(Aica/InfoCatólica) El Consorcio de Médicos Católicos y la Corporación de Abogados Católicos difundieron una declaración conjunta, a raíz de las recientes informaciones y consiguientes cuestionamientos, acerca de la actuación de uno de los centros Grávida en la provincia de Santa Fe.
Ambas instituciones recordaron que la menor en cuestión, de 12 años de edad, estaba embarazada de 24 semanas, y que junto a su progenitora -natural representante legal, de actuación obligatoria, conforme a las leyes y a la Convención de los Derechos del Niño-, acudieron «voluntariamente» a esa institución, que tiene como objeto -anunciado públicamente- constituir un «servicio de acompañamiento para el fortalecimiento de la maternidad vulnerable en la República Argentina», y «acompañar y promover a la embarazada y a la mamá, orientándolas en el cuidado de su salud integral y la del hijo por nacer».
Médicos y abogados católicos expresaron «su repudio ante cualquier persecución a los profesionales de la salud, psicólogos, trabajadores sociales, abogados o ciudadanos voluntarios, tanto del sector público como del ámbito privado, y a las instituciones en las que ellos puedan actuar, por las opiniones, consejos o asesoramiento que brinden en forma contraria a la realización de un aborto voluntario».
Por el contrario, afirmaron en forma categórica que ellos «están obligados a actuar conforme a su ideario y al leal conocimiento de lo que estiman más conveniente, en relación con el paciente o asistido y con el niño por nacer, al último de los cuales ninguna norma puede compeler a no tenerlo en consideración, lo que sería contrario al orden constitucional y al derecho de ejercer libremente actividades, no sólo lícitas, sino esenciales para el bienestar de la sociedad en su conjunto».
«Cabe por ello, rechazar cualquier amenaza de represalia legal por parte de las autoridades gubernamentales o de grupos afines, y menos aún la utilización indebida del servicio de justicia, en procura de finalidades ideológicas que pretenden condicionar la actuación de profesionales, voluntarios e instituciones», agregaron.
El Consorcio de Médicos Católicos y la Corporación de Abogados Católicos expresaron su solidaridad con la organización Grávida, cuya actuación «siempre ha sido de reconocido respeto a los principios de la libertad y la dignidad humana».
Firmaron la nota la presidenta del Consorcio de Médicos Católicos de Buenos Aires, doctora Elena R. Passo y su secretario, Alejandro Martínez Wagner; y el presidente de la Corporación de Abogados Católicos, doctor Pedro J. M. Andereggen y su secretario, doctor Carlos J. Mosso.