(Gaudium Press) Una cruz monumental de más de 10 metros de altura, ubicada en un parque de Pensacola, Florida, podrá permanecer en pie gracias a la decisión de la Corte de Apelaciones del Circuito 11 de los Estados Unidos, la cual determinó que el monumento no vulnera la Cláusula de Establecimiento de la Primera Enmienda de la Constitución del País.
La Corte reconoció que el mantenimiento del monumento no representa una intervención indebida del gobierno en favor de una religión, ya que la Cruz se ha «embebido en el tejido de la comunidad de Pensacola». En su lugar, la pretensión de retirarla podría «impactar a muchos como un acto agresivamente hostil a la religión».
El Fondo Becket para la Libertad Religiosa, que intervino legalmente en defensa del monumento, recordó que la demanda fue interpuesta en 2016 por 4 individuos representados por la laicista American Humanist Association, quienes pidieron derribar la Cruz. El Circuito 11 ya había decidido en contra de la Cruz, pero la sentencia de la Suprema Corte sobre la Cruz de la Paz de Bladensburg, emitida en junio de 2019, obligó a la Corte de Apelaciones a reconsiderar esta posición y tener en cuenta la jurisprudencia.
«La Corte Suprema ahora ha dejado en claro que los símbolos religiosos son una parte importante de la historia y la cultura de nuestra nación», afirmó Luke Goodrich, vicepresidente y abogado principal de Becket. La Cruz cuenta con una historia de 78 años y el monumento, que sirvió originalmente para promover la unidad de la comunidad ante la participación de Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial, es empleado en la actualidad para conmemoraciones como la Pascua, el Día de los Veteranos y el Día de los Caídos, entre otras.
Con información de Crux y Becket Law.
