Mons. Müller: "La sana doctrina es el instrumento para llegar a la plena comunión con Dios"
José Manuel Vidal, director de Religión Digital, ha conseguido entrevistar al Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, Mons. Gerhard L. Müller, que ha visitado España para acudir a unas jornadas de la Universidad de Comillas. Lo primero de todo, le felicito por ello.
De las respuestas del arzobispo alemán, lo que dice sobre la Teología de la Liberación (TL) no es nuevo. Es lo que él piensa desde siempre y obviamente no ha cambiado de opinión. Cuando el papa Benedicto XVI le encargó ese dicasterio, sabía bien cuál era su postura. Como quiera que no soy un experto en la polémica doctrinal en torno a la TL -aunque sí tengo muy claro cuáles han sido sus consecuencias para Hispanoamérica-, dejo esa cuestión en manos de quienes sí lo conocen bien.
Dice el prelado curial:
… es necesario reconciliar los partidos que existen en la Iglesia. Todos aceptan la sana doctrina de la Iglesia, es posible tener un cierto pluralismo en el estilo de la piedad, de la veneración a Dios. Tenemos estos diversos ritos en la Iglesia. El pluralismo en el estilo de la Teología, todas estas maneras diversas, pero todos vivimos la misma fe, los mismos sacramentos. Nuestra Congregación no sólo tiene la tarea de excluir a los heréticos, sino también a promover la fe, vivir en la unidad que Jesús nos ha dado. Existe una unidad en una cierta pluralidad.
Destaco dos cosas:
- Una, la idea de que todos los “partidos” que existen en la Iglesia aceptan la sana doctrina. Habla de unidad en cierta pluralidad. Si dice cierta, se sobreentiende que no es cualquiera.
-Dos, afirma que su dicasterio no tiene solo la tarea de excluir a los herejes. Pero con ello reconoce implícitamente que sí tiene esa tarea. Ciertamente Doctrina de la Fe ha de promover la fe. Es de cajón. Y también es de cajón que tiene que poner freno a los que desde dentro pretenden separarse de la fe. Pluralidad, la que se quiera, pero siempre dentro de la sana doctrina. No fuera. Dentro.
Dice:
Existe una cabeza pero distintos miembros, distintos carismas. Tenemos que superar esas ideologías de la política, izquierda-derecha, conservador o progresista. Estas son las categorías que vinieron de la filosofía del Iluminismo, del siglo XIX, que han llegado lamentablemente a la Iglesia. Esto no tiene nada que ver. Creemos en Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, en la Iglesia que es la Esposa de Jesucristo. Tenemos que superar estas alas o partidos que existen. Nosotros somos la Iglesia.
Estoy de acuerdo en que hay que superar las categorías políticas a la hora de hablar de lo que ocurre dentro de la Iglesia. A partir de ya, intentaré no usarlas. La cosa es mucho más simple. Usemos el lenguaje de los apóstoles. Existen los que aceptan la doctrina de la Iglesia y los que no. Existen los buenos maestros y los falsos maestros. O sea, ortodoxos y heterodoxos. Esas son las categorías a usar. Ahora bien, ciertamente no podemos renunciar a usar algunos términos que históricamente sirven para definir determinada manera de hacer teología. Por ejemplo, Bultmann es un teólogo liberal. Ese “liberal” no tienen una connotación política, por mucho que el liberalismo político pueda tener alguna relación, en su base, con ese tipo de teología. Pero de alguna manera habrá que llamar a quienes sostienen determinadas tesis sobre la Revelación, la Biblia, la exégesis, etc.
Lo de creer en Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo es algo propio de todos los cristianos. Incluso los protestantes aceptan que la Iglesia es la Esposa de Cristo. Ahora bien, no todos los que creen eso son católicos. No hace falta que lo explique. Por tanto, no basta con ser trinitario para estar en plena comunión con la Iglesia Católica. Tampoco creo que el arzobispo Müller lo pretenda.
