(Agencias/InfoCatólica) El hecho se produjo cuando el Papa Benedicto XVI recorría el pasillo central de la basílica de San Pedro, presidiendo la procesión de cardenales y otros religiosos que se dirigía hacia el altar mayor para el rito. Una mujer, al parecer con problemas mentales y cuya identidad se desconoce, intentó saltar la valla. Inmediatamente, la escolta papal intervino y en el trasiego el pontífice perdió el equilibrio, pero lo recuperó inmediatamente.
Fuentes vaticanas señalaron en un primer momento que la mujer fue traladada a las dependencias de la Gendarmería vaticana y que, al parecer, no tenía malas intenciones. Sin embargo, el portavoz vaticano Federico Lombardi dijo después de la misa: «Ha sido una agresión, pero no ha sido peligrosa porque la mujer iba desarmada». El padre Lombardi agregó que la mujer fue la misma que intentó saltar un vallado para acercarse al Papa durante la misa de Navidad del año pasado.
En la plaza de San Pedro, con rachas de viento y lluvia, al menos dos horas antes del inicio de la misa de Nochebuena, la fuerte afluencia de fieles, peregrinos y turistas creó algunos momentos de inquietud, porque algunos empezaron a saltar las vallas, siendo varios de ellos sacados fuera del recinto por la gendarmería vaticana. Como es habitual en estas celebraciones, el acceso a la basílica vaticana requiere la presentación del billete que facilita gratuitamente pero con antelación la Prefectura de la Casa pontificia. Por otro lado, las pantallas gigantes en el exterior permitieron seguir la celebración a los miles de fieles congregados fuera de la basílica.