Un miembro del nuevo gobierno de Cataluña es un firme defensor del aborto y el matrimonio homosexual

A todo esto ¿qué dicen el clero y las religiosas que tanto jalean el antiespañolismo? Seguirán estando conformes?

A esto nos han llevado los obispos separatistas. A esto llevan las "esteladas" en las Iglesias. A esto lleva la homilía del obispo de Solsona y los comportamientos impropios de un cristiano de obispos como el de Gerona.

Pedro y Pere: no mezclemos las cosas. El Sr. Vila es un homosexual declarado. Convergencia i Unió es para el clero catalán lo que el Partido Popular es para el clero del antiguo Reino de Castilla (excepto en el País Vasco, donde el clero vasco ve todas las gracias y virtudes al PNV). Ahora bien, Convergencia i Unió son unos "liberales de derechas" que han subido al carro homosexualista al igual que el PP, que más pronto que tarde incorporará homosexuales en sus listas y les dará importantes cargos: hay un alcalde próximo a Madrid, me parece...

El clero en España se ha apuntado al "centrismo liberal de derechas" desde los finales del franquismo: en Cataluña toca CIU, en el País Vasco toca PNV y en el resto de España toca PP, las posturas más extremas les provocan temblores (de momento...).

Comentando el titular de esta noticia, a mí más bien lo que me sorprendería es que ningún miembro del nuevo gobierno de Cataluña fuera un firme (o al menos bastante o medianamente firme) defensor del aborto y del matrimonio homosexual.

No nos engañemos: la derecha política está tan contagiada (o casi) de los males morales de las sociedades actuales como la izquierda política, y esto ocurre tanto a nivel estatal, como autonómico, como provincial, como local, etc.

El mal moral, manifestado en forma de relativismo, laicismo, neopaganismo, apostasía, etc. está tan extendido que lo raro sería encontrar un Gobierno o administración política que fuera entera y coherentemente "cristiana católica".

dinamita: eso quieren ser.
Los católicos hemos de ser amor.

En estos tiempos todo el mundo exige coherencia. Artur Mas es católico. Va a Misa los Domingos según me cuentan. Y sin embargo no tiene ningún empacho en hacer una política muy anticristiana y antiIglesia. Entonces estos caztólicvos lo que hacen es desacreditar a la Iglesia y hacer que otros la ridiculicen y que ellos sean también ridiculizados por su falta de coherencia. ¡ Con lo listos que son y no se dan cuenta !.

Está muy bien que Artus Mas vaya a misa todos los domingos, si realmente lo hace, como dice abc.

Pero, además, creo que debería también darse cuenta de que, si quiere ser un buen católico, no debe fomentar el independentismo o el separatismo (en la forma que sea). Además, no estaría de más que se leyese el Catecismo de la iglesia católica (me refiero al Catecismo mayor, es decir, al último (u oficial) de Juan Pablo II), en el que, si no recuerdo mal, se dice, entre otras cosas, que los católicos debemos amar a la patria o a la nación -no recuerdo las palabras exactas-, pero a la patria "grande", no a la patria "chica", en este caso Cataluña, como la entienden él y otros nacionalistas o separatistas).

Además, debería ser conscienete de que fomentar las posturas antes mencionadas es uno de los frutos del demonio, padre de la mentira, y también de la división, del separatismo, de los divorcios, de los desamores, etc.

Puede que en mi comentario anterior no me expresesara del todo perfectamente. Lo que probablemente dice el Catecismo (y, en todo caso, eso eso es lo que yo quise decir) es que debemos amar primero a la nación o patria "grande" antes que a la "chica". En el caso e Mas (o en el mío propio, por ejemplo), debemos amar primero a España antes que a Cataluña (en el caso de Artur Mas) o a Murcia (en mi caso).

Si lo hacemos al revés, lo que estamos fomentando es el independentismo, el separatismo, la división, el enfrentamiento (verbal o físico, etc.), y eso no es más que un fruto del demonio. Y no debemos olvidar que uno de los frutos del demonio fue, en el caso de España, una guerra civil que tuvo lugar hace ya más de medio siglo, antesala de la II Guerra Mundial, que duró varios años y que, como todas las guerras, tuvo consecuencias muy negativas para España (aunque también otras muchas positivas, porque Dios también puede sacar bienes de los males y creo que, de no haberse producido esa guerra civil, probablemente (entre otras cosas) habríamos tenido que sufrir las consecuencias de la dictadura comunista durante muchos años y el catolicismo habría quedado relegado a un segundo plano hace ya muchísimos años).

Experiencia de fe y oración, es lo que nos hace falta a todos los cristianos. Y También mucho amor, pero también coherencia y testimonio, para convertir a muchos incrédulos, que no tienen esa experiencia de Dios, como tenemos muchos católicos y que les podría hacer tanto bien.