Un protestante de nombre Luis Campos, con más anticatolicismo que cerebro, me ha enviado vía redes sociales un vídeo en donde aparece un reportaje a un supuesto sacerdote católico homosexual que de día hace de párroco y de noche de «Drag Queen», insistiendo que se trata de un sacerdote católico.
En el Vídeo que es un fragmento del programa amarillista de televisión norteamericana «Primer Impacto» producido por Univisión, se reconoce al comienzo que Vincent Capretta, conocido de noche como ”Big Mama Capretta” realmente pertenece a la «Iglesia Católica Independiente de la Caridad», pero no se detiene a explicar que no se trata de la Iglesia Católica Romana sino de una secta conocida como «Iglesia católica antigua».
Este grupo cismático y sectario se separó de la Iglesia católica en el siglo XIX luego de rechazar el Concilio Vaticano I y el dogma de la infalibilidad papal. Sus integrantes son llamados «viejos católicos» o «veterocatólicos» y actualmente se agrupan en la Unión de Utrecht. Contaban con alrededor de unos 350.000 miembros en 1989 y están en plena comunión con las Iglesias anglicanas. Dicho más claramente: son protestantes.
La mayoría de estos grupos sectarios al igual que el anglicanismo adoptó una deriva cada vez más liberal y se pueden encontrar como parte del clero hombres y mujeres casados y célibes. Algunos, como la secta a la que pertenece Vincent Capretta, no solo respaldan las prácticas homosexuales activas y el estilo de vida homosexual, sino que ordenan a los homosexuales practicantes.
Por supuesto, todo esto lo hubiese podido averiguar el sujeto protestante con una rápida búsqueda en Google, pero como suele ser característico en este tipo de sectarios, es más fácil regar un bulo por más dudoso que sea con tal que deje mal a la Iglesia Católica, que averiguar cuando tiene de cierto primero.
Tengan esto presente cuando les intenten hacer creer que se trata de un sacerdote católico.
———————————————————-
Nota: Te recuerdo que ya está disponible nuestro Curso Online de Apologética Católica. Si te interesa inscribirte, haz clic AQUI.
«Ha llegado la hora de los laicos» lo había dejado muy claro San Juan Pablo II, y sus palabras cobran mucha vigencia incluso hoy. Aplaudo cuando los laicos nos involucramos en mayor o menor medida, según las fuerzas, capacidades y dones que Dios nos ha dado, en la evangelización.
