(EP) “Con estas dos normas reglamentarias quedan ratificadas las peores sospechas de porqué se hizo la nueva Ley: se trataba de facilitar el negocio mercantil del aborto, privando a las mujeres de toda información y asesoramiento independiente y presentando el aborto como la única solución que cuenta con el apoyo y la financiación del Estado”, ha declarado el presidente del Foro de la Familia.
“Las nuevas normas ratifican lo que ya se podía intuir en la Ley: las competencias propias de la patria potestad que se expropian a los padres se entregan a los médicos, incluso a los que no tienen más interés que el mercantil en que se produzcan abortos. Es una aberración jurídica que va a dar lugar a muchos pleitos y reclamaciones”, ha agregado Blanco con respecto a las menores de edad.
Además, matiza que la información que se de con esta nueva Ley será “fría, despersonalizada y estandarizada”, una información sólo abocada al aborto, no a facilitar alternativas ni soluciones compatibles con la continuación del embarazo.
Benigno Blanco ha definido la situación española con la nueva Ley asegurando que “España pasa a ser un país abortista, es decir, un país que no se limita a no penalizar el aborto sino que apuesta por promover el aborto desde el Gobierno y con el dinero de todos”.