(Fides) El comunicado especifica que «unas sesenta tumbas han sido profanadas en el cementerio de San Lázaro de Betania y más de un centenar en Bel Air».
El Cardenal Théodore Adrien Sarr, Arzobispo de Dakar, y los responsables de la gestión de los cementerios cristianos, en nombre de toda la comunidad cristiana, han expresado su indignación y consternación por estos actos vandálicos. Don Gomis ha entrevistado a los guardianes de los cementerios, los cuales afirman que los ladrones se llevan los crucifijos de bronce de las tumbas más antiguas, ignorando las más nuevas.
En ambos cementerios, los guardias habían informado a las autoridades locales de la necesidad de aumentar la altura de las paredes para garantizar la seguridad. En Bel Air tres voluntarios ofrecen un servicio de seguridad de las 18,30 a las 21, ya que, según los guardias, después de las 21 horas, los ladrones prefieren no aventurarse en el cementerio.