Dice el Prefecto de Doctrina de la Fe:
La unidad en la fe revelada es la más importante tarea del prelado. El Papa, desde el principio, es el fundamento de la unidad. Todos, miembros de la Iglesia de Cristo. Se trata de dar esta primacía a la Fe en la Curia, y el segundo paso a la política diplomática, la relación con los Estados, que también es muy importante para el avance de la sociedad. Pero la razón de nuestra existencia es la relación de los hombres para con Dios, y la vida eterna. Por eso, la sana doctrina es el instrumento para llegar a la plena comunión con Dios, la vida eterna con Dios y los prójimos.
¿Lo han leído ustedes bien? Se lo repito: “la sana la sana doctrina es el instrumento para llegar a la plena comunión con Dios, la vida eterna con Dios y los prójimos“.
¿Se entiende ahora por qué algunos somos especialmente “pesados” en recalcar la necesidad de velar por la sana doctrina? ¿se entiende por qué creemos que es misión ineludible de la Iglesia combatir, siempre desde la misericordia, la herejía? ¿qué piensan que buscamos los que pensamos así? ¿promover un cisma? ¿llevar la razón porque sí? ¿no será más bien que sabemos que “la sana doctrina es el instrumento para llegar a la plena comunión con Dios” y por tanto, la herejía es el camino directo para alejarse de Dios y de su Iglesia?
Mons. Müller no hace otra cosa que recordar lo que ya enseñaron los apóstoles:
Vela sobre ti, atiende a la doctrina, insiste en ella. Haciendo así te salvarás a ti mismo y a los que te escuchan. (1ª Tim 4,16)
¿Lo ven ustedes? Más:
Cuanto a ti, habla de modo conveniente y ajustado a la sana doctrina. (Tit 2,1)
Y:
Pues como habéis recibido al Señor Cristo Jesús, andad en El, arraigados y fundados en El, corroborados por la fe, según la doctrina que habéis recibido, abundando en acción de gracias. (Col 2,6-7)
Y bien, ¿qué decían los apóstoles respecto a los que se separan de la doctrina de Cristo y de su Iglesia?:
… pues vendrá un tiempo en que no sufrirán la sana doctrina, antes, deseosos de novedades, se rodearán de maestros conforme a sus pasiones, y apartarán los oídos de la verdad para volverlos a las fábulas. (2ª Tim 4,3-4)
Y:
Os recomiendo, hermanos, que tengáis los ojos sobre los que producen divisiones y escándalos en contra de la doctrina que habéis aprendido, y que os apartéis de ellos. (Rom 16,17)
Todo el que se extravía y no permanece en la doctrina de Cristo, no tiene a Dios; el que permanece en la doctrina, ése tiene al Padre y al Hijo. Si alguno viene a vosotros y no lleva esa doctrina, no le recibáis en casa ni le saludéis, pues el que le saluda comunica en sus malas obras. (2 Jn 9-11)
¿Haremos caso a los apóstoles o desobedeceremos sus mandatos? Aun más, ¿haremos caso a Cristo o nos comportaremos como la Iglesia de Pérgamo?:
Pero tengo algo contra ti: que toleras ahí a quienes siguen la doctrina de Balam… Así también toleras tú a quienes siguen de igual modo la doctrina de los nicolaítas. Arrepiéntete, pues; si no, vendré a ti pronto y pelearé contra ellos con la espada en mi boca. (Ap 2,14-16)
¿Qué parte de la Escritura no entienden los que opinan que hay que dejar campar a sus anchas por la Iglesia a los heterodoxos?
Ni que decir tiene que la caridad es fundamental a la hora de tratar a los que están en el error.
Y si teniendo el don de profecía, y conociendo los misterios todos, y toda la ciencia, y tanta fe que trasladase los montes, no tengo caridad, no soy nada. (1ª Cor 13,2)
Pero al mismo tiempo, no hay mayor caridad que corregir, e incluso disciplinar, al que no solo está errado sino que conduce a otros al error.
