(Vatican.news/InfoCatólica) Las personas estaban acompañadas por algunos religiosos de la Congregación de los Hermanos Monforte de San Gabriel y de la Comisión para el Reconocimiento y la Reparación (CRR) de la diócesis francesa. El grupo se había reunido, durante dos horas a lo largo de la mañana, con la Pontificia Comisión para la Protección de Menores en su sede del centro de Roma, en el Palazzo Maffei Marescotti, donde se leyó y pronunció un mensaje del Papa. Fue un momento de escucha, aprendizaje y diálogo centrado en el camino de testimonio, memoria y prevención que están llevando a cabo con la Iglesia local y la Congregación.
Todos juntos para romper el silencio de los abusos
«La subversión de los derechos de un niño a través de la violencia y el abuso es una traición a la humanidad que Dios nos ha dado», escribe Francisco. Ustedes, recuerda, como «muchos niños y personas vulnerables» han experimentado «el mayor de los males en un lugar donde han buscado -junto con sus familias- lo que es verdadero y bueno». «He pedido a la Comisión que escuche sus palabras en mi nombre y que recoja sus testimonios -continúa el Pontífice en su mensaje- para que refuercen e inspiren nuestro compromiso común de erradicar los abusos de nuestra Iglesia y de nuestras comunidades. Esto sólo podemos hacerlo juntos, poniendo cada uno de nuestra parte para romper el silencio de los abusos».
Escuchar a las víctimas y a los supervivientes
Como muestra su viaje junto a los Hermanos de San Gabriel de Monforte, continúa el texto, «este silencio puede romperse si existe una apertura activa y respetuosa dentro de la propia institución para escuchar lo que las víctimas y los supervivientes tienen que decir. Esto no siempre es fácil y los felicito a todos por este logro de caminar y aprender juntos en un diálogo honesto». Por su parte, el Papa Francisco concluye renovando «el compromiso innegociable de las Iglesias en la implementación y verificación de políticas de salvaguardia y estándares profesionales en la formación humana de nuestro clero y religiosos, así como en la búsqueda de ambientes seguros en nuestras escuelas». Y agradeció a las víctimas «por su coraje y resistencia: sepan que son escuchadas». Al comienzo de su mensaje, el Papa recuerda que creó la Pontificia Comisión para la Protección de los Menores «por ustedes y por tantos niños y personas vulnerables» víctimas de abusos.