(OMP) Para explicar en qué consiste esta obra, tres vocaciones nacidas en América, África y Oceanía han mostrado la necesidad de ayuda que tienen para completar su formación.
Al igual que en China crece la economía, debería crecer también la Iglesia», ha afirmado Tomás Zhang, diácono chino de la Iglesia clandestina. Dentro del crecimiento de esta iglesia, es esencial la formación de los sacerdotes nativos, para que a su vez sean germen de las vocaciones futuras. Actualmente la Iglesia fiel, tal como él llama a la Iglesia clandestina, sufre grandes dificultades.
Tal como ha explicado, los seminaristas viven en pisos de feligreses de las que no salen, escondidos. Estos feligreses se juegan la vida ofreciendo sus hogares, y Tomás les está muy agradecido. Cada seis meses cambian de residencia, y se marchan sin saber a dónde para continuar su vocación sacerdotal. «Todos los seminaristas son 'santitos», ha afirmado este diácono, que ha contado cómo desde pequeño asistía a las capillas clandestinas a rezar. Ha afirmado que dentro de la formación de los seminaristas es imprescindible el conocimiento teológico, y por ello su obispo le mandó a España, fuente tradicional de esta ciencia.
En América la situación en bien distinta. Soledad Pavón, religiosa de las Misioneras Cruzadas de la Iglesia nació en Argentina, y dejó su profesión de fisioterapeuta para formarse como religiosa misionera. Ha contado que la formación para ser religiosa es muy amplia, y actualmente la está completando en Madrid, mientras trabaja para Cáritas. «La Iglesia en América tiene una identidad propia, y es el momento de que salga a evangelizar», ha explicado esta religiosa, subrayando que no se trata de sustituir a Europa.
Theodore Kanyiki ha explicado que en el Congo es esencial la ayuda de Obras Misionales Pontificias a través de lo recaudado en la Jornada de Vocaciones Nativas. «Nuestros seminarios funcionan con la ayuda de Obras Misionales Pontificias al 90%. Yo soy fruto de ello», ha afirmado en varias ocasiones. Este sacerdote ordenado en 2004, ha dedicado sus fuerzas a la Infancia Misionera en Mbujimayi. «Hay que cuidar a los niños, ellos no sólo son el futuro, sino el presente de la Iglesia».
Presentación de la Jornada
D. Anastasio Gil García ha presentado la Jornada, que este año se celebrará bajo el lema «Vocaciones Nativas. Señal de Esperanza». La Jornada está coordinada por la Obra de San Pedro Apóstol, una de las cuatro que integran las OMP. Esta obra ayuda a uno de cada tres seminaristas del mundo. Tal como ha explicado el director de OMP, una forma concreta de colaborar son las becas de estudio, con las que se cubre la formación de las vocaciones de los Territorios de Misión.
Junto con Ángel Pérez Pueyo, secretario de la Comisión Episcopal de Seminarios y Universidades, ha presentado el trabajo conjunto de ambas instituciones, materializado en el folleto Pascua Vocacional. «La Iglesia se consolida cuando nacen hijos que entregan su vida al servicio del reino», ha afirmado Ángel Pérez, y ha mostrado gran satisfacción por la colaboración de las dos instituciones, como símbolo de comunión.
La Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones - organizada por la Conferencia Episcopal- tendrá lugar el próximo domingo 21 de abril, y una semana después la Iglesia española celebrará la Jornada de Vocaciones Nativas, concretamente el 28 de abril.