Hermanos míos, si alguno de vosotros se extravía de la verdad y otro logra reducirle, sepa que quien convierte a un pecador de su errado camino salvará su alma de la muerte y cubrirá la muchedumbre de sus pecados. (Stg 5,19-20)
Por último, quiero destacar lo que Mons. Müller afirma sobre las palabras de Hans Küng y su posible suicidio asistido:
Es muy lamentable. Él es teólogo, tiene que saber que Dios es el dueño de nuestra vida, y que el suicidio no es una solución legal o ética responsable. Espero que nadie siga el ejemplo de Hans Küng en esto que ha dicho. Es muy triste para mí que un teólogo que cree en el Dios creador se explique de esta manera. Está realizando la negación de la gracia. Nuestra vida está en las manos de Dios.
Ante ello, vuelvo a pedirles a todos ustedes que recen por el sacerdote y teólogo suizo. O se convierte o su destino eterno estará alejado de la gracia de Dios. No hace falta que le ponga el nombre a eso. Saben ustedes muy bien lo que es.
Luis Fernando Pérez Bustamante
PD: Sumamente interesante también esta frase del Prefecto de Doctrina de la fe:
También en España, todos tienen que entenderse como españoles a pesar de tener una cultura en Cataluña, el País Vasco o en Castilla. Todos los países en Europa tienen diferentes culturas: esto enriquece en sí mismo. Pero es inútil dividir una nación.
Ahí queda eso.
30 comentarios
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LF:
Pues ya lo ha hecho. Responder públicamente en una entrevista que es intolerable lo que ha dicho. No es poca cosa.
No pretenderemos que vaya a abrirle un proceso canónico a un enfermo terminal, ¿verdad?
Y al parecer, no le van a hacer mucho caso a lo que dijo sobre Küng: "esta renunciando a la Gracia".
Saludos LF.
Que unos prefieren la Misa tridentina, pues vale, pero sin despreciar ni declarar off side a la Postconciliar. Y viceversa.
Que unos son más tomistas que agustinistas o al contrario, pues vale, pero que ambos diputen con lealtad y caridad los puntos de controversia y se llegue a la verdad más plenamente.
Pero como muy bien señala LF, lo que nunca se podrá es llegar a un acuerdo de admisión con las doctrinas heréticas, por muy caritativos que queramos ser, y en esos casos la caridad bien entendida está en corregir, amonestar y reprender pero buscando siempre el bien del hermano herrado.
Se supone igualmente, que tendrá noticia de válidos teólogos, como Fessard,De Lubac, Congar,Scheffczyk, Kloppenburg, Bojorge y tantos más, que tuvieron sus serios "peros", respecto a dicha teología.
Sabrá igualmente que no todos han sido como su amigo G. Gutiérrez, dado que Boff, Segundo, Sobrino y una gran lista han desbarrancado seriamente, siguiendo las sendas de esta teología.
Müller, en la última sesión de la Pontificia Comisión Bíblica, regaló a sus miembros el libro: "Pope Francis" de M. E. Bunson (2013,en cuyas páginas 126 - 130, trata de "Liberation Theology". Se muestra allí cómo, durante el provincialato de Bergoglio, dados sus serios reparos a tal corriente doctrinal desviada en su tierra argentina, hubo de sufrir un penoso aislamiento.
El recurso a la fuerza que invoca la TL no es necesariamente malo, pues es doctrina clásica de la Iglesia que en ciertos casos es legítimo el uso de la fuerza para derrocar al tirano. Por supuesto siempre que concurran una serie de circunstancias precisas.
La TL no pone principalmente el acento en la Gracia de Dios para instaurar el reinado de la Justicia en la Tierra, sino en las mediaciones humanas como la lucha de clases y la excesiva e ingenua confianza en la llamada dictadura del proletariado y más concretamente en su élite dirigente.
La TL, al menos en su formulación primera, es una especie más de pelagianitis crónica, como también lo es el capitalismo que piensa que solo con las iniciativas libres del ciudadano y la ley del mercado basado en la oferta y la demanda se puede conseguir la justicia y el bien común.
