(CNA/InfoCatólica) Mercy Health, un hospital católico ubicado en Lorain, Ohio, ha presentado una demanda en un tribunal federal acusando a las autoridades de la ciudad de represalias y violación de derechos constitucionales. Según el documento judicial, el conflicto se originó en agosto, cuando agentes de policía llevaron a un detenido a la sala de emergencias del hospital y solicitaron que los médicos realizaran un registro corporal para buscar drogas.
Los médicos se negaron a llevar a cabo el procedimiento, argumentando que existía «un riesgo injustificadamente alto de lesiones graves o muerte» si las sustancias se liberaban en el organismo del paciente. La negativa se basó, además, en una ley estatal que permite a los profesionales sanitarios negarse a participar en procedimientos médicos que violen su conciencia.
La demanda señala que la policía intentó presionar a los médicos con amenazas de arresto y acusaciones de obstrucción a la justicia. Tras la negativa, las autoridades policiales cancelaron un acuerdo para proveer servicios de seguridad en el campus del hospital, una acción que, según el hospital, incrementó los riesgos para el personal, los pacientes y la comunidad.
En su demanda, Mercy Health subraya que su misión católica, regida por las «Directrices Éticas y Religiosas» de la Iglesia, permite a los médicos negarse a realizar procedimientos considerados moralmente incorrectos. Estas directrices defienden «la integridad corporal y funcional de los pacientes» y establecen estándares éticos basados en la dignidad de la persona humana.
El hospital acusa a los responsables de la ciudad de Lorain, incluidos dos fiscales, el director jurídico de la ciudad y el jefe de policía, James McCann, de violar sus derechos constitucionales bajo la Primera y Decimocuarta Enmienda, así como los derechos otorgados por la Constitución de Ohio.
Además de solicitar daños compensatorios y punitivos, Mercy Health también enfrenta una denuncia penal presentada por la Oficina del Fiscal del Condado de Lorain. Esta denuncia sostiene que los médicos estaban obligados a realizar el procedimiento médico solicitado.
Ni el Departamento de Policía de Lorain ni el hospital han emitido comentarios sobre la demanda hasta el momento.