(LifeSiteNews/InfoCatólica) El cardenal Thomas Collins denunció la eutanasia como «fundamentalmente errónea» en un discurso que pronunció el pasado viernes.
El Cardenal se dirigió a más de 1.700 asistentes durante la Cena Anual de Cardenales en el centro de Toronto el día 26 de octubre, en un discurso en que denunció que la «sombra fría de la eutanasia» se está «propagando por la tierra» después de que Canadá aprobó la legislación que prohibía la práctica el año pasado.
«Una reflexión sobre el poco tiempo que tenemos nos recuerda que no somos dueños, sino solo administradores de nuestras propias vidas. No somos tampoco dueños de la vida de otras personas, y no somos dueños de la vida que se nos confió a cada uno de nosotros. Debido a que no somos los dueños de la vida humana, ni la nuestra, ni la de otra ninguna otra persona, no tenemos derecho a quitarle la vida, y no tenemos derecho a quitárnosla nosotros mismos», dijo el Arzobispo de Toronto.
«A veces la gente hace eso, en un momento de pasión o desesperación, y la culpabilidad moral bien puede estar atenuada en esos casos. Pero está fundamentalmente mal tomar la vida de otra persona o quitarse la vida, con calma y libertad, con plena conciencia y determinación. No debemos tomar lo que no nos pertenece», continuó.
«La vida humana debe ser respetada, desde el primer momento de la concepción hasta la muerte natural, cuando cada uno de nosotros regresa al hogar del Maestro. En otras palabras, nadie tiene el derecho de jugar a ser Dios. Solo somos mayordomos, no el Maestro», agregó.
Intolerancia a la tolerancia
En otra parte de su discurso, el Cardenal denunció lo que llamó la «intolerancia a la tolerancia» un día después de que los legisladores de Ontario aprobaron un proyecto de ley que penaliza el discurso y la expresión pro-vida fuera de las clínicas de aborto.
Collins dijo que esa intolerancia da como resultado una sociedad «en la que el intercambio libre y respetuoso de ideas diferentes, de las que depende una sociedad sana, termina bruscamente con la excusa de que todos somos demasiado frágiles, como copos de nieve, para participar en un encuentro cortés con puntos de vista que difieren de los nuestros».
Presente en la audiencia estaba la Premier Liberal de Ontario, Kathleen Wynne.
Prohibición de la actividad provida en Cadaná
El Proyecto de Ley Liberal 163, aprobado el 25 de octubre, prohíbe toda actividad pro vida, incluido mostrar avisos próvida en las aceras y la «desaprobación» del aborto, dentro de los 50 metros cercanos a algún centro abortista de Ontario, una distancia que puede aumentarse a 150 metros previa solicitud. El proyecto de ley también permite que los hospitales, farmacias y centros de salud que realizan abortos, incluida la píldora abortiva, soliciten «zonas burbuja» que prohíban toda actividad pro vida de hasta 150 metros.
Collins dijo que la «intolerancia a la tolerancia» hace que la sociedad sea «más pobre».
«Nuestra sociedad es más pobre por eso, al igual que nuestra capacidad de vivir y aprender unos de otros como adultos maduros», dijo.