De todas formas el P. Gustavo Gutierrez, padre de la TL, ya ha corregido en parte su TL y parece que se podría llegar a una formulación aceptable para la Iglesia Católica, aunque de momento no se ha logrado aún. Se está trabajando en ello.
Tanto el capitalismo, defendido en general por los sectores más conservadores de la Iglesia, como el comunismo basado en la TL, defendido en general por los sectores más progres, son pelagianos a más no poder.
Hay que superar ambas posturas y me malicio que una de las principales preocupaciones de Papa Francisco es esa y que está trabajando en ello. Ni capitalismo ni comunismo TL, simplemente economía cristiana, católica, apostólica y romana.
Por la revolución económica Cristiana y Franciscana !Presente¡
Pepito, cuando yo iba a la secundaria, en una materia practicamente nueva, llamada Economia Social, me llamo la atencion lo primero que se enseñaba: que la Iglesia Catolica es la principal institucion que siempre ha promovido una economia mas justa y humana. Y no hablo de un sistema educativo precisamente cristiano.
Saludos.
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LF:
No hay que estudiar teología para andar en la sana doctrina. Basta con conocerla (p.e a través de la predicación) y vivir en ella por gracia.
Este es el problema de fondo de la TL y no el amor a los pobres, que pertenece al tesoro del Evangelio que la Iglesia siempre ha poseído, aunque sus miembros no siempre lo hayamos vivido ejemplarmente.
G. Gutiérrez desde su entrada en la Orden de los Predicadores (y para alcanzar el permiso de ser aceptado en ella) ha matizado su teología y ha cambiado su exégesis bíblica. Prueba de ello es haber definido a la Iglesia y al sacerdote como señal e instrumento de unidad, lo opuesto a lo que diría la hermenéutica marxista.
En lo que dice G. Müller no hay nada nuevo. Aunque el actual Prefecto no es el de antaño, gracias a Dios, tampoco la TL de hoy es la TL de antaño.
EL PLURALISMO del cual habla Müller tratando de adjudicarlo a la sana doctrina, el pluralismo, repito, es LIBERALISMO, ES MODERNISMO, ES FUENTE DE HEREJÍA.
La doctrina de nuestro Señor Jesucristo no es para someterla a foros pluralistas porque es VERDAD ABSOLUTA.
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LF:
No. En la historia de la Iglesia han existido muchas discusiones doctrinales sobre cuestiones no definidas dogmáticamente. Incluso sobre materias tan importantes como la gracia. Y todos eran igual de católicos.
El pluralismo, por tanto, no es necesariamente liberalismo y modernismo.
Cierto, la Iglesia es la principal institución que siempre ha promovido una economía más justa y más humana, y ahí está precisamente la Doctrina Social de la Iglesia.
Pero es una Doctrina que, a mi juicio, está aún bastante incompleta y ambigüa y que tendría que ser más precisa en muchos temas.
Lo dicho: trabajo, trabajo y trabajo franciscano para perfilar con más nitidez cómo sería una economía conforme con el mandato inexcusable de la Caridad cristiana. Creo que a pesar de todo lo que la Iglesia ha hecho en esta materia, aún está un tanto verde la cosa.
Hay importantes brotes doctrinales que apuntan hacia una economía cristiana, pero a mi jucio aún necesita hacerse adulta y crecer más la planta.
Pero Papa Francisco y su G-7 creo que darán un importante avance en tan espinoso tema, con especial asistencia del Espíritu Santo. Aquí el pelagianismo no tiene cabida, ni siquiera en economía.
Creo que el P. Gustavo Gutierrez, OP, está también perfeccionando su TL y dando nuevos aportes.
Se explica de una manera clara y contundente con la humildad y la serenidad que le caracteriza, con su acento latinoamericano en Español , plasma con sus palabras la relación del hombre con Dios en la doctrina sana de la fe.
¡Qué bien hizo el Santo Padre Francisco en volver a nombrarle en el cargo! …Pues se lo tiene bien ganado porque es buen conocedor de los asuntos de la fe.
