(Semana/InfoCatólica) En la carta del obispo se señalaba que los católicos “nos oponemos a que los menores de edad puedan ser confiados en adopción a parejas conformadas por personas del mismo sexo y rechazamos una eventual decisión de la Corte Constitucional en este sentido”.
Con camisetas blancas con la leyenda “soy homosexual, tengo hijos, soy católico”, recibieron la comunión del mismo monseñor Salazar, en lo que constituyó una manera pacífica de rechazar la posición del prelado.
“Nosotros, los homosexuales, también somos fieles católicos y ciudadanos de buena voluntad. Tenemos hijos y los hemos criado rodeados de amor y respeto, nos resulta indignante que se ponga en duda nuestra idoneidad”, manifestó en un comunicado la comunidad de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales (LGBT).