y, por ende, de la sociedad.
Si lee bien el concilio Vaticano podría observar con claridad que el matrimonio NO ES UNA VOCACIÓN, el LAICADO lo es... y los estilos de vida pueden ser casados o solteros...
Ojalá pueda rectificar.
>> La Iglesia Católica jamás ha admitido la licitud moral de la contracepción.
Correcto. Lo que usted tiene que entender es que la abstinencia periódica no es contracepción.
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