Por lo pronto que cuente con mi oración en esta segunda etapa de responsabilidad y trabajo.
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LF:
Matiz. Más que nombrarle, lo que hizo fue ratificarle, :)
No he necesitado ninguna serie de artículos explicando lo que ha querido decir.
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LF:
Esto fue lo que dijo Benedicto XVI en mayo del 2007:
"El cambio de la situación política en América Latina ha propiciado también el cambio sustancial de la doctrina que predica la Teología de la Liberación. El magisterio de la Iglesia no ha pretendido destruir el sentido de justicia social, sino reconducirlo por el camino justo".
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LF:
Es que ya existe un nombre para lo bueno. Se llama Doctrina Social de la Iglesia. Lo que sea conforme a ella, vale. Lo que no, no.
Si se aplica esa penuria y dejación a materias de fe...
Sólo toca sufrir.
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LF:
Bueno, el arzobispo habla español pero no perfectamente.
Amén de un escándalo de proporciones similares a la notoriedad del sacerdote.
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LF:
Yo entiendo que si una persona enferma y desesperada es además objeto de una sanción canónica, el efecto sería contraproducente.
Con la reprensión pública es suficiente.
Y no soy sospechoso de no querer que se aplique el CDC contra los heterodoxos.
Pepito en ralación a la ECONOMIA que se impone es la liberal,capitalista,no sólo no son Católicas sino que son inhumanas,no existe el sufrimiento el dolor.Las leyes que firman condenan a millones de personas al desempleo,a la explotación de hombre por el hombre,antes de firmar deberían muy bien,que dolor,y sufrimiento provocaran,en la sociedad porque serán juzgados muy severamente,y en general los ateos que conozco,mucho más humanos que estos personajes,con razón nos llaman chupasirios e incoherentes.Enemigos de la Cruz de Cristo,tan nefastos como Boff y compania pero más sutiles,manejan los grises están cerca del poder,para defender a los poderosos.
Un Abrazo Pepito
A Cristo por Maria y con el Papa
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LF:
O sea, que Benedicto XVI tenía toda la razón del mundo al definir la TL como un "fácil Milenarismo, que creyó mejorar las condiciones de vida con la revolución".
Por cierto, lo que se extiende hoy entre los evangélicos es otra cosa muy diferente y peligrosa: la teología de la prosperidad.
¡De cuántos colegios "católicos" salieron "tupamaros", "montoneros" y todo tipo de guerrilleros!
No sólo teólogos de universidades pontificias, sino laicos clarividentes como A. Methol Ferré, H. Borrat, G. Carriquiry y muchos más elevaron sus voces de alerta, en los comienzos mismos de la TL.
Bienvenida toda conversión de aquellos vientos, que desembocaron en tales tempestades. Pero, quiera Dios aprendamos de los errores a no volver a los mismos, bajo otros antifaces (feminismo extremo, adoración de la Pacha Mama, indigenismo ingrato para con excelentes misioneros hispanos...etc. etc.)
Tomo tu calificativo de "desesperado" literalmente para mostrar que las herejías -que son faltas contra la Fe, contra lo que debemos creer - arrastran a las demás virtudes teologales en su caída. En Küng ha caído la Esperanza, parece desconocer el sentido redentor del dolor y manifiesta estar dispuesto a cometer un crimen contra sí mismo, lo cual no es demasiado caritativo que digamos.
Mal está lo que mal acaba.
Y es muy cierto que muchos de ellos salieron de establecimientos educativos católicos, adonde la TL se había colado impunemente. En mi ciudad, por ejemplo, el estado mayor montonero estaba formado por 4 profesores de un establecimiento terciario parroquial. Dos desaparecieron y dos se salvaron exiliándose, uno de los cuales maneja ahora una corporación estatal con miles de empleados.
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LF:
Oiga, ¿no le importaría escribir con puntos y aparte y menos mayúsculas?
Es que no hay quien lo lea.
