(Agencias/InfoCatólica) El secretario general de la CEE ha censurado, sin embargo, el uso de este fármaco «por su efecto abortivo», aunque ha añadido que si hubiese un fármaco, «que no nos consta», que no provocara este efecto pero evitase la concepción en casos de violación sería «legítimo».
Mons. Martínez Camino se ha mostrado convencido de que los obispos alemanes no han hecho ninguna excepción a los principios básicos de la ética católica que determinan que no se puede eliminar la vida de un ser humano inocente.
«No se puede quitar la vida a un ser humano inocente bajo ningún concepto y no hay excepciones para esto», ha subrayado para después añadir que si hubiese un fármaco que no fuese abortivo el concepto moral «sería distinto». «Si en Alemania lo hay, nosotros no lo conocemos», ha asegurado.
El obispo ha recordado que la vida de un ser humano comienza en el momento de la concepción, «cuando hay un cuerpo distinto del de la madre y del padre, aunque sólo tenga una hora», y a partir de ese momento «no es lícito ejercer la violencia contra él para eliminarle la vida».
«Todos los fármacos que conocemos hasta ahora, y que se llaman píldora del día después, consisten en un compuesto hormonal que puede impedir la anidación del óvulo fecundado si se ha dado la fecundación y eso es impedir que siga adelante la vida de un ser humano incipiente y es un aborto precoz», ha sentenciado.
En este sentido, ha insistido en que no conoce ninguna píldora del día después que no tenga un posible efecto abortivo, aunque –ha añadido– «eso no quiere decir que los alemanes no la conozcan». «Si la hay, con la doctrina que tenemos se puede utilizar», ha afirmado para subrayar la legitimidad del uso de un fármaco que evite la concepción en casos de violación.
Martínez Camino ha hecho estas apreciaciones en rueda de prensa tras la reunión de la Comisión Permanente de la CEE celebrada ayer en lugar de los días 26 y 27 como estaba previsto, debido a que algunos de sus miembros viajarán a Roma para asistir a la última audiencia pública de Benedicto XVI.
La Iglesia ante la crisis
Preguntado por la denuncia del Foro de Curas de Madrid, que ha censurado el silencio de la jerarquía católica española ante los casos de corrupción protagonizados por «algunos de los que están haciendo pagar la crisis a los más desfavorecidos de la sociedad», Martínez Camino ha aludido a las «muchísimas» declaraciones y doctrinas de la CEE sobre corrupción y falta de transparencia.
«No es verdad que no haya doctrina, lo que no puede haber son juicios sobre personas concretas, nunca los ha habido ni los va a haber», ha comentado.
Sobre los motivos que han llevado a Benedicto XVI a renunciar al pontificado y la posible influencia en esta decisión de los casos de pederastia dentro de la Iglesia, el secretario general de la CEE ha explicado que cuando el papa aceptó el cargo «no ignoraba los problemas» que afectaban a la institución.
En ese sentido, ha asegurado que «las razones de la renuncia del Santo Padre son las que él ha dicho, lo demás son hipótesis y cábalas infundadas».