(Die Tagespot/InfoCatólica) En relación a las críticas contra la decisión del Papa por parte de Joahanna Beck, presidenta del consejo asesor para los afectados por casos de abusos de la Conferencia Episcopal Alemana (DBK), el presidente del órgano consultivo de la archidiócesis de Colonia, Peter Bringmann-Henselder, asegura en un comunicado «Nos sorprende que continúe expresándose negativamente casi exclusivamente sobre un cardenal y no reconozca que su propio superior y presidente de la conferencia episcopal todavía tiene suficientes 'cadáveres' en el sótano».
Encubrimientos de Bätzing
Bringmann-Henselder también pregunta en relación con el presidente de la Conferencia Episcopal Alemana (DBK), Georg Bätzing: «¿Cuándo se revelarán sus encubrimientos?»
Beck aseguró en una entrevista concedida al suplemento Christ & Welt del semanario Zeit que la decision del Papa de confirmar al cardenal Woelki como arzobispo de Colonia ha puesto a la archidiócesis en una situación aún más difícil.
Bringmann-Henselder responde:
«Sabemos que el cardenal Woelki es una espina clavada en el costado de algunos en la Conferencia Episcopal. Esa es quizás la razón por la que los miembros del Consejo Asesor para Personas Afectadas de la DBK fueron y son útiles en las campañas contra Woelki».
Bringmann-Henselder asegura que muchos de los que todavía critican no leyeron o no entendieron las declaraciones del Papa. Roma no criticó la actuación del cardenal en el manejo de los abusos sino solo los errores de comunicación. Algo que el propio Woelki había admitido: «Eso a su vez muestra que también es bastante autocrítico».
Además, advierte que la afirmación de que muchos de los afectados no están de acuerdo con la decisión del Papa es puramente populista: «¿Quiénes son 'muchos'? No se debería inferir a todos los demás por lo que piensa uno mismo».