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5.05.10

La belleza en cada aspecto del rito litúrgico

Ofrecemos la primera de una serie de interesantes profundizaciones que la Oficina para las Celebraciones Litúrgicas del Sumo Pontífice, presidida por Mons. Guido Marini, ha publicado en lengua italiana en el sitio web de la Santa Sede. Por su gran interés y por su valor formativo, esperamos publicar próximamente nuestra traducción de los otros artículos.

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Escribe el Santo Padre Benedicto XVI, en el n. 35 de la Exhortación Sacramentum Caritatis:

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Descansa en paz, Cardenal Poggi

Esta mañana ha fallecido en Roma, a los 92 años de edad, el cardenal Luigi Poggi, archivero y bibliotecario emérito de la Santa Iglesia Romana.


El Papa Benedicto XVI, que presidirá el próximo viernes los ritos de la Ultima Commendatio y la Valedictio luego de la Santa Misa celebrada por el Cardenal Decano, envió un telegrama a los hermanos del difunto cardenal en el que expresó su participación en el luto de quien fue “durante tantos años solícito colaborador de la Santa Sede, en particular como nuncio apostólico en varios países y como archivero y bibliotecario de la Santa Iglesia Romana, dando en todas partes un apreciado testimonio de fervoroso celo sacerdotal y de fidelidad al Evangelio”.


El cardenal Poggi siempre se ha destacado también por la promoción y defensa de la Liturgia tradicional. Invitamos a releer, en esta ocasión, la entrevista al purpurado sobre la cuestión litúrgica que publicábamos en esta Buhardilla dos años atrás. Allí, cuando se le preguntaba si aún se sentía joven a sus 91 años, el cardenal respondía: “Ciertamente. Con un Dios que «laetificat juventutem meam» ¿cómo no podría?”


La partida del cardenal Poggi se suma a los recientísimos fallecimientos de los eminentísimos cardenales Spidlik (el pasado 17 de abril) y Mayer (el pasado 30 de abril). Por lo tanto, el número de miembros del Colegio Cardenalicio desciende a 179, de los cuales 108 son electores y 71 no electores.

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4.05.10

Algo de Castellani

Si bien el texto que publicamos no es de la temática habitual de nuestro blog, les compartimos este escrito del genial P. Leonardo Castellani.


La democracia


Fue el día en que se verificó en Atenas la restauración de la democracia, después del gobierno de facto de Agiospótamos y Rodomorfos, cuando vino el carcelero con una urna vigilada por dos milicos para que votara Sócrates; pues aunque por la Ley 203.785 inciso 6 los encarcelados no pueden votar, por el decreto adicional 203.786 c. f. están obligados a votar todos los tipos prominentes de la república, como lo era el gran Sócrates, bajo pena de multa y cárcel; y él de todos modos ya estaba en cana. Así que preguntó con murria:


- Dime, oh Platón, ¿qué es la democracia?

- Es el gobierno del pueblo.

- ¿Qué quiere decir del pueblo? Esta partícula de es ambigua en nuestra lengua. ¿El pueblo gobierna? ¿O es gobernado?

- El pueblo gobierna.

- ¿Y a quién gobierna?

- Al pueblo.

- Entonces ¿el pueblo gobierna y es a la vez gobernado?

- Así parece, oh maestro.

- ¿No son contrarios gobernar y ser gobernados?

- Lo son, Sócrates, porque gobernar es mandar y ser gobernado es obedecer.

- ¿Y qué dice el axioma Nº 8?

- Dice que dos contrarios en un mismo sujeto se destruyen.

- Por tanto, con la democracia el pueblo se destruye.


Yo no tenía inconveniente en conceder que sí, porque como todos saben he sido bastante fascista; o como decíamos entonces, laconizante; pero estaban conmigo Cleón y Demólalos, que habían llegado ese mismo día de la Beocia con noticias frescas; y dijo Demólalos:


- Te equivocas, oh maestro; porque el pueblo no gobierna sino por medio de sus representantes.

- ¿Y los representantes gobiernan al pueblo?

- Ciertamente: después que han sido elegidos por nosotros, tal como lo harás tú dentro de un momento en uso de tus derechos soberanos.

- Demodoqué ¿dentro de un momento gobernaré yo al pueblo de Atenas?

- Cierto, Sócrates; y en eso justamente consiste la soberanía del pueblo.

- ¿Por cuánto tiempo gobernaré?

- Por el tiempo que metas la boleta en la urna.

- ¿Y puedo en ese tiempo derogar todos los impuestos de Atenas e imponer el Impuesto-Único-Al-Capital-Financiero, que no me agarra a mí?


