(La Razón/InfoCatólica) Al haber estado durante tanto tiempo inmóvil, Danijela necesita un gran periodo de rehabilitación para recuperar peso, músculo y movilidad en las articulaciones. Ingresada en una clínica de Pforzheim (Alemania), la paciente de 25 años ha hecho muchos progresos en los últimos tres meses y ya es capaz de comunicarse, puede sostener una tableta y un lápiz, así como sentarse y seguir conversaciones gracias al proceso de estimulación de sus células cerebrales.
Según explicó el padre de la joven, Djordje Kovacevic, el tratamiento es muy caro y necesitan ayuda para continuar progresando. De momento, han gastado 50.000 euros, pero el proceso será largo y no disponen de los medios económicos suficientes para afrontar el coste de la rehabilitación. «está siguiendo un entrenamiento muy duro y ya ha logrado caminar 800 metros». La familia, que a diferencia de otras familias en casos parecidos nunca pensó en que se le practicara la eutanasia, está tratando de organizar eventos para poder sufragar los gastos, pero no es suficiente. Según indica su abuela, Maria Vesna, uno de los mayores costes es el de los pañales, que hay que cambiárselos cada tres horas, además de tener que comprar medicinas y comida».
De momento, los avances han sido notables. Le queda mucho camino por recorrer pero cuenta con un gran apoyo, el de su familia y, sobre todo, el de su hija Marija.