(EP) En este sentido, Blanco ha defendido que «si alguien quiere casarse con voluntad sostenida en el tiempo la ley le ayude a esto» y ha añadido que «como la ley facilita el divorcio, ante una situación de problemas se piensa en el divorcio; si no lo facilitara, se pensaría en una solución a esos problemas».
Parte de la propuesta consiste en el «derecho de los cónyuges a tener un proceso de ayuda y orientación para resolver la situación de crisis que les ha llevado a plantearse la ruptura», según el Foro de la Familia, y que podría ejercer cualquiera de los conyugues bajo el amparo de la justicia.
Por último, Blanco ha recordado la minusvaloración del matrimonio que ha generado el auge del divorcio así como los efectos que este puede tener sobre los hijos, en especial el fracaso escolar.