(VI/IntoCatólica) El Sínodo anglicano del verano pasado también aprobó, aunque con polémicas, esta decisión. Para que se lleve a cabo y que se convierta en ley es necesario que un nuevo Sínodo la apruebe y que el Parlamento dé su voto favorable.
Si todo sale como está previsto, sería posible que la primera mujer obispo anglicana inglesa sea ordenada dentro de tres años.
Hasta ahora las ordenaciones episcopales de mujeres en la comunión anglicana han tenido lugar fuera de la "iglesia" madre del anglicanismo. La medida supondrá un paso más en la separación de los anglicanos de la Iglesia Católica y las iglesias ortodoxas, que no aceptan ni aceptarán nunca la ordenación de mujeres.