(ACI Prensa) Planned Parenthood no está dispuesta a perder el apoyo político con el que ya cuenta con Barack Obama en la presidencia. «Necesitamos a Hillary Clinton, campeona de la salud de las mujeres, en la Casa Blanca».
La multinacional del aborto explicó en su sitio web que en medio de lo que considera un «ataque sin precedentes» al aborto, «no nos podemos permitir tener un presidente que continúe estos ataques».
Planned Parenthood se encuentra en el centro de la polémica en Estados Unidos desde mediados de julio de 2015, en que una serie de videos revelaron el tráfico de órganos de bebés abortados en sus instalaciones. En distintos reportes, difundidos por el Center for Medical Progress (CMP, Centro para el Progreso Médico), se puede ver a altas directivas de la organización negociando órganos y tejidos de bebés por sumas entre los 35 y 100 dólares.
El Congreso de Estados Unidos, con mayoría del Partido Republicano en ambas cámaras, ha emprendido investigaciones contra la transnacional. Recientemente, tanto senadores como diputados aprobaron un proyecto de ley para cortarle el financiamiento público de más de 550 millones de dólares anuales. Este proyecto fue vetado por el presidente Barack Obama.
En la planilla de pagos de 2014 de Planned Parenthood figuraron 153 parlamentarios del Partido Demócrata, que recibieron más de 676 mil dólares. El propio Obama, en su campaña de reelección en 2012, recibió al menos 1,7 millones de dólares de la multinacional.
Para PPFA Clinton «es la más elocuente y frecuente defensora de Planned Parenthood, y la única candidata en hablar a favor de Planned Parenthood en los debates».
