El Valle de los Caídos se cae del todo
Hay cosas que, en verdad, se ven venir porque los sujetos activos de las mismas son como son y poco más se puede esperar de los mismos.
El Valle de los Caídos tenía, como ha sido desde que se construyó, los días contados.
El reloj que lleva a cabo la cuenta atrás lleva un tiempo funcionando que es, más o menos, que desde el partido que ocupa el poder en España llegó al mismo allá por el año 2004.
No gusta el Valle de los Caídos. Y no gusta, en primer lugar, por haber sido construido en el tiempo en el que fue construido. Por mucho que se tuviera la intención de recordar a todos los muertos en la Guerra Civil de los años 30 del siglo pasado importa poco a las personas que, tantos años después, pretenden hacer de su capa un sayo, escribir la historia como les conviene y, sobre todo, cambiar lo que es por algo que sea de su gusto y aprecio.