(Fides) Las noticias sobre la venta de dos iglesias en Bagdad están alimentando una polémica que implica, no solo a las comunidades cristianas locales, sino también a las jerarquías eclesiásticas y a los cristianos comprometidos en política. Después de las manifestaciones de protesta organizadas contra un proyecto de renovación urbana que también supondría la demolición de la iglesia caldea dedicada a la Sabiduría Divina, en el distrito de Adhamiya, sale a la luz un nuevo caso sobre la posible venta y demolición de una iglesia siro-católica en la parte central de Bagdad, cerca del mercado de Al Shorjh.
Según las noticias recogidas en la web ankawa.com, el edificio está a punto de ser vendido y demolido para dar cabida a una zona comercial. De acuerdo con estos rumores, el diputado cristiano Immanuel Khoshaba anunció que él y sus compañeros que ocupan los cinco escaños parlamentarios reservados a los cristianos, están decididos a solicitar el inicio de una investigación parlamentaria sobre la venta de iglesias y propiedades cristianas tanto en Bagdad como en otras zonas del país.
El político cristiano cuestiona la actuación del Departamento de Instalaciones Religiosas (Waqf), que se ocupa de las propiedades pertenecientes a grupos religiosos minoritarios, ya que la compra y venta de tales propiedades solo puede tener lugar con el permiso de esta institución gubernamental.
El ex diputado cristiano Joseph Saliwa también ha tomado cartas en el asunto acusando al Waqf y a las jerarquías eclesiásticas de estar involucradas en la venta de propiedades cuyos beneficios son todavía desconocidos. Una nota del Patriarcado caldeo responde a estas declaraciones de Saliwa. En este mensaje, se definen como «vergonzosas» las acusaciones de comportamiento mafioso dirigidas también al clero implicado en la ayuda a los refugiados, anunciando acciones legales contra el ex parlamentario iraquí.