(EP/InfoCatólica) El campamento de Tabarré, situado en una zona muy pobre a las afueras de Puerto Príncipe, agrupa a unas dos mil personas, fue uno de los muchos campamentos de desplazados que se originaron de forma espontánea entre los habitantes de la destruida capital de Haití. Ese mismo día, tendrá lugar la inauguración de un Centro de Día para personas mayores con capacidad para cien plazas, situado en los alrededores de la capital y está enfocado a paliar las necesidades asistenciales de este colectivo que, tras el terremoto, viven solos y sin ningún tipo de apoyo o supervisión en su cuidado.
Asimismo, junto al grupo que partirá hasta la isla caribeña viajará un equipo sanitario formado por dos médicos españoles, que se unirán a otros tres haitianos, para establecer un consultorio médico en el campamento de Tabarré que atenderá a los más de 2.500 desplazados que viven allí. Además, llevarán un "importante" cargamento de ayuda humanitaria.
Según ha informado la organización, el objetivo de este viaje solidario es conocer y "dar a conocer el trabajo que ha desarrollado en estos últimos cuatro meses a favor de los damnificados del terremoto y hacer una llamada de atención para que no se olvide las muchas carencias y necesidades que sigue sufriendo la población haitiana".
En el mismo viaje el Padre Ángel y su grupo irán a la República Dominicana para visitar el hogar de acogida 'El Refugio', que Mensajeros de la Paz e Infancia sin Fronteras mantienen abierto en Santo Domingo, donde los menores haitianos no acompañados, que fueron evacuados después el terremoto a centros sanitarios dominicanos, reciben la atención y protección necesaria, una vez que han sido dados de alta en el hospital.
