(Luis F. Pèrez/InfoCatolica) Rodrigo Lastra es médico y padre de familia. Natural de Burgos, reside actualmente en Zaragoza. Es la cabeza de lista del Partido SAIn para las próximas elecciones al parlamento de la Unión Europea que se celebrará el próximo domingo, día 7:
-El Partido Sain se presenta así mismo como una opción política de inspiración cristiana con tres objetivos prioritarios: acabar con el hambre en el mundo, con el paro y la precariedad laboral y con la esclavitud infantil. ¿Cuál cree que puede ser el papel de la Unión Europea para llevar a cabo esas tareas tan loables y qué tipo de políticas cree necesarias para conseguirlo? ¿son ustedes un partido de izquierdas en cuanto al modelo económico que proponen?
Hoy la Unión Europea es parte del problema y no de la solución. Es cierto que la UE, entre otras cosas, consiguió traer la paz al occidente europeo. Pero hoy la UE se ha consolidado como un nuevo bloque insolidario, responsable y beneficiario de la actual división del mundo en enriquecidos y empobrecidos. Políticas como aquella que subvenciona cada vaca europea con 3 euros al día, mientras más de 3.000 hermanos en el mundo viven con menos de un euro diario, directivas como la criminalización de los trabajadores inmigrantes, o declarar como socio preferente a la mayor potencia esclavista de al tierra que es China, son un ejemplo de ello.
El modelo económico que nuestro partido propone, y de ahí emanan todas sus propuestas, pasa por un principio muy sencillo, que es poner el TRABAJO por encima del CAPITAL, que no es más que un principio económico que pasa por poner la dignidad de todo ser humano (factor trabajo). por delante del capital. Por afirmar esto mismo, Gorbachov dijo que Juan Pablo II era el mayor socialista del planeta. Eso es lo que la izquierda real debe defender, pero el PSOE actual hace tiempo dejó de ser de izquierda. Si hablar de solidaridad es socialista, si es ser de izquierda, el partido SAIn es de izquierda. Una izquierda que nada tiene que ver con lo que hoy oficialmente se llaman partidos de izquierda, y que han traicionado sus orígenes y sus ideales.
Un principio económico básico es que sólo el trabajo genera riqueza, y sin embargo hoy hemos construido un mundo en que la riqueza no la poseen los que la generan. Siendo el valor del trabajo sagrado, su precio es miserable para la inmensa mayoría de la humanidad. La primacía del capital sobre el trabajo, que es el motor del actual sistema económico, ha generado un mundo de hambrientos, de oprimidos, de esclavos, de sin techos… Esa es la realidad para más del 85 % de la humanidad. Según datos recientes de la OCDE, 6 de cada 10 trabajadores en el mundo trabajan sin contrato laboral.
-Su partido se define como provida y está en contra del aborto, la eutanasia, la pena de muerte, la manipulación genética con seres humanos, la eugenesia, todas las guerras y cualquier tipo de terrorismo. ¿Se han adherido al Manifiesto de los Principios No Negociables? ¿Por qué cree que apenas hay partidos políticos de izquierda en todo el mundo que defiendan algo tan elemental como la dignidad de la vida humana desde su concepción hasta su muerte natural?
No nos hemos adherido a ese manifiesto que alude. Hace ya años lanzamos un manifiesto cuyo título era “Rechazamos el aborto porque somos de izquierda”. A él se adhirieron numeras personas y organizaciones. El Presidente de Uruguay, el socialista Tabaré Vázquez, vetó la despenalización del aborto en su país, aludiendo que es preciso atacar las causas del aborto, que surgen de la realidad socioeconómica y laboral. También el incremento del aborto en España tiene mucho que ver con lo anterior ¿en cuántos de los 120.000 abortos que se produjeron en nuestro país el año pasado había detrás condiciones de explotación y esclavitud laboral? La palabra que usaron los pobres para autodefinirse fue la de PROLETARIADO, es decir la de aquel cuya única fuerza era la prole, la descendencia. Pero los “progresistas” de hoy son millonarios, por eso defienden el aborto.
-El Partido Sain estuvo presente en los contactos entre diversas opciones políticas llevados a cabo precisamente para presentar una lista unitaria a Europa que defendiera precisamente esos principios no negociables. ¿Por qué no fructificaron? ¿No es suficiente la unidad en temas como la defensa de la vida, de la familia y del derecho de los padres a elegir el tipo de educación de sus hijos para lograr una lista de consenso?
No participamos en contactos para esa lista unitaria, aunque fuimos invitados a ello. La identificación aborto-progreso es tan nefasta como la identificación que muchos se empeñan en mantener de Iglesia y derecha. Gracias a Dios la Iglesia admite con naturalidad el pluralismo político y por eso rechazamos cualquier propuesta del tipo “voto católico” o “fuerzas católicas”, pues son formas de confesionalismo que nuevamente pretenden instrumentalizar a la Iglesia. Y eso le hace un flaco favor a la Iglesia.
-¿Cómo valora la actitud de Europa ante la inmigración? ¿qué política inmigratoria ofrece SAIN, desde sus valores cristianos, a la sociedad española y europea?
La manera en la que hemos tratado en Europa a los hermanos de otros países es una inmoralidad. En épocas de bonanza se les forzado a venir (a costa de desangrar a sus países) para explotarles y ahora que vienen mal dadas son los primeros en saltar por los aires con legislaciones y directivas (aprobadas unánimemente por PP y PSOE) para criminalizarles, poder encerrarles hasta 18 meses sin proceso judicial alguno, incluso cómo ya sucede en algún estado miembro, convertir en delito la solidaridad con ellos. Eso es absolutamente contrario a la moral cristiana.
El partido SAIn defiende que todo ser humano tiene derecho a inmigrar, y por supuesto acogerles como hermanos que son. Pretendemos abolir toda legislación lesiva contra los derechos humanos, como la directiva de la vergüenza. Ningún trabajador debe tener menos derechos por haber nacido en otro país. Pero también afirmamos que todo ser humano tiene derecho a no tener que emigrar, y eso pasa por restituir, por dejar de robar a los países empobrecidos como lo hace la UE a través de unos flujos comerciales, financieros, técnicos y humanos radicalmente injustos.
-Su presencia en los medios de comunicación mayoritarios es prácticamente nula, aunque van abriéndose camino en internet y algunas televisiones como Popular TV. ¿Creen que podrán romper alguna vez esa barrera que impide que gente de izquierdas y cristiana pueda conocer su existencia y plantearse el votarles?
Los grandes medios de comunicación son hoy la voz de sus amos que son los grandes bancos y los anunciantes y por eso es ingenuo pretender que estos medios den voz a los que no la tienen, y que sin embargo son la mayoría de la humanidad. Defenderán el voto útil, que por cierto, es el voto de los que no quieren que nada cambie. Para romper esa barrera utilizamos otros medios de comunicación, como en internet, con nuestra página web www.partidosain.es y el periódico “Solidaridad”, que se distribuye en las calles, las Casas de Cultura y Solidaridad...