(LA TERCERA) Pasadas las 20.00 horas de este viernes se realizó un llamado a Bomberos de Santiago a raíz de un incendio en los terrenos de la iglesia de San Francisco de Borja, destinada a servicios religiosos de Carabineros. Mientras se desarrollaba una nueva manifestación en Plaza Baquedano sin que allí se reportaran incidentes, a metros del lugar encapuchados atacaron la iglesia y realizaron barricadas. El monumento a los mártires de la institución también fue objeto de la arremetida.
Las bancas de la iglesia resultaron quemadas y la estructura pronto fue alcanzada por el fuego. Voluntarios de Bomberos poco pudieron hacer ante la acción de encapuchados que impedían su acceso al lugar. El segundo comandante de Bomberos de Santiago, Diego Velásquez, señaló a 24 Horas que, «si bien es cierto nuestra central de alarmas recibió la situación que estaba ocurriendo y se procedió a un despacho de 3 compañías al lugar afectado, lamentablemente había un perímetro bastante inseguro para el trabajo bomberil, es por eso que tuvimos que tomar un resguardo coordinado con Carabineros».
«De acuerdo a la información entregada por los bomberos que pudieron acceder de infantería al lugar, el fuego estaba afectando la nave de la iglesia y una propiedad contigua que también tiene que ver con el recinto», agregó.
Bomberos finalmente pudo operar y desplegar material mayor para sofocar el fuego.
El gobierno expresó su repudio a la acción de los violentistas. «Quemar y saquear la iglesia institucional de Carabineros de Chile y atacar el monumento a sus mártires es violencia pura. Necesitamos tener una sola voz en contra del vandalismo», señaló en Twitter el subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli en su primera intervención en la red social desde que reemplazó a Rodrigo Ubilla.
Además, criticó los libelos impulsados por la oposición contra autoridades de Estado durante la crisis social, manifestando que «las acusaciones constitucionales por resguardar el orden público amparan esta violencia».
También se refirió al hecho el intendente de la Región Metropolitana, Felipe Guevara. «¿Hasta cuándo tendremos que tolerar que un grupo de delincuentes siga destruyendo nuestro patrimonio y quitándonos nuestra ciudad?», se preguntó el jefe regional. La autoridad debió enfrentar críticas por la estrategia de «copamiento policial» aplicada en Plaza Baquedano desde el 20 de diciembre.
Según fuentes policiales, no hubo un giro en la estrategia este viernes, sino que cambió el plan para que las facciones policiales se distribuyeran en el sector, ubicándose en Alameda con Ramón Corvalán y en los parques Bustamante y Forestal.
El recinto religioso de calle Carabineros de Chile 160, a una cuadra de la Alameda Bernardo O’Higgins, fue construido en 1876 y entregado a la policía uniformada hace más de 4 décadas. En el templo se realizan las ceremonias fúnebres de «capilla ardiente» para los efectivos policiales que mueren en servicio.
No es la primera iglesia que se ve afectada por las llamas en el contexto de la crisis social que vive el país hace más de 11 semanas. El 8 de noviembre, también un día viernes, un grupo saqueó la Parroquia de La Asunción, en avenida Vicuña Mackenna y utilizó cuadros y esculturas para generar barricadas y prenderles fuego. 4 días después, se registró un incendio en la Iglesia de la Veracruz del barrio Lastarria, recinto de más de 200 años que fue declarado Monumento Histórico en 1983.