(Diario de Sevilla) Hasta el momento el Ayuntamiento hispalense y el Arzobispado de Sevilla han prometido fondos para restaurar el templo, señalando el Consistorio la necesidad de que la Administración andaluza tome parte en el proyecto.
El pasado 3 de junio, se cumplió el octavo aniversario del cierre de este emblemático templo como consecuencia de sus conocidos problemas de conservación, que se traducen ya incluso en hundimientos en los pilares. José Javier Comas, uno de los administradores del perfil de la red social facebook creado en torno a la rehabilitación de esta iglesia, ha manifestado que el monumento sencillamente ha «amanecido» con este cartel que habría sido colgado por alguna de las personas que, por una y otra vía, respalda las acciones promovidas para defender el templo.
La recuperación de las cubiertas de esta emblemática iglesia sevillana comenzó en noviembre de 2009 de la mano de J.B.A. Construcciones Bellido, S.A., gracias a 1,1 millones de euros comprometidos por la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla y la Consejería de Cultura. El proyecto, en concreto, fue licitado por el Arzobispado gracias a 705.000 euros asignados por el Ayuntamiento capitalino y 403.650 euros comprometidos por el Gobierno andaluz.
No obstante, y a cuenta del debate público despertado nuevamente en torno al destino de este templo declarado Bien de Interés Cultural (BIC) a partir de su reconocimiento como monumento en 1912, la Gerencia de Urbanismo había alertado de que, merced a las mencionadas obras de recuperación de las cubiertas, acordadas en 2008 y realizadas durante el pasado mandato, el Consistorio aún adeuda 270.000 euros, toda vez que la Administración andaluza adeudaría aproximadamente 90.000 euros.
El Ayuntamiento, de cualquier modo, ha anunciado un compromiso financiero de un millón de euros para rehabilitar el templo, mientras la Archidiócesis de Sevilla, como titular del monumento, se ha comprometido a aportar 800.000 euros a la iniciativa.