(Persecution.org/Infocatólica) Los tres cristianos fueron detenidos en septiembre de 2021, tras una intervención policial en medio de una reunión de oración de su congregación. Tras recibir unas condenas de cinco años de prisión, iniciaron inmediatamente el proceso de apelación.
Durante el proceso judicial, los tres lograron obtener su libertad provisional bajo fianza. Sin embargo, el mes pasado volvieron a ser detenidos antes de que se sustanciaran sus recursos. El abogado que representa a los tres cristianos ha explicado lo ocurrido:
«No se prestó atención a la defensa, ni al hecho de que estos clientes, sin antecedentes penales y con familias jóvenes, fueran detenidos de nuevo antes del resultado de su apelación, sin haber cometido ningún delito, y actualmente están recluidos en régimen de aislamiento.»
Al parecer, a los tres cristianos se les dijo que su nueva detención se debía a que seguían realizando actividades religiosas, lo que justificaba un examen de «sus acciones en privado». Inquisiciones privadas como ésta son habituales contra los cristianos en Irán, a pesar de que este tipo de investigaciones sobre las creencias de una persona están prohibidas en la Constitución iraní.
La semana pasada, el Alto Consejo de Derechos Humanos de Irán afirmó que «en Irán no se persigue a nadie por el mero hecho de tener una opinión o pertenecer a una clase o grupo determinado». La realidad es que es exactamente el tipo de persecución que ha condenado a estos tres cristianos a cinco años de prisión.