(EITB/InfoCatólica) Al mismo tiempo que se remitió otro artefacto similar al director del colegio Highlands, situado en la localidad madrileña de Alcobendas y perteneciente a la congregación de los Legionarios de Cristo. Este último artefacto estalló el 3 de enero en una oficina de Correos de Vallecas cuando los empleados del servicio postal estaban clasificando la correspondencia. Una funcionaria resultó herida leve.
Según el grupo anarquista, en ambos casos se trataba de artefactos compuestos por «consoladores explosivos». El comunicado en el que se asume la responsabilidad de estos atentados afirma que «la próxima vez no fallaremos».
La tercera de las bombas fue colocada el 20 de diciembre en una sucursal bancaria de Barcelona. En ese caso el artefacto estaba contenido dentro de una cafetera metálica cargada con pólvora, tornillos y tuercas a modo de metralla y tres bombonas de gas. La reivindicación va acompaña de un esquema de la cafetera-bomba.