(InfoCatólica) La recientemente aprobada Ley de Afirmación de la Orientación sexual de la Orientación de Género y de la Expresión de Género, decreta que ninguna orientación o identidad sexual representa un desorden de la conducta que precise de tratamiento.
La ley penaliza no solo a los psicólogos y psiquiatras que accedan a dar tratamientos para cambiar la orientación sexual de los homosexuales, sino incluso a quienes animen a gays y lesbianas a recibir terapia. En este último caso, se enfrentan a multas de hasta cinco mil euros y a cinco meses de prisión. Los profesionales de la salud mental afrontarían multas de hasta diez mil euros y un año de prisión.
La nueva ley también reduce a 16 años la edad en la que se puede solicitar un tratamiento de cambio de sexo.