¿Es lícito luchar por Cristo? (1 de 3)
Suele haber entre los cristianos un cierto complejo cuando se oye hablar de la “guerra por Cristo” o de “dar la sangre por defender la Fe”. El enemigo de la Iglesia Católica ha venido repitiendo hasta el cansancio que “el valor supremo es la Paz” y que nada puede oponérsele, sea cual fuere el motivo de la contienda.
Dicha posición ha sido calificada como la “herejía” del “irenismo” (de eirene, en griego, “paz”); en resumen, esta postura dice que siempre hay que aguantar cualquier tipo de agresión, tanto a uno mismo como a un tercero y jamás responder con violencia.