(AFP/InfoCatólica) «La violación de esta ley puede dar lugar a procesos judiciales para poner fin a las actividades» de las organizaciones religiosas involucradas, según la carta cuyo facsímil fue publicado en el sitio Ucrainska Pravda.
Los prelados de esta iglesia, junto con los de la Iglesia ortodoxa leal al Patriarcado de Kiev, llevan a cabo servicios religiosos varias veces por día en la Plaza de la Independencia de Kiev, conocida localmente como Maidan.
Opositores al gobierno
Esta plaza está ocupada desde noviembre por manifestantes que protestan contra la decisión del presidente Viktor Yanukovich de rechazar un pacto con la Unión Europea, en beneficio de vínculos más estrechos con Rusia.
La Iglesia greco-católica ucraniana, que observa el rito bizantino pero está en comunicón con el Papa, estaba prohibida cuando Ucrania formaba parte de la Unión Soviética.
Desde la independencia de Ucrania en 1991, la Iglesia greco-católica se convirtió en la tercera más importante del país.