Aquí vaciló Demólalos, que tenía capital financiero, y tomó la palabra Cleón, diciendo:


- Sin duda, Sócrates; siempre por medio de tus representantes, si lo son también de todo el pueblo; o de la mitad más uno.

- ¿Y si no lo son?

- ¡Oh, lo serán sin duda, Sócrates! Tú eres vivo, y has votado siempre el candidato de la mayoría.

- Pero es el caso –dijo Sócrates- que ahora la mayoría no quiere el Impuesto-Único-Al-Capital-Financiero.

- Pues paciencia y barajar, Sócrates: la mayoría nunca se equivoca, teóricamente al menos; y si nosotros mantenemos el Impuesto-Único-A-Los-Productores es que eso conviene más a todo el mundo.

- ¿También a los productores?

- Desde luego, Sócrates.

- ¿Votan por él los productores?

- Directamente no; pero votan por Frondívoros, el cual se ha comprometido secretamente a mantener el dicho impuesto; que nosotros llamamos el Programa Desarrollista.

- ¿Y por qué votan los trabajadores por Frondívoros?

- No los dejamos votar más que por Frondívoros o por Balvívoros; el cual es peor que Frondívoros; o por lo menos, así se lo creen.

- ¿Y por qué se lo creen?

- Lo hemos hecho ver por medio de la Propaganda.

- Pero ¿no ven que si después el pueblo se da cuenta, se levantará?

- Qué importa. La autoridad es sagrada y viene de Dios. Demodoqué con agarrar unos cuantos y fusilarlos de noche, caiga el que caiga, los demás se quedan más quietos que paramento, en homenaje al principio de autoridad. Tenemos a la Religión de nuestra parte; y hacemos un Te-Deum por nuestros pecados cada 25 de mayo.

- ¿Y quién los fusilará?

- Las Fuerzas Armadas.

- ¿Y si se levantan las Fuerzas Armadas?

- Imposible, Sócrates: las Fuerzas Armadas están para defender la Constitución; y por eso les andamos aumentando los sueldos, las prebendas y las ventajas desde hace 30 años. No les conviene levantarse contra nosotros.

- ¿Quién les aumenta los sueldos?

- Nosotros.

- ¿Quiénes son Ustedes?

- ¡Pues nosotros los democráticos!

- Entonces Ustedes son el verdadero gobierno de Atenas.

- Y está muy bien así –dijo Cleón-. Nuestra Constitución es democrática. No hacemos más que defender la Constitución.


Aquí tomó la palabra Demólalos, y dijo medio cantando:


- Es la Santa Democracia, la religión verdadera de la Humanidad donde caben todas las otras religiones. A este estado ideal hemos llegado después de grandes esfuerzos, derramamientos de sangre, millones de muertos y millones de libros escritos por los más preclaros cráneos de los siete continentes. Los pueblos han llegado a su mayoredad, teóricamente al menos; porque no es de negar que en la práctica muchas veces se equivocan; pero aquí estamos nosotros para corregirlos y educarlos. ¡Educad al Soberano!

- ¡No es tan soberano si necesita ser educado por ustedes! –pero sus palabras se perdieron, porque los dos beocios habían hecho tres pasos de mazurka y ambos enlazados cantaban a voz en cuello los primeros compases del Himno de los Representantes del Pueblo:


Somos los –sómolos- REPRESENTANTES

Y no como los –cómolos- los de antes.

Sómolos sómolos

Cómolos cómolos

Repre – repre

Represí – Represión – Represionantes

Sentantes

Los verdaderos –los verdaderos- representantes

Represionantes…


- ¿Y cómo lo corrigen al Soberano? –gritó Sócrates en el momento que los dos representantes atacaban la segunda estrofa.

- ¿Cómo dice? –exclamaron ellos parando el baile.

- Alguna vez que se equivoca la mayoría… -comenzó Sócrates.

- Oh, se equivoca casi siempre –repuso Cleón. Está inmadura, impúber intelectualmente. ¡Pues que se equivoque! La corregimos por medio de una revolución libertadora…

- ¿Y eso?

- Es un pronunciamiento, un golpe de Estado, o una chirinada, seguida de una dictadura democrática.

- Pero ¡cómo!, ¿la dictadura no es lo contrario de la democracia?

- Hay dictaduras y dictaduras, Sócrates. Las dictaduras democráticas son muy buenas y necesarias, pues se hacen para restablecer la democracia.

- ¿Y cómo se hacen?

- Pues golpe de mano, perjurio, zancadilla, estado de sitio, operativo H, y leña a todos los contrarios. Se suspenden las garantías constitucionales, y palo que te crío, para defender el Estado de derecho.

- ¿Y han hecho muchas?