Pues sí, creo que ni Teología de la Liberación marxista comunista ni Teología de la Prosperidad o del Progreso liberal capitalista. Economía de la Caridad cristiana, católica, apostólica y romana. Nada más y nada menos.
Que el rico se gloríe en su humillación, y que no hagamos nada por emulación o competición ni por afán de lucro, que es una idolatría, como dijo San Pablo.
O como dijo el Bautista, que los montes se allanen y los valles se eleven, lo cual traducido a la economía equivale a decir que los ricos vivan modestamente para que los pobres puedan sencillamente vivir. La aurea mediocritas para todos que pide para sí el Sabio de la Escritura. Claro que eso para los ricos y poderosos de este mundo es intolerable y podrían mil y una pegas.
Humillación de los ricos de su alto nivel de vida, elevación de los pobres de su mísero estado, economía cooperativa en vez de competitiva, y en vez de afán de lucro personal afán de bien común universal. Y si fuésemos de paso capaces de suprimir el dinero, Becerro de Oro, mejor que mejor.
Es mi opinión, no se me asusten los liberales capitalistas ni los que piensan que el dinero es algo esencial a la economía, pues es dificil derribar al Becerro de Oro y seguramente lo seguirán disfrutando durante mucho tiempo.
Pero si no queremos que haya adoradores del Becerro de Oro, con las funestas consecuencias que ello implica, lo mejor que podemos y debemos hacer es derribarlo y hallar otro medio que tenga sus ventajas y carezca de sus graves inconvenientes y no dé tantas facilidades para las gravísimas injusticias económicas que padece la humanidad por adorarlo.
Todas estas cosas, humillación de los ricos y elevación de los pobres, cooperación en vez de competición y afán de bien común universal en vez de afán de lucro individual, hay que reconocer que van a contrapelo del egoismo humano y de la mente y praxis capitalistas, pero no podemos adaptarnos al mundo sino que debemos ser fermento transformador del mundo, también en la teoría y la praxis económica.
En suma, una revolución cristiana en base a una economía de la Caridad y no una economía del egoismo individual que inspira al capitalismo y a cierta teología de la prosperidad que se hace sutil y tal vez inconscientemente al hilo y en defensa del mismo
Pienso que de la misma manera que la Santa Madre Iglesia es muy concreta y detallada en definir los pecados en materia de sexualidad y en contra de la vida humana, también debe avanzar en ser más concreta y detallada en definir los pecados económicos que atentan contra la Caridad, amonestar severamente a sus fieles a salir de ellos y propiciar la erección de un brazo político secular dispuesto a hacer realidad tangible una economía que cumpla efectivamente con el orden de la Caridad querido por Dios.
Haría falta toda una pastoral económica y política innovadora de acuerdo con el Evangelio, comprometida sincera y ardientemente con la Costrucción del Reino de Dios en la Tierra, pues Cristo vino a traer fuego a la Tierra, el fuego de la Caridad, y es su deseo que arda incluso en el orden de la prosaica economía humana.
Todos los asuntos humanos, incluído el económico, deben arder con la Caridad de Cristo. Conformarnos con menos sria tibieza ética e inmobilismo moral, pura pereza y acedia en poner manos a la obra en la construcción del Reino de Dios.
Falta, a mi juicio, mayor claridad y concrección en la Doctrina Social de la Iglesia. Asignatura pendiente que habrá que aprobar.
Desde luego que la Iglesia ha hecho mucho al respecto de humanizar la economía, pero pienso que tiene/tenemos que avanzar y concretar mucho más en el tema económico y social, con valentía y sin temor a escandalizar a los poderes económicos y políticos mundanos.
Un fraternal abrazo. A Cristo por María y con el Papa que lo está disfrutando hoy en su recorrido franciscano por Italia. Que el hermano Francisco de Asís, cuya fiesta celebramos hoy gozosamente, nos haga partícipes de su ideal de la pobreza cristiana.
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LF:
Vale, pero sigue escribiendo todo seguido.
Gracias por vuestra participación.
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