(KathPress/InfoCatólica) Los obispos católicos estadounidenses han detectado conflictos con la doctrina católica en una norma presentada por el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) para combatir la supuesta discriminación de las personas LGBT a la hora de recibir prestaciones.
El HHS presentó este verano para su revisión una norma que garantizaría los derechos civiles y la igualdad de las personas en los programas financiados por el HHS. Las nuevas medidas pretenden proteger a las personas «LBGTQI+» de la discriminación en programas sanitarios y sociales clave, aclarando la discriminación basada en la orientación sexual y la identidad de género en determinadas leyes.
En una carta abierta, el departamento jurídico de la Conferencia de Obispos Católicos de EE.UU. ha comentado la normativa. Los obispos estadounidenses afirman que la norma propuesta reinterpretaría la no discriminación de un modo contrario a la doctrina católica.
Las organizaciones benéficas de la Iglesia Católica proporcionarían refugios separados por sexos a las víctimas de la violencia doméstica. Sin embargo, la norma propuesta exigiría que los hombres biológicos que se identifican como mujeres fueran ubicados en refugios para mujeres. Esto contradiría la doctrina católica, que mantiene una distinción inmutable entre hombres y mujeres.
Toda institución que disponga de aseos y vestuarios separados para hombres y mujeres tendría que aceptar a hombres en instalaciones para mujeres y viceversa. Además, toda institución tendría que dirigirse a una persona con pronombres que no correspondan a su sexo biológico. Esto también contradice la doctrina católica, dice la carta.
La Iglesia Católica se atiene al orden del mundo natural, que fue puesto en él por su Creador. Esto incluye el cuerpo humano, donde existen diferencias entre hombres y mujeres. La regulación propuesta por el HHS tiene una base antropológica «que simplemente no es cierta», dice textualmente la carta.
La norma establece condiciones inconstitucionales para la participación en programas gubernamentales que ponen en entredicho la existencia continuada de las instituciones caritativas de la Iglesia Católica, dice la carta.
La propuesta del HHS contiene excepciones por motivos religiosos. Sin embargo, éstas son insuficientes para garantizar una protección efectiva de la libertad religiosa.
El departamento jurídico de la Conferencia de Obispos Católicos de EE.UU. pidió finalmente al ministerio que reinterpretara la discriminación y mejorara las disposiciones de exención por motivos religiosos. Sólo entonces las instituciones benéficas de patrocinadores religiosos estarían efectivamente protegidas en sus derechos legales y constitucionales.
