Secta mexicana destruye dos escuelas "por deseo de la Virgen"
Dos escuelas fueron destruidas por integrantes de una secta en cumplimiento del supuesto deseo de la Virgen, enviado a través de una vidente, que dijo que el diablo habita en los colegios de Nueva Jerusalén, poblado del oeste de México, según constató el pasado 7 de julio una corresponsal de AFP.
“La Virgen del Rosario me visitó, quiere que destruyamos las escuelas porque es ahí donde habita el diablo”, dijo a reporteros locales Rosa Gómez, quien se hace llamar Madre Catalina y es hija del fallecido Papa Nabor, fundador del pueblo.
Nueva Jerusalén es un pueblo del estado de Michoacán, fundado en 1973 por Papa Nabor (Nabor Cárdenas Mejorada), un sacerdote fallecido en 2008, que instauró un régimen de prohibiciones que incluía la de que los niños asistieran a la escuela por considerar que “los alejaba de Dios”. El impedimento terminó en 2007 cuando pobladores disconformes consiguieron abrir las escuelas.
El pasado 7 de julio “desperté con el ruido de los martillos derrumbando los muros”, dijo a la AFP Lorenzo Aguilera, vecino de una de las escuelas destruidas e integrante del consejo de padres de familia, quien narró que inmediatamente se comunicó con maestros y familiares de los alumnos, pero no pudieron impedir que destruyeran las aulas.
El día 6 en la madrugada unas cien personas armadas con mazos y picos llegaron a la escuela primaria y al preescolar, al que también prendieron fuego, para destruir los inmuebles a los que acudían unos 250 niños. “Los radicalismos no son adecuados ni conducen a una solución a favor de los habitantes”, dijo Fausto Vallejo, gobernador de Michoacán, cuya fiscalía inició investigaciones para castigar a los culpables de destruir las escuelas.
La hegemonía que mantuvo Papa Nabor, excomulgado por la Iglesia católica, en el pueblo de unos 5.000 habitantes, se rompió después de su muerte y una parte de la población optó por enviar a sus hijos a la escuela. Sin embargo, en la entrada hay un consejo de vigilancia que controla la circulación y en sus calles se puede ver que la mayoría de las mujeres visten faldas largas, usan pañuelos en la cabeza y tienen prohibido usar maquillaje.
Reacciones
Fue el Gobierno del Estado mediante su opacidad, quien permitió que la secta religiosa fundada por Nabor Cárdenas, destruyera un preescolar y una primaria, así lo consideró Eugenio Rodríguez Conejo, profesor de esa zona, en una información publicada por Mi Morelia.
Si bien los adultos son libres de escoger una creencia religiosa, el hecho de que se obligue a los niños a creer en videntes, no permitirles ir a una escuela en donde tengan la oportunidad de desarrollar sus capacidades intelectuales a través de la lectura, las matemáticas y otras materias, con el argumento de que éstas “son del diablo”, e incluso obligarlos a trabajar desde temprana edad, constituyen violaciones a sus derechos fundamentales, y todo esto dijo, pasa hoy en Nueva Jerusalén.
“A inicio de este año, estas personas tomaron la escuela, la cerraron e impidieron que se laborara en ella de manera normal; los niños tuvieron que tomar clases en casa particulares, después nos reunimos con el Gobierno del Estado y éste se comprometió a recuperarlas, pero las mantuvo selladas y no nos la regresa sino hasta pasadas las elecciones, y esta semana el día miércoles son regresadas las escuelas y hoy aparecen estas personas y las destruyen”, narró el profesor.
Agregó que desde el día que les fueron entregadas las escuelas, padres de familia y profesores estuvieron realizando los trabajos de limpieza, ha que “los fanáticos religiosos destruyen el techo, destruyen las paredes con marros y no queda piedra sobre piedra. Quedaron totalmente destruidas”. Ya que estaban destruidas, añadió, “cuando llega el subsecretario de Gobierno -Fernando Cano Ochoa- hace apenas algunas horas y lo que establece es el compromiso de que van a reiniciar la construcción de las escuelas”.
Confrontación sectaria
En alto riesgo de confrontación y violencia se encuentra la comunicad religiosa de la Nueva Jerusalén después del suceso reseñado, tal como publica Quadratín. Así lo informaron por vía telefónica seguidores de Santiago Mayor, dentro de la comunidad de la Nueva Jerusalén, quienes manifestaron que intentaron comunicarse con Santiago Tapia, encargado de asuntos religiosos en la Subsecretaría de Gobernación en Michoacán, y debido a la hora solamente fueron atendidos por una persona de nombre Gregorio, quien recibió el mensaje y hasta el momento no han tenido respuesta.
Los seguidores de Santiago Mayor, disidencia de la actual dirigencia que encabeza Martín Tour, se disputan el control de la Nueva Jerusalén desde la muerte de Nabor Cárdenas Mejorada, conocido como Papa Nabor, fundador de esa comunidad religiosa. En sus orígenes, la Nueva Jerusalén prohibió la instalación de centros escolares; sin embargo, después de su muerte, el grupo disidente, seguidor del obispo Santiago Mayor, gestionó ante las autoridades de de Gobernación federal y estatal la habilitación de inmuebles para que se impartan clases en los niveles preescolar y primaria.
Repaso de la historia
La Nueva Jerusalén, secta ubicada en la campiña del municipio terracalentano de Turicato, surgió en 1973, cuando supuestamente la Virgen del Rosario se le apareció a Gabina Sánchez, a quien le dijo que sería su vidente y en conjunto con el sacerdote Nabor Cárdenas Mejorada, le edificaran una ermita. Lo explica Quadratín.
Desde esa fecha se inició la comunidad religiosa rompiendo sus nexos con la Iglesia católica y logrando el control absoluto ‘Papá Nabor’, quien en 2007 murió a los 101 años de edad, dejando una comunidad con los usos y costumbres del rito Tridentino, con más de cinco mil habitantes. En ese lapso, en 1982, murió la vidente Gabina Sánchez, quien adoptó el nombre de María Salomé, y hasta 1989 ocupó el cargo de vidente María de Jesús Bautista, a quien nombraban Mamá María de Jesús y fue relevada por Agapito Gómez Aguilar.
A la muerte de Papá Nabor, el “obispo", Martín de Tours, apoyado por el vidente Agapito Gómez, se autonombraron herederos de Papá Nabor, quien desde los orígenes de la Nueva Jerusalén proscribió todo tipo de vida moderna: prohibió los televisores, radios, ropa moderna y hasta las escuelas. Casi un año después de la muerte de Papá Nabor, murió el vidente Agapito Gómez, y el cargo lo heredó y ejerce hasta el momento su hija Catalina.
El obispo Santiago Mayor, con un grupo de seguidores, se inconformó y comenzaron las diferencias al pugnar por entrar a la vida moderna y entre otras gestiones, lograron las claves de la SEP, para las escuelas primaria y preescolar ‘Vicente Guerrero’, que por las mismas diferencias de los grupos, la edificación que albergaba ambos centros educativos, permaneció cerrado por casi un año, hasta el pasado 4 de julio, en que fueron reabiertos. Sin embargo, al filo de las 5:00 de la mañana del 6 de julio, a dos días de reabierto el centro escolar, fue demolido por el grupo de seguidores del obispo Martín de Tours, azuzados por la vidente Catalina, lo que estuvo a punto de ocasionar enfrentamientos de graves consecuencias.
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