(Agencias/VenL) Una multitud de ultra feministas intentaron quemar la histórica Cruz del Congreso Eucarístico Nacional, levantada en septiembre de 1974 en el Paseo Güemes, en la provincia de Salta, durante una marcha supuestamente contra la violencia contra las mujeres, el martes 3 de diciembre. La cruz, que mide 16 metros de altura y 9 metros de ancho, está construida en estructura de hierro y tiene en su base flores de estación de distintos colores.
Mons. Mario Cargnello: «que reflexionen y crean en la fuerza del amor que vence al odio»
«No es fácil reflexionar sobre un hecho que nos resulta absurdo y nos deja perplejos: ¿Qué significa? ¿Qué mensaje nos transmite? ¿Qué se pretende?», cuestionó el arzobispo de Salta, Mario Cargnello, quien reiteró que la cruz fue emplazada como «una llamada a la unidad de todos los argentinos; levantada en alto sobre la tierra el Señor Jesucristo nos atrae hacia Él» y que se convirtió «en un signo de la aspiración profunda del pueblo de Salta a ser un pueblo fraterno, justo, acogedor, pacífico y pacificador».
El prelado solicitó a quienes «alimentan actitudes hostiles, que por momentos se tornan muy peligrosas, que reflexionen y crean en la fuerza del amor que vence al odio, de la unidad que nos ayuda a ser más humanos». Los hechos vandálicos generaron el rechazo de los salteños que pidieron respetar los símbolos religiosos y las creencias de los distintos sectores de la sociedad, a través de redes sociales.