La triste conclusión del desfile de San Patricio en Nueva York
Soy de los que me molesta cuando los medios nos explican una historia y luego no nos informan del desenlace, aunque éste haya podido ser decepcionante. Por lo tanto voy a acabar con la conclusión de la polémica participación del cardenal Dolan en el desfile de este año con motivo del Día de San Patricio en Nueva York.
Resumiendo: la noticia es que no hay noticia. Todo sucedió según el guión previsto, no hubo ninguna reacción, ni gesto, ni palabra reseñable por parte del cardenal Dolan. Todo lo más unas expresiones de júbilo por presidir, en calidad de “Gran Marshal”, la festiva comitiva. En concreto, Dolan declaró: “Estoy tan radiante como el sol, así que gracias a Dios por el honor y la alegría”. Interpelado por el periodista Michael Voris sobre si tenía “algo que decir a los fieles católicos que consideran que lo que está haciendo aquí es un gran escándalo para la fe”, el cardenal respondió con un “No, vamos. Nos encantaría contar con usted”, antes de enviarle a la seguridad del evento para que le expulsara de la zona de periodistas.