- Todas las necesarias haremos, hasta educar al pueblo. Para eso contamos con elementos nuestros en las Fuerzas Armadas. En tanto, nosotros cobramos; y en tanto el mundo sin cesar navega por la órbita inmensa del vacío.

- Esta democracia –observó Sócrates- me está pareciendo que es una especie de comodín comodán.


Los dos beocios cambiaron una mirada.


- ¡Cuidado, Sócrates! –dijo Demólalos. Insidiosa y subrepticiamente parece que en tus preguntas reaccionarias se está insinuando una ideología cavernícola, atrabiliaria y carcamálica, que configura un delicto de traición a la patria: delictum, delicti.

- ¡Cuidado, Sócrates! –recalcó Cleón. Te prevengo que en el sufragio universal y libre tendrás el honor de depositar en la sacra urna, debes votar por Frondívoros.

- ¿Y por qué?

- Como tu voto en esta urna será el único, se sabrá por quién votaste y te atendrás a las consecuencias; y aunque no fuera el único, es igual. Lo averiguaríamos.

- ¿Y si se me antoja votar en blanco?

- Es pecado mortal según el Obispo.

- Pues yo voy a practicar el voto cantado –dijo Sócrates con la testarudez que lo caracterizaba, al ver aproximarse al carcelero con su urna, que tenía un vago aspecto de sarcófago, seguido de dos milicos que traían una copa de cicuta.


Sócrates tomó una boleta y escribió en ella, a la vista de todos:


Yo te besaré el brial

Color del lirio morado

Yo te besaré el cendal

Color amoretonado

Yo te besaré los chanclos

Color de los lirios blancos


y puso debajo estas misteriosas letras: LPQTP.


Visto lo cual fue condenado ipsofacto y némine discrepante a tomar la cicuta por desacato a la autoridad. Y como esta vez por casualidad el boticario la había preparado bien, Sócrates cantó para el carnero, en medio de los aplausos de sus discípulos; los cuales le dieron religiosa sepultura, plantando en la tierra fresca una estaca con un cartel de cartón que decía:


AQUÍ YAZ NA NEGRA TERRA

MOITO CONTRA SUA VOLUNTADE

O VISORREY DA FILOSOFIA GRECA

SOCRATES SOCRATIDES

DEUS LLE DEA LA PAIX

NO OUTRO MUNDO

XA QUE NESTE NON POUDO.


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Leonardo Castellani

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3.05.10

La Sábana Santa: icono de un misterio

Texto de la bellísima meditación pronunciada esta tarde por el Papa Benedicto XVI, ante la Sábana Santa, durante su visita pastoral a Turín.

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Queridos amigos:


Éste es un momento muy esperado por mí. En otra ocasión, estuve ante la Sábana Santa, pero ahora vivo esta peregrinación con particular intensidad: quizá porque el paso de los años me hace todavía más sensible al mensaje de este extraordinario icono; quizá, y diría sobre todo, porque estoy aquí como sucesor de Pedro, y traigo en mi corazón a toda la Iglesia, es más, a toda la humanidad. Doy las gracias a Dios por el don de esta peregrinación, y también por la oportunidad de compartir con vosotros una breve meditación, que me sugiere el subtítulo de esta solemne exposición: "El misterio del Sábado Santo".

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2.05.10

Gestiones de anglicanos en Roma

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Según informa el Sunday Telegraph de Inglaterra, tres obispos de la Iglesia [anglicana] de Inglaterra han viajado a Roma la semana pasada para tratar con miembros de la Congregación para la Doctrina de la Fe la posibilidad de la implementación de la Constitución Apostólica Anglicanorum Coetibus.


Se trata del Rev. John Broadhurst, el Rev. Keith Newton y el Rev. Andrew Burnham, obispos de Fulham, Richborough y Ebbsfleet respectivamente. No ha viajado el Rev. Edwin Barnes, obispo emérito de Richborough, pero se sabe que él es uno de los principales promotores de una aceptación de la invitación papal para el retorno a la comunión con la Iglesia.


Los obispos de Fulham, Richborough y Ebbsfleet son los ordinarios de la práctica totalidad de anglo-católicos de la Iglesia [anglicana] de Inglaterra. Es un grupo completamente distinto a la Traditional Anglican Communion, grupo de anglo-católicos separado de la comunión con Canterbury. Hasta el momento ha sido principalmente este grupo el que ha respondido al llamado del Santo Padre. Si los tres obispos anglicanos que han viajado a Roma están dispuestos a formar parte de un ordinariato personal en Inglaterra, el número de conversos podría ser mucho mayor del esperado. Todavía no hay nada cierto, pero es una buena intención por la que rezar.

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