El cardenal Parolin cree que el Papa publicará la exhortación apostólica postsinodal dentro de no mucho tiempo

Como "no tarde mucho" signifique lo mismo que el "Poco poco" con respecto a los Franciscanos de la Inmaculada, nos pueden dar las Uvas del 2018

Será el momento adecuado para acallar tantos disparates sembradores de confusión -verdaderas herejías, en sentido estricto- que se han venido difundiendo con su aparente respaldo de S.s. el Papa Francisco

Alguna vez podremos ser sensatos, coherentes con nuestra fe, de verdad creer en Dios y en su Providéncia y dejar de criticar...

LAUS DEO

Esa ultima frase, el hierro se trabaja mientras esta caliente.....
pues como la comparacion sea acertada, no creo que sea nada bueno. El hierro se calienta para cambiar su forma y estructura a base de martillazos o aplicacion de fuerza. El señor Parolin no da puntada sin hilo, asi que, si la pretendida analogía es correcta, no es un buen indicativo.

No sé, Arturo, lo que propones es más bien quietismo.

"Será el momento adecuado para acallar tantos disparates..."

Pues sí.

A rezar mucho por él.

Creo que, si lleva razón el cardenal Parolin, sería bueno para la Iglesia. En cualquier caso, además de que la exhortación apostólica correspondiente se produzca con la suficiente rapidez, creo que es incluso más importante que esta exhortación esté totalmente inspirada por el Espíritu Santo y también que sea admitida, sin discusión, por toda la Jerarquía de la Iglesia. Y, además, me atrevería a sugerir que, a los que no sean fieles a esta exhortación, se les expulse de la Iglesia hasta que rectifiquen.

Hay revelaciones marianas que auguran malos tiempos para la Iglesia. Parece ser que es seguro que se produzca un gran cisma dentro de la misma y que la Iglesia pase por un proceso similar al que sufrió la Pasión de Jesucristo. Ojalá no sea así, por el bien de todos. Pero, como siempre, el tiempo dará o quitará razones.

En Guayaquil, este julio:
"Poco antes de comenzar el Año Jubilar de la Misericordia, la Iglesia celebrará el Sínodo Ordinario dedicado a las familias, para madurar un verdadero discernimiento espiritual y encontrar soluciones y ayudas concretas a las muchas dificultades e importantes desafíos que la familia hoy debe afrontar. Los invito a intensificar su oración por esta intención, para que aun aquello que nos parezca impuro, como el agua de las tinajas, nos escandalice o nos espante, Dios -haciéndolo pasar por su ‘‘hora’’- lo pueda transformar en milagro. La familia hoy necesita de este milagro. […] Tened paciencia, tened esperanza, haced como María, rezad, actuad, abrid el corazón, porque el mejor de los vinos va a venir. Dios siempre se acerca a las periferias de los que se han quedado sin vino, los que sólo tienen para beber desalientos; Jesús siente debilidad por derrochar el mejor de los vinos con aquellos a los que por una u otra razón, ya sienten que se les han roto todas las tinajas."

Espero que el Papa en su Exhortación Apostólica Postsinodal prohíba terminantemente a los Obispos y Cardenales, que han mantenido posiciones pastorales heterodoxas, que las apliquen en sus respectivas Diócesis.

Poniendo un símil taurino, para mí el Sínodo ha hecho una faena aseada, merecedora de una oreja, pero no de dos orejas y rabo y salida a hombros por la puerta grande, pues a mi juicio le ha faltado una reprobación expresa de las pastorales heterodoxas defendidas por Kasper y Cía.

El Sínodo no ha aceptado nada herético, faltaría más, pero a mi juicio no ha sido todo lo firme y contundente que se debería haber sido frente a las proposiciones pastorales heréticas.

A mi juicio, el Papa debería rematar la faena y condenar de una manera expresa y enérgica las propuestas pastorales heréticas de Kasper y Cía, advirtiéndoles de que si las ponen en práctica serán severamente castigados de acuerdo con el Código de Derecho Canónico.

No debemos permitir que los Obispos y Cardenales heréticos se suban a las barbas del resto de la Iglesia. Si se obcecan en aplicar sus pastorales heréticas que formen su iglesia aparte de la Católica. Que todo el mundo sepa que han dejado de ser y pertenecer a la Iglesia Católica.

Recemos para que el Santo Padre se llene del Espíritu Santo y que le ayude een su decisión.
Tengamos Esperanza, Dios no nos abandona