Sin su firma no podrá entrar en vigor

El príncipe de Liechtenstein no firmará ninguna ley abortista ni aunque lo apruebe su pueblo

El príncipe heredero de Liechtenstein, Alois de Liechtenstein, se opuso claramente el domingo en Vaduz, la capital de este principado, a la despenalización del aborto, como pide una iniciativa popular. Durante un discurso pronunciado con ocasión de la fiesta nacional del principado, celebrada el 15 de agosto, el príncipe indicó que si esta iniciativa es aprobada por el pueblo, durante un referéndum previsto el 18 de septiembre, él «se opondrá» a que esa reforma entre en vigor, según indicó la agencia de noticias ATS el lunes.

(AFP/InfoCatólica) El Parlamento de Liechtenstein, que fue consultado sobre esta iniciativa destinada a autorizar el aborto hasta las 12 semanas de embarazo, también declaró que se opone a la misma. Sin la firma del príncipe, de 43 años, ninguna ley o modificación puede entrar en vigor en Liechtenstein.

Actualmente, el aborto es castigado con un año de cárcel en Liechtenstein, aunque haya sido realizado en el extranjero.

Liechestein es uno de los países más pequeños del mundo que hace frontera con Suiza y Austria. Cuenta con cerca de 35.000 habitantes, de los cuales el 76% son católicos y el 7% protestantes.

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14 comentarios

Jordi
Todo un ejemplo para quien yo me sé.
17/08/11 12:53 PM
Bruno
¡Viva el príncipe! Eso es un príncipe católico y lo demás son cuentos... o cuentistas.
17/08/11 1:50 PM
Ricardo de Argentina
Otro granito que les ha salido a los abortistas, estando fresco aún lo de Hungría.
A ver si ahora España se decide y nos da alguna alegría. ¡Aunque sea una, y pequeñita!
Mirad que en América sois todavía ejemplo y espejo.
17/08/11 2:17 PM
hedicho
Toc, toc.
Llamando al cuidadano Juan Carlos ¿Estás ahí?.
Toma ejemplo.
17/08/11 2:22 PM
Maricruz
Así se hace, príncipe!
17/08/11 3:53 PM
Faramir
Sí, Jordi. Para el que estás pensando y para el tal Balduino, que se limitó a suspender sus facultades constitucionales por unas horitas, en vez de abdicar.

Sólo las monarquías como la de Liechestein sobrevivirán a este tiempo de oscuridad.
17/08/11 4:17 PM
antonio grande
Eso, eso. El Rey de España debe leer Infocatólica y conocer cómo viene el futuro español. Porque los reyes que firman cualquier cosa que les echan en la mesa no sirven para nada en España.
17/08/11 4:35 PM
rastri
-No es facíl hoy día ser príncipe y ejercer como tal libre de las asechanzas del demagogo de la política.

-Con esta actitud de no aprobar el aborto en sus dominios, el prícipe de Alois, día a día nos da ejemplo de cómo debe de ser el mandatario, y nuevo Tomás Moro, mártir de los tiempos modernos.
17/08/11 5:53 PM
Ricardo de Argentina
Lo más lamentable del caso Balduino fue que sirvió para comprobar la jerarquía y la cantidad de católicos que aprobaron eso que hizo, que no fue más que una triste pretensión que querer quedar bien con Dios y con el Diablo.
¡Pero si hasta lo han puesto de ejemplo de monarca cristiano y coherente!
Muchos años después de muerto, una revista católica encomiaba su humildad cuando en una ocasión ofició de monaguillo en una misa. Y nada decía de esta "agachada" frente al aborto, por supuesto. Pues yo me quedo con el de Liechtestein, aunque jamás haya acolitado en su vida ni lo piense hacer.
17/08/11 6:50 PM
Forestier
¡Toc, Toc! No molesteis al monarca Juan Carlos llamando a su puerta y plantearle temas graves y trascendentes. No es lo suyo. Lo suyo, y en lo que está ocupado, es hablar sin parar por el móvil y contando sus viejos chistes, que naturalmente le ríen los "pelotaris" de su entorno.
17/08/11 6:53 PM
Alberto
¡Muy bien! así tiene que ser
17/08/11 6:54 PM
Daniel
Un ejemplo de coherencia, como el rey Balduino.
17/08/11 8:18 PM
Francesc
Para reinar no solo se necesita la testa coronada, sino también tener bien puestos los pantalones
17/08/11 9:58 PM
Fray Eusebio de Lugo O.S.H.
Por fin, desde los tiempos del Emperador Carlos I de Austria-Hungría, un soberano se comporta como debe hacerlo un Príncipe católico.Porque sabe que su poder viene de Dios,y no de un pretendido "pueblo", aunque le hayan atado las manos. Y sabe que es a Dios a quien tendrá que dar cuentas. Recemos para que en España también tengamos un soberano así, y no como lo que tenemos.
19/09/11 1:41 PM

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