(OMPRESS/InfoCatólica) El director de Obras Misionales Pontificias (OMP) en España y arzobispo de Pamplona-Tudela, monseñor Francisco Pérez González, y el subdirector nacional, Anastasio Gil, presentaron la Memoria 2008-2009 de OMP, durante la Asamblea Nacional que concluye este mediodía en Madrid.
Don Anastasio Gil afirmó que “la figura de san Pablo ha iluminado el quehacer misionero de este año” y comentó los aspectos más sobresalientes de la actividades de OMP. Respecto a la animación, el subdirector consideró una “buena experiencia” las jornadas que se realizan en las distintas zonas y la buena acogida que continúa en las Jornadas nacionales del DOMUND, Vocaciones Nativas e Infancia Misionera y mencionó otras actividades que “van creciendo” como los sembradores de estrellas, los talleres misioneros de jóvenes o el festival de la Canción misionera, realizado en colaboración con Cristianos sin Fronteras.
El subdirector de OMP destacó a continuación el esfuerzo hecho en el ámbito informativo a través del servicio de OMPress; las distintas publicaciones realizadas desde OMP (Iglesia en Misión, Misioneros Tercer Milenio, Supergesto, Gesto, Enfermos Misioneros e Illuminare); así como la actualización permanente a través de la página web y el programa de OMP en Radio María, entre otras iniciativas.
Dentro de la actividad formativa, OMP ha editado diversas carpetas de formación y , en colaboración con la Comisión Episcopal de Misiones han publicado varias obras. Señaló también el aumento en la participación en el Encuentro de Empleados y Voluntarios, la Escuela de Formación Misionera, la Cátedra de Misionología o la Semana Española de Misionología.
Por último, en el apartado dedicado a la cooperación, la Memoria de OMP destaca la cooperación espiritual a través de la Misa por la Evangelización de los Pueblos, la difusión del Rosario Misionero, o el solicitado librito de "Oraciones del niño misionero", así como la publicación de los testimonios de misioneros y la actualización permanente del listado de misioneros. En la cooperación económica se encuentran las becas a favor de las vocaciones nativas, los donativos y herencias de quienes dan sus bienes a la actividad misionera o la tarjeta Visa Domund.
En la jornada del miércoles, los Delegados provinciales de OMP asistieron a una mesa redonda sobre la animación misionera en la que participaron el obispo de Calahorra y La Calzada-Logroño, monseñor Juan José Omella; el delegado diocesano de Misiones de Ciudad Real, Damián Díaz; y una familia misionera de Zaragoza.
La familia estaba representada por José Miguel Taboada, su mujer María Pilar Tabuenca y uno de sus seis hijos, David, adoptado, con síndrome Down, quienes dieron testimonio de que “la animación misionera nace y se desarrolla en la familia”.
El matrimonio dijo que “su mayor vocación” ha sido que sus hijos “conozcan a Jesús” y explicaron que esto “tiene que empezar desde pequeños”. José Miguel y María Pilar tenían la costumbre de rezar con sus hijos por la noche y de modo que “Jesús era un miembro más de la familia” y que esta oración fue “conformando” su “estilo de familia misionera”. “Nos decíamos a nosotros mismos: esta casa no es sólo nuestra, esta familia, este amor, no es sólo para nosotros. Dios nos lo regala para compartirlo” -añadieron-.
Con esta convicción, esta familia acogió sucesivamente en su hogar a varios niños con problemas de salud, hasta adoptar a David. Además, confesaron que en su oración habían pedido mucho “tener algún hijo misionero” y Dios les escuchó regalando esta vocación a dos de ellos: María, misionera en Perú, y Miguel, misionero javeriano actualmente en Brasil.