(Efe/InfoCatólica) La cuestión del matrimonio entre hombre y mujer y de la familia y la vida humana es "una cuestión clave de la cuestión social", aseguró.
"No es una cuestión privada ni individual -insistió-, ni solamente de la moral personal, sino una cuestión clave para el justo ordenamiento de la vida social en cada país y en la comunidad internacional".
En la carta del Papa Benedicto XVI, señaló el portavoz episcopal, aparece subrayado que la cuestión social es antropológica, "de cómo entendemos al ser humano y cómo entendemos el matrimonio y la familia y la relaciones de paternidad, maternidad, filiación y fraternidad".
En el asunto de la biotecnología está en juego qué entendemos por ser humano, comentó antes de preguntarse: "¿Puede un ser humano producir a otro a su capricho o a su arbitrio, por ejemplo suprimiendo la relación de paternidad y de fraternidad?", aunque sea posible técnicamente.
"Esto es una cuestión social de primer orden -explicó- porque aquí está en juego qué entendemos por ser humano y por fraternidad, y la fraternidad es el motor del verdadero desarrollo. Sin fraternidad no hay desarrollo humano, que es la clave fundamental de esta encíclica".
"Excluyendo a Dios de las relaciones humanas -apostilló- no se puede entender bien al ser humano y no puede haber un verdadero desarrollo".
Preguntado por el hecho concreto de que un equipo británico de científicos haya conseguido producir esperma a partir de células madre embrionarias, Martínez Camino prefirió no juzgarlo porque no conocía la información, aunque insistió en que el embrión es un